Hidrosadenitis
| ||||
Hidrosadenitis: Es un tipo de enfermedad inflamatoria cutánea crónica que suele manifestarse por primera vez en la adolescencia, sobre todo en mujeres, a través de abscesos recurrentes. Estos abscesos surgen en ingles, en la zona del pubis, en la zona de las mamas y en las nalgas.
Sumario
Causas
- Hereditaria: Si los padres tienen hidrosadenitis, es posible que los hijos la desarrollen también.
- Hormonas: Las mujeres suelen tener más brotes antes de tener la regla y tras el embarazo.
¿Qué circunstancias agravan la hidrosadenitis?
- Sobrepeso: La irritación, la mayor fricción y la sudoración agravan esta condición cutánea en las personas con sobrepeso.
- Usar ropa ajustada o que transpire poco.
- Fármacos anticonceptivos y litio.
Diagnóstico
No tiene pruebas clínicas concretas, se detecta examinando los abscesos, la cicatrización de los mismos, la recurrencia de los brotes y su presencia en ciertas zonas.
Síntomas
En un primer momento las personas con hidrosadenitis tienen picor, eritema y sudoración excesiva en ciertas zonas. También suele haber dolor y molestias en ciertas zonas con nódulos subcutáneos que derivan en abscesos. Más adelante el paciente tiene una cavidad inicial, que va creciendo de tamaño y que deriva en una red de cavidades fibróticas interconectadas. Debe diferenciarse de la enfermedad de Crohn, ya que las lesiones perianales pueden ser uno de los síntomas de esta dolencia y puede ser casi indistinguible.
Tratamiento
El médico intentará mantener la higiene en las zonas afectadas, reducir la carga bacteriana e impedir que se agraven. Suelen tener buen resultado los tratamientos con corticoides intralesionales, pero en ocasiones solo de forma temporal. Los médicos recomiendan que es importante dejar de fumar, intentar mantener el peso en márgenes adecuados, evitar llevar ropas ajustadas que friccionen y hagan sudar y tener cuidado con el uso de desodorantes y productos de depilación.
Complicaciones
- Disminución de la movilidad en extremidades inferiores y axilas debido a la cicatrización y a la fibrosis.
- Queratitis intersticial.
- Infecciones locales y sistémicas.
- Fístulas en el sistema urinario y/o excretor.
- Anemias
- Neoplastias de pulmón y boca
