Children's Games

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Children's Games (Cuadro)
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Cuadro del pintor Mexicano Rufino del Carmen Arellanes Tamayo esta pintura representa a tres niños jugando en círculo.
Datos Generales
Autor(es):Rufino del Carmen Arellanes Tamayo
Año:1959
País:México
Estilo pictórico:Expresionismo
Técnica:Pintura al óleo sobre lienzo
Dimensiones:76,5 cm X 101,6 cm cm
Localización:Museo Tamayo Arte Contemporáneo

Children's Games en su versión en Inglés o Juegos Infantiles, cómo también se le conoce fue pintado por el artista modernista mexicano Rufino Tamayo en 1959, Esta pintura representa a tres niños jugando en círculo, sus cuerpos reducidos a un revoltijo de formas irregulares y planas que sugieren cabezas, piernas, torsos y brazos.

Historia

Aunque el pintor residió en la Ciudad de México durante gran parte de su vida y carrera, viajó mucho por Europa y los Estados Unidos, pasando una cantidad significativa de tiempo en Nueva York y París en las décadas de 1920, 1930, finales de 1940 y 1950.

En desacuerdo con las narrativas políticamente cargadas de los muralistas mexicanos: Diego Rivera, José Clemente Orozco y David Alfaro Siqueiros, sin embargo Tamayo buscó un vocabulario más universal en sus pinturas, donde algunos de sus temas y su elección de colores se inspiraron en el arte y la cultura mexicanos, sus composiciones planas y formas abstractas se derivan del modernismo europeo.

Esta gran composición abstracta fue pintada en París por uno de los artistas mexicanos más conocidos, Rufino Tamayo.

La pintura y sus personajes

Esta pintura representa a tres niños jugando en círculo, sus cuerpos reducidos a un revoltijo de formas irregulares y planas que sugieren cabezas, piernas, torsos y brazos. Los elementos inconexos crean un ritmo sincopado que se ve reforzado por la aplicación agitada de pintura.

La vista de los expectadores sigue estos elementos inconexos alrededor de la composición de colores brillantes en un ritmo sincopado que se ve realzado por la aplicación agitada de pintura del artista.

Si bien es posible que no podamos descifrar los detalles de esta escena, el artista ha recreado los movimientos, los sonidos, la luz y el calor asociados con ella.

Síntesis biográfica

Rufino del Carmen Arellanes Tamayo (Oaxaca de Juárez, 25 de agosto de 1899 - Ciudad de México, 24 de junio de 1991), fue un pintor mexicano. Figura capital en el panorama de la pintura mexicana del siglo XX, Rufino Tamayo fue uno de los primeros artistas latinoamericanos que, junto con los representantes del conocido "grupo de los tres" (Rivera, Siqueiros y Orozco), alcanzó un relieve y una difusión auténticamente internacionales. Como ellos, participó en el importante movimiento muralista que floreció en el período comprendido entre las dos guerras mundiales.

Sus obras, sin embargo, por su voluntad creadora y sus características, tienen una dimensión distinta y se distinguen claramente de las del mencionado grupo y sus epígonos.

Coincidiendo en sus aspiraciones con el quehacer del brasileño Cándido Portinari, el trabajo de Rufino Tamayo se caracteriza por su voluntad de integrar plásticamente, en sus obras, la herencia precolombina autóctona, la experimentación y las innovadoras tendencias plásticas que revolucionaban los ambientes artísticos europeos a comienzos de siglo.

Esta actividad sincrética, esa atención a los movimientos y teorías artísticas del otro lado del Atlántico lo distinguen, precisamente, del núcleo fundamental de los "muralistas", cuya preocupación central era mantener una absoluta independencia estética respecto a los parámetros europeos y beber solo en las fuentes de una pretendida herencia pictórica precolombina, resueltamente indigenista.

También desde el punto de vista teórico tiene Tamayo una personalidad distinta, pues no suscribió el radical compromiso político que sustentaba las producciones de los muralistas citados y prestó mayor atención a las calidades pictóricas.

Es decir, aunque por la monumentalidad de su trabajo y las dimensiones y función de sus obras podría incorporarse al movimiento mural mexicano, diverge, no obstante, por su independencia de los planteamientos ideológicos y revolucionarios, y por una voluntad estética que desarrolla el tema indio con un estilo más formal y abstracto.

Su obra como muralista, ciclópea y hecha en el más puro «mexicanismo», culmina en el mural El Día y la Noche. Realizado en 1964 para el Museo Nacional de Antropología e Historia de México, simboliza la lucha entre el día (serpiente emplumada) y la noche (tigre). Ese mismo año recibió el Premio Nacional de Artes.

Sus últimos trabajos monumentales datan de 1967 y 1968, cuando por encargo gubernamental realizó los frescos para los pabellones de México en la Exposición de Montreal y en la Feria Internacional de San Antonio (Texas). A partir de entonces, retirado casi, se dedicó de lleno a transmitir el saber acumulado en su larga e intensa vida artística.

Su interés por el arte precolombino cristalizó al inaugurarse en 1974, en la ciudad de Oaxaca, el Museo de Arte Prehispánico Rufino Tamayo, con 1300 piezas arqueológicas coleccionadas, catalogadas y donadas por el artista.

El artista murió en 1991 a la edad de 91 años.

Fuentes