Casa de Mónica de Sosa y Juan Antonio Entenza

Casa de Mónica de Sosa y Juan Antonio Entenza
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Obra Arquitectónica  |  (Colonial)
Casa de Mónica de Sosa y Juan Antonio Entenza.JPG
Edificación familiar.
Descripción
Tipo:Colonial
Estilo:Gótico
Localización:Pueblo Trinidad
Uso inicial:Edificación familiar
Casa de Mónica de Sosa y Juan Antonio Entenza . Edificación de arquitectura colonial, construida a la primera mitad del siglo XVIII y actualmente bien conservada hasta nuestros días.   

Dueños del solar

En la primera mitad del siglo XVIII, el regidor Jerónimo de Sosa y su esposa Mónica Pacheco de León eran los dueños del solar extendido desde la Calle de la Boca hasta lindar con la propiedad de Nicolás Pablos Vélez, situada frente a la Calle del Guaurabo, y por el fondo, con el convento de San Francisco lo que representa un enorme lote, cosa común a los fondos originales. En este terreno, dividido en dos, se construyeron las viviendas respectivas de los hijos de Jerónimo y Mónica: José de Sosa, quien se quedó con la parte que daba a la esquina y su hermana Eugenia, a la que le correspondió el lote aledaño.


Hipoteca de la casa

En 1767, José de Sosa hipotecó la casa que era de guano y embarrado, la cual, en 1790, pertenecía a su hija Mónica de Sosa que, en 1799, junto a su esposo, Juan Antonio Entenza, imponente sobre la [[casa] de mampostería y [[teja] que fabricaron en la esquina de la casa Capitular y la Calle del jigüe, que linda por un costado con la de Manuela Ortiz y por el fondo, con la sacristía de la Iglesia de Nuestra señora de la Consolación del Convento de San Francisco según documento que fecha, indubitablemente, el período cuando comenzaron a fabricarse los hermosos techos de armadura de madera de par e hilera, cuyos tirantes cuentan al centro con una estrella y a los lados la lacería se cierra con tabillas dispuestas en rombos, que hemos denominado en celosías, como el que tiene esta vivienda, lamentablemente dividida en dos con una pared que prácticamente oculta tan relevante ejemplo. Con frecuencia los moradores de estas antiguas moradas desconocen los tesoros que les pertenecen.

Dueños de la vivienda

La casa paso a Pedro José Polo, heredero de Mónica de Sosa, y éste la vende en 1826 a [[María de los Dolores Sirú]. En 1835, Domingo Sirú la permuta con Dionisio Irarragorry y Luján. Dos años después, la tormenta conocida como de San Evaristo levantó los techos de la nave principal de la iglesia de San Francisco que se estrellaron contra dicha vivienda, con fachada reconstruida y remodelada a la manera del siglo XIX. En 1859, María del Rosario de Yrarragorry junto a su hermana se adjudicó la casa mortuoria de sus padres en la]] calle Real del Jigüe]] esquina a la de la Boca y la impone a favor de María Trinidad Sánchez de Irarragorry, quien a principios del siglo XX era dueña de aquella y de otra construida en su lindero.

Fuente

Fuente: A.H.T. Protocolo de Tomás de Herrera de 1741, escritura de 29 de mayo; Protocolo de Tomás Herrera de 1745, escritura del 29 de mayo; Protocolo de Antonio Ramírez Barroso de 1767, escritura del 6 de octubre: Protocolo de Pedro José García de 1790, escritura de del 12 de octubre: Protocolo de José Mariano de Piedra de 1799, escritura del 20 de agosto, f.278 v.; Protocolo de Juan Matamoros de 1826, escritura del 13 de abril, f.89; Protocolo de Cipriano de Villafuente de 1835, escritura del 29 de octubre, f. 310 v.; Protocolo de Manuel Aparicio de 1859, escritura del 31 de mayo, f.275 v.; Registro de la Propiedad, tomo 56, folio 161.