Intestino irritable

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El síndrome del intestino irritable (SII) es un trastorno funcional digestivo.

Definición y diagnóstico

El síndrome del intestino irritable (SII) es un trastorno funcional digestivo que se caracteriza por la asociación de malestar o dolor abdominal y alteraciones en el hábito deposicional

Dependiendo del trastorno evacuatorio predominante el SII se divide en: SII con predominio de diarrea, SII con predominio de estreñimiento y SII con ritmo deposicional alternante. El diagnóstico de SII es clínico, ya que no existen alteraciones orgánicas ni hay ninguna prueba que pueda establecer su existencia de forma taxativa. Las exploraciones complementarias sirven para descartar otras enfermedades, y su elección dependerá de cuál sea la sospecha diagnóstica y los factores de riesgo del paciente. Los síntomas o signos de alarma que condicionan la realización de exploraciones para establecer el diagnóstico diferencial con otras patologías orgánicas son: inicio de los síntomas en paciente de más de 50 años, alteraciones en la exploración física, diarrea persistente, presencia de síntomas nocturnos, fiebre, anemia o pérdida de peso no intencionada, presencia de sangre en heces, o historia familiar de cáncer colorrectal, enfermedad inflamatoria intestinal o enfermedad celíaca.

Criterio diagnóstico

En un intento de unificar el diagnóstico clínico del SII se han descrito una serie de criterios, que agrupan los diferentes síntomas y pretenden establecer un diagnóstico positivo del síndrome. Los criterios vigentes desde 1999 son los llamados de Roma II, aunque en la actualidad se están elaborando los de Roma III. Además del diagnóstico del SII, en los criterios de Roma II, también se definen los subtipos de SII, mediante los siguientes síntomas:

  • 1.Menos de 3 deposiciones por semana.
  • 2.Más de 3 deposiciones por día.
  • 3.Deposiciones duras o en bolas.
  • 4.Deposiciones blandas o líquidas.
  • 5.Esfuerzo excesivo durante la defecación.
  • 6.Urgencia defecatoria

Un número limitado de estudios de laboratorio pueden ser útiles en el diagnóstico diferencial de algunos casos de SII, incluyendo:

  • a)hemograma
  • b)bioquímica sanguínea
  • c)velocidad de eritrosedimentación
  • d)estudio de heces (huevos, parásitos y sangre oculta)
  • e)hormonas tiroideas
  • f)anticuerpos para detección de enfermedad celíaca (antitransglutaminasa).

Los estudios endoscópicos y las pruebas de aliento para la detección de intolerancia a la lactosa deben realizarse según las características clínicas individuales de cada paciente (edad, signos de alarma, historia familiar). Es recomendable que los médicos adopten un abordaje basado en evidencias en su evaluación diagnóstica y consideren la probabilidad preprueba para el diagnóstico de otra entidad como el cáncer de colon, enfermedad inflamatoria intestinal o esprúe celíaco, antes de indicar dicha prueba. Aunque la probabilidad preprueba de identificar una lesión orgánica del colon es baja en el SII, la mayoría de los gastroenterólogos están de acuerdo en que los pacientes mayores de 50 años deben estudiarse con colonoscopia.

La falta de respuesta a un tratamiento inicial de 6-8 semanas puede indicar la realización de estudios adicionales dependiendo del síntoma predominante. En caso de estreñimiento, el tránsito colónico, la manometría anorrectal o la expulsión con balón ayudarán a detectar una inercia colónica o un estreñimiento obstructivo. En enfermos con diarrea, el aspirado y biopsia duodenal son útiles para la investigación de Giardia lamblia o Esprúe celíaco, y las biopsias del colon cuando existe sospecha de Colitis microscópica.

Tratamiento

Medidas generales: Algunos estudios sugieren que establecer una adecuada relación terapéutica con el paciente se asocia con una disminución del número de visitas, una mayor satisfacción del paciente e incluso una reducción de su sintomatología. Deben tenerse en cuenta los siguientes aspectos: • Explicar exhaustivamente y con un lenguaje inteligible la enfermedad. • Escuchar atentamente al paciente y determinar la comprensión de su patología y sus dudas (respondiendo a ellas). • Establecer unos límites realistas y consistentes. • Implicar al paciente en el tratamiento. En cuanto a lo cambios de estilo de vida, la realización de ejercicio físico, una dieta equilibrada y dedicar un tiempo suficiente y adecuado para la defecación, podrían mejorar la calidad de vida de determinados pacientes, aunque no se dispone de evidencia científica sólida sobre estas intervenciones. Además, algunos pacientes pueden atribuir sus síntomas a factores dietéticos, por lo que suelen pedir recomendaciones.

El sorbitol (edulcorante), la cafeína, el alcohol, las grasas o la leche pueden exacerbar los síntomas. Aunque tradicionalmente se han recomendado los alimentos ricos en fibra para los pacientes con SII, su uso en los pacientes con diarrea es controvertido y no alivia el dolor abdominal, e incluso lo empeora.

Tratamiento farmacológico

  • Fibra. Diversos estudios han evaluado los efectos de los diferentes tipos de fibra (solubles e insolubles) en la mejoría global y sintomática de los pacientes con SII; en general, mejora la sintomatología, a excepción del dolor abdominal. El efecto beneficioso sólo es evidente con la fibra soluble (ispagula, psilio) y no con la insoluble (salvado de trigo y fibra de maíz).
  • Laxantes. A pesar de que los laxantes estimulantes han demostrado su eficacia en el tratamiento del estreñimiento, no se dispone de ensayos clínicos aleatorizados que evalúen su eficacia en el SII (con estreñimiento).
  • Antidiarreicos. La Loperamida es un tratamiento efectivo para la diarrea, pero sin diferencias respecto a placebo en la sintomatología global del SII o en el dolor abdominal. No debe usarse en pacientes con SII y estreñimiento, y emplearse con precaución en pacientes con SII que tienen un hábito deposicional alternante.

En ocasiones se utilizan de manera empírica las resinas de intercambio aniónico (colestiramina, colestipol) o la codeína para tratar la diarrea del SII, pero no existen evidencias científicas de su utilidad.

Enlaces externos

Fuente

  • Síndrome del Intestino Irritable. Disponible en:Cochrane. Consultado el 5 de junio del 2017.
  • Síndrome del Intestino Irritable. Disponible en:Medlineplus. Consultado el 5 de junio del 2017.
  • Alteraciones del epitelio intestinal marcan gravedad del Síndrome del Intestino irritable. Disponible en:Boletin al Dia. Consultado el 6 de junio del 2017.
  • Síndrome del Intestino irritable con estreñimiento y estreñimiento funcional en el adulto. Disponible en:Mgyf. Consultado el 6 de junio del 2017.