Guerras romano-samnitas (siglos IV y III a. n. e.)
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Guerras Romano-Samnitas. Fueron un serie de conflictos armados de la Antigüedad que enfrentaron principalmente al pueblo itálico de los samnitas, que dominaban los Apeninos al sur del Lacio, contra la incipiente República Romana por el control de la Italia central. En el intervalo entre el 343 y el 290 a. C. hubo tres guerras entre ambos contendientes, que propiciaron el completo sometimiento de los samnitas al poderío romano.
Las tribus montañesas samnitas de los Apeninos, buscando tierras mas fértiles, decidieron expandirse hacia la Campania, dominada entonces por los etruscos, los cuales impedían a los samnitas llegar hasta el mar Tirreno, por lo que Roma se alió indistintamente tanto con los brutios, lucanos o a los mismos samnitas.
Por lo que Roma vió en estas guerras la ocasión de expandir sus territorios, tal y como el senado y sus influyentes pro-hombres romanos propiciaron estas nuevas guerras, como dominio personal y comercial de todos ellos.
Sumario
Primera Guerra Samnita (343 a 341 a.J.)
Por siglos los sabelios, de las tierras altas de los Apeninos, habían luchado por la fuerza, su camino hacia las llanuras entre las colinas y el Mediterráneo. Pero, los etruscos, y los latinos, los habían mantenido en control, y por los pasados cien años, la dirección de su expansión, no había sido en Lacio, sino al este, y el sudeste. Éstos habían comenzado a introducirse hacia Campania, donde ellos se habían vuelto, hacia una vida más civilizada, y, se habían vuelto también, en menos bélicos, y menos equipados (militarmente), para hacer frente a sus parientes de las colinas.
El más poderoso grupo de las tierras altas, los confederados samnitas, fueron ahora, hacia mediados del siglo IV (a.C.), pululando hacia las llanuras, hasta sus civilizados precursores en la Campania, así, más al este, y al sur, lucanos, y bruttianos, fueron presionando a las colonias griegas de Magna Gracia. Los guerreros samnitas, de las colinas cercanas, deseaban usar los pastizales de las llanuras, para sus animales, — tierras de las llanuras, que la gente había cercado. En efecto, los semi -civilizados fueron martillando, lo sobre -civilizado. Los griegos fueron apelando por ayuda a Epiro mientras que aquellos en los llanos, — los campanios — apelaron a Roma, y Roma fue en su rescate. Envíados romanos, fueron a los líderes, entre los habitantes de las colinas, para discusiones, y fueron rudamente tratados.
La Primera Guerra Samnita fue breve. Se caracterizó por victorias romanas en el campo (como en la batalla de Monte Gaurus), y por un motín por parte de los soldados, el que fue suprimido, por el sentido común, del distinguido dictador Marco Valerio Corvus, de que se dice, hubo vencido al galo Goliat, en combate único, en su juventud. La guerra duró dos años, terminando en 341 a.C., con Roma triunfante, y los samnitas dispuestos a hacer la paz.
La guerra fue terminada por una paz apresurada, como los romanos, los campanios desertan, para hecer bajar una revuelta (durante la Guerra Latina), de sus aliados latinos. Los miembros de la Liga Latina, habían sido forzados, (a entrar) a la guerra samnita, sin su consulta, y ellos resintieron su dependencia de Roma.
A pesar de su brevedad, la Primera Guerra Samnita, resultó en la adquisición romana de las ricas tierras de Campania, con su capital de Capua. Historiadores romanos, han modelado su descripción, de los inicios de la guerra, en el historiador griego Tucídides, que cuenta de la epidemia de la guerra del Peloponeso, entre Atenas, y Esparta.
Sin embargo, fueron ellos, probablemente correctos, al declarar que los campanios, cuando combatían por la ciudad de Capua, con los samnitas, aliados ellos mismos con Roma, en orden a utilizar sus fuerzas, para resolver la querella. Si así fue, éste pudo haber sido, la primera de muchas instancias, en las que Roma, fue a la guerra, después de haber sido invitada en alianza, por un estado débil, ya en guerra.
Una vez invitada, Roma, usualmente absorbía al estado aliado, después de vencer a su adversario. En cualquier caso, Campania ahora, y de alguna forma, se volvió sólidamente adjunta a Roma; en donde pudo haber sido concedida, la ciudadanía romana, sin derecho a voto en Roma (civitas sine suffragio). Campania fue una adición mayor, a la fortaleza de Roma, y en mano de obra.
Segunda (ó Gran) Guerra Samnita (326 a 304 a.C.)
En 327 a.C., la guerra estalló otra vez, entre los pueblos de las colinas samnitas, y los de la llanura de Campania. Los samnitas, establecieron una guarnición en Neapolis, — una ciudad habitada por griegos —. Otra vez, el pueblo de la llanura solicitó la asistencia de Roma, y de nuevo Roma, fue a la guerra contra los samnitas.
Los romanos pronto confrontan a los samnitas, en el centro del valle del río Liris, chispa inicial, de la Segunda, ó Gran Guerra Samnita (326 al 304 a.C.), la cual duró veinte años, y que no fue una empresa defensiva para Roma. Durante la primera mitad de la guerra, Roma sufrió serias derrotas, pero en la segunda mitad, vió la recuperación romana, su reorganización, y su victoria final.
Al inicio, los ejércitos romanos fueron tan exitosos, que en 321 a.C., los samnitas demandaron la paz. Pero los términos ofrecidos, fueron tan estrictos, que éstos fueron rechazados, y la guerra continuó.
En el mismo año (321 a.C.) los dos cónsules, dirigiendo una fuerza de invasión, hacia el interior de Samnia, fueron atrapados en un paso de montaña, conocido como Caudine Forks, donde ellos no podían ni avanzar, ni retirarse, y después de una desesperada lucha, pudieron haber sido aniquilados, si no hubieran acordado, a los humillantes términos, impuestos por el samnita, Victor Poncio. Las tropas fueron desarmadas, y obligadas a pasar 'bajo el yugo', hombre a hombre, como un enemigo vencido y deshonrado. Este antiguo ritual era una forma de subyugación, por la cual el que había sido derrotado, tenía que arquearse, y pasar bajo un yugo, usado por bueyes. (En este caso, éste era un yugo hecho de lanzas romanas, ya que se entiendía que la más grande indignidad, para el soldado romano, era perder su lanza).
Seiscientos equites tuvieron que ser entregados como rehénes. Mientras tanto, los cautivos cónsules, se comprometieron a sí mismos, en un tratado por un período de cinco años, con los más favorables términos para los samnitas. Más tarde, los historiadores romanos, sin embargo, trataron negar esta humillación, inventando historias del rechazo de Roma a la paz, y su venganza sobre los samnitas.
La guerra estuvo en punto muerto por cinco años. Y, como Roma esperó para reiniciar la guerra, fortaleció su poderío militar incrementando el reclutamiento. En 320 a.C., y 319 a.C., los romanos regresaron para vengarse contra los samnitas, y los vencieron en lo que el historiador romano Livio, describió como uno de los más grandes acontecimientos en la historia romana. En 315 a.C., después del reinicio de las hostilidades, Roma sufrió una aplastante derrota en Lautulae.
Hasta 314 a.C., el éxito parecía fluir para los samnitas. Campania estuvo a punto de liberarse de Roma. La paz fue establecida entre Roma y algunas ciudades samnitas. Entonces la marea cambió en 311 a.C., cuando los samnitas, fueron sumados por ciudades etruscas, que habían decidido unirse al enfrentamiento contra el poder romano. La intervención de los etruscos en 311 a.C., vino a terminar los anteriores, cuarenta años de paz.
Después del primer golpe los romanos continuamente vencieron a ambos enemigos. La guerra se volvió un concurso por la dominación de gran parte de Italia. Entre 311 a.C., y 304 a.C., los romanos y sus aliados, ganaron una serie de victorias contra ambos, los etruscos y los samnitas.
En 308 a.C., los etruscos demandaron por paz, la cual les fue concedida en severos términos, y en 304 a.JC., samnitas obtuvieron términos de paz, probablemente severos, pero no aplastantes. Para asegurarse, los romanos demandaron inspecciones, y la paz fue establecida entre romanos y samnitas, que se mantuvo hasta 298 a.C.
Antiguas fuentes afirman que Roma inicialmente pidió prestadas tácticas hoplitas (el uso de las falanges), desde los etruscos (utilizados durante los siglos VI, ó V a.JC.), pero más tarde adoptó el manípulo, sistema de los samnitas, probablemente como resultado del éxito samnita para ese tiempo. La formación manipular se asemeja a un patrón de tablero de ajedrez, en los que los sólidos cuadros (cuadrados), de soldados, fueron separados por espacios cuadrados vacíos. Eso fue mucho más flexible, que la sólidamente masiva formación hoplita, permitiendo al ejército maniobrar mejor, en terreno accidentado. El sistema fue retenido a través de toda la República y en el Imperio.
Durante esos mismos años Roma organizó una rudimentaria armada, construyó sus primeras carreteras militares (construcción de la Via Appia fue iniciada en 312 a.C., y de la Vía Valeria en 306 a.C.), e incrementó el tamaño de su leva militar anual, como se ha visto desde el incremento de tribunos militares, elegidos anualmente, desde 6 a 16.
Durante el período 334 a.C. – 295 a.C., Roma fundó 13 colonias contra los Samnitas y crearon seis nuevas tribus rústicas en territorio anexado. Durante los últimos años de la guerra, los romanos también extendieron su poder hacia el norte de Etruria y Umbria. Varias campañas exitosas forzaron a las ciudades en éstas áreas, a volverse aliados de Roma.
Tercera Guerra Samnita (298 a 290 a.C.)
En el umbral del siglo III a.C., los samnitas decidieron que éstos se habían cansado de paz, y otra vez trataron de frustrar la dominación romana de Italia. La Tercera Guerra Samnita fue el último desesperado intento de los samnitas, para mantenerse independientes. Ellos persuadieron a los etruscos, umbrios, y galos, para unirse a ellos.
La guerra comenzó de nuevo en 298 a.C., en las llanuras cercanas a Neapolis. Cuando los romanos vieron a los etruscos y los galos en el norte de Italia, uniéndose a los samnitas, ellos estuvieron alarmados. Los romanos se habían beneficiado, de la falta de coordinación entre sus enemigos, pero ahora Roma encaraba a todos ellos a la vez.
Algún alivio llegó con la victoria sobre los samnitas en el sur, pero la crucial batalla por Italia, tomó lugar en 295 a.C., en Sentinum en Umbria, en lo que ahora se considera como Italia Central, donde más tropas fueron dedicadas que en cualquier batalla anterior en Italia. En principio los romanos dieron el paso antes de un ataque (hecho) por galos en carros de guerra. Entonces, los romanos corrieron y aplastaron a samnitas y galos, los romanos se beneficiaron de su auto-disciplina, la calidad de sus legiones militares, y su liderazgo militar.
No obstante, los obstinados samnitas pelearon hasta la derrota final en 291 a.C. (en Aquilonia), donde hizo más desesperada resistencia, y en el año siguiente, la paz fue hecha en los más favorables términos para los samnitas, que Roma habría podido conceder, a menos tenaz enemigo. Las ciudades campanias, italianas ó griegas, a través de los cuales Roma había sido envuelta en las Guerras Samnitas, Capua y otros, son ahora aliados de Roma, con variables grados de independencia. Colonias militares romanas fueron asentadas en Campania, así como también, en las afueras orientales de Samnia.
Después de la gran victoria de Roma en Sentinum, la guerra lentamente va menguando, llegando a su fin en 282 a.C. Roma emerge dominando toda la península italiana, excepto por las ciudades griegas en el extremo sur de Italia y en el valle del Po, el valle del Po continúa siendo tierra ocupada por galos.
Véase También
- Alejandro_Magno
- Grecia
- Atenas
- Guerra_de_Troya
- Ares
- Afrodita
- Atenea
- Segunda_Guerra_Púnica
- Cartago
- Génova
- Batalla de Moscú
- Batalla de Stalingrado
- Segunda Guerra Mundial
- Batalla de Lepanto
- Batalla de Villalar
- Batalla de Vilcapugio
- Batalla de Midway
- Batalla de Cabra
- Guerra de Flandes
- Batalla de Rocroi
- Batalla de Chiclana
- Batalla de Hampton Roads
- Batalla de Carras
- Batalla_de_Miraflores
- Guerras_Púnicas
- Guerra_de_los_Marcomanos
- Batalla_Naval_de_Accio
- Guerras_Médicas
