Empréstitos del Estado

Empréstitos del Estado
Información sobre la plantilla
EmprestitoE.jpg
Concepto:Préstamos que solicita el Estado para solventar sus necesidades financieras.

Empréstitos del Estado. Los empréstitos del Estado son aquellos préstamos que solicita el Estado para solventar sus necesidades financieras. Son los que se realizan en los mercados de dinero extranjeros o los que conceden, sean gobiernos extranjeros o sean organizaciones internacionales.

Empréstito

Empréstito es el nombre que particularmente se da a los préstamos recibidos por los Gobiernos.

Principales clasificaciones

Las principales clasificaciones que se hacen de los empréstitos son:

  • por la época del reembolso, en temporales y perpetuos;
  • por la cantidad que el Gobierno percibe de aquella que representan los títulos que entrega, en empréstitos a capital real y a capital nominal, y
  • por la manera de contratarlos, según que se emplea la emisión, la suscripción ó la adjudicación.

En los empréstitos temporales el Gobierno se obliga a devolver el capital en un plazo fijo, o a pagar una renta a los acreedores por espacio de cierto tiempo. — Esta última forma, que era antes la más usada, dio lugar a las llamadas anualidades, rentas vitalicias, rentas viajeras y tontinas.

En los perpetuos, el Gobierno se compromete únicamente a satisfacer el interés convenido; pero esto no quiere decir que no haya de devolver nunca el empréstito, sino que se reserva la elección del momento en que le sea posible ó favorable hacerlo.

Se dice empréstito a capital real, aquel en que el Estado recibe íntegra la suma que se expresa en los títulos, sea cuando éstos se emiten a la par; y a capital nominal, el que confiesa recibir una cantidad mayor de la que percibe realmente. La invención del capital nominal es un artificio que no tuvo más objeto que ocultar al país el verdadero estado de su crédito, y fingir que a su nombre se recibía el dinero barato, aunque costase muy caro. Para ello, se ha adoptado siempre un tipo muy bajo de interés, menor del 5 por 100 generalmente, en épocas en que era mucho más alto el precio del capital, y como los capitalistas no podían prestar a ese tipo, daban por el solo 50 unidades en vez de 100. Resultado, que el 5 viene a ser interés de 50, que el verdadero precio es 10 por 100, y que habiendo de entregarse 100 en títulos por cada 50 efectivos, la operación sale a 10 por 100 de interés y 50 por 100 de capital, puesto que se reconoce doble del recibido.

Conocido ya ese juego, los empréstitos han continuado, sin embargo, haciéndose de manera tan ruinosa para conservar un mismo interés a toda la Deuda. Esta unidad tiene sin duda grandes ventajas; pero no puede justificar el absurdo del capital nominal, porque, con ese sistema, perjudica a las naciones la subida de su crédito, que convierte en efectivas y obliga a satisfacer sumas puramente nominales en su origen.

Los empréstitos se contratan por emisión, llevando al mercado los títulos de la Deuda y colocándolos al precio que éste fija; por suscripción, señalando el Gobierno la cantidad que necesita y los tipos que recibirá el dinero que los particulares le entreguen; y por adjudicación, que puede ser directa, y entonces el Gobierno arregla las condiciones del préstamo con una casa de banca o Compañía, y en subasta, cuando el empréstito se cede al que hace mejores proposiciones.

Época imperialista

Los empréstitos han alcanzado amplia difusión en la época imperialista, sobre todo después de la Segunda Guerra Mundial. Los empréstitos exteriores, junto con las inversiones directas de capital privado, constituyen una de las formas de la exportación de capitales, típica de la época imperialista. Tales empréstitos, en manos de las potencias imperialistas, representan un instrumento para apoderarse de mercados y fuentes de materias primas de los países prestatarios, un medio para dominar estos países económica y políticamente, una esfera de ventajosa inversión de capitales.

Con frecuencia, la deuda exterior hace dependientes del país acreedor a los países en desarrollo. Durante el capitalismo premonopolista solían actuar en calidad de acreedores bancos o capitalistas extranjeros, en el período imperialista, sobre todo después de la Segunda Guerra Mundial y debido al crecimiento del Capitalismo monopolista de Estado, cada vez con más frecuencia actúa como acreedor el Estado.

Exportación de capitales

El exportador más importante de capitales del Estado son los Estados Unidos. Con empréstitos y subsidios, los círculos dirigentes de dicho país sostienen en las diferentes partes del mundo corrompidos regímenes reaccionarios. Son también importantes exportadores de capitales del Estado, Inglaterra, Francia, la República Federal Alemana y el Japón.

Varias organizaciones internacionales conceden asimismo empréstitos exteriores. Las más importantes son el Fondo Monetario Internacional y el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento. En realidad, los empréstitos de los Estados imperialistas constituyen una forma de explotación de los países débilmente desarrollados, un método para esclavizarlos.

Empréstitos de paises socialistas

Sobre bases de principio totalmente diferentes se establece la ayuda de los países socialistas. La Unión Soviética concedía empréstitos y créditos a los países socialistas y a los que en Asia, África y América Latina se han liberado del yugo colonial, y lo hace guiándose por los principios del internacionalismo proletario y de la ayuda fraterna.

Los empréstitos y créditos exteriores de los Estados socialistas ayudan a los jóvenes Estados a realizar sus planes de industrialización. Con el auxilio de tales empréstitos y créditos, los países en desarrollo consolidan su independencia política, crean una economía nacional independiente.

Los empréstitos y créditos soviéticos se concedían en condiciones extraordinariamente favorables, al margen de toda condición política o militar. La suma total de los créditos soviéticos y de otros tipos de ayuda concedidos a países económicamente atrasados se cifraba en casi en tres mil millones de rublos nuevos. A finales de 1962, con ayuda de los créditos soviéticos se habían construido o se estaban construyendo en los países de Asia y África cerca de 480 empresas industriales y de otro tipo, entre ellas 34 plantas siderúrgicas y para la elaboración de metales no ferrosos, mas de treinta empresas metalúrgicas y de construcción de maquinaria, más de veinte refinerías de petróleo y fábricas de productos químicos, veinte centrales eléctricas. etc. Con la ayuda de los otros países del sistema socialista, en los jóvenes Estados de Asia y África construyeron más de 400 grandes empresas industriales.

Fuentes