Jorge Ramón González Ponciano
|
Jorge Ramón González Ponciano. Reconocido sociólogo guatemalteco. Obtuvo su título de Licenciatura en la Escuela Nacional de Antropología e Historia de México, D.F. y su Ph.D. en la Universidad de Texas en Austin. La mayoría de sus aportes teóricos abordan el tema del racismo en Guatemala. Es investigador del Centro de Estudios Mayas del Instituto de Investigaciones Filológicas de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Sumario
Síntesis biográfica
Nació en 1961 en Guatemala. Inició sus estudios en la Escuela de Historia de la Universidad de San Carlos de Guatemala en 1978. Posteriormente, en 1980, se incorporó a la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) de México, D.F. y se graduó de Licenciado en Antropología Social. Su tesis examina el indigenismo guatemalteco durante los gobiernos de Juan José Arévalo (1945-1951) y Jacobo Árbenz Guzmán (1951-1954). Trabajó como analista económico en la Agencia Centroamericana de Noticias ENFOPRENSA en México, D.F. Se trasladó a Chiapas, México, en 1987 y empezó a trabajar como investigador en el Instituto Chiapaneco de Cultura. Asimismo, fue asesor técnico de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología en la región Marqués de Comillas de la Selva Lacandona.
Trayectoria profesional
Ha sido investigador invitado en el Centro de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Stanford, California (1991); Centro de Investigaciones Regionales de Mesoamérica (CIRMA 1998, 2001-2002) y del Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias de la Universidad Nacional Autónoma de México (CRIM-UNAM, 2004) y becario del Servicio Universitario Mundial con sede en Ginebra, Suiza; del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México, del departamento de antropología de la Universidad de Stanford, del Centro de Estudios Latinoamericanos de la misma universidad, del departamento de antropología de la Universidad de Texas en Austin, del Centro de Investigaciones Regionales de Mesoamérica en Antigua Guatemala, con sede en Cuernavaca, Morelos y de las fundaciones Wenner Gren, Ford, Hewlett-Packard, Mac Arthur y Rockefeller. Ha sido asistente de investigación y profesor auxiliar en los departamentos de antropología de la universidad de Stanford (1995-1997) y de la universidad de Texas en Austin (1999-2001). Fue investigador titular del Centro de Estudios Superiores de México y Centro América de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas.
Investigaciones realizadas
Entre sus investigaciones pueden mencionarse un estudio sobre la formación de la frontera México-Guatemala y la colonización de zonas selváticas y fronterizas en el área maya y en Centroamérica; un examen comparativo sobre el papel de la blancura, la antropología aplicada y el proyecto civilizatorio en México y Guatemala, un proyecto sobre ideologías raciales, fronteras, transnacionalismo y la experiencia de la maternidad y la paternidad entre los migrantes mesoamericanos a los Estados Unidos.
Aportes teóricos
Fue uno de los ensayistas que en 1995 expusieron la necesidad de reubicar el concepto de racismo como un concepto clave. Es decir, ha abogado por considerar el racismo como una categoría central para el análisis de la realidad guatemalteca. Su posición vincula la construcción de la identidad de lo blanco y de la blancura al racismo. En su artículo “Esas sangres no están limpias” (1999), plantea que el racismo ha sido el principal recurso para mantener los privilegios de aquellos que se consideran blancos. Para él, el racismo no es exclusivamente de los indígenas y los ladinos, sino de la persistencia del sistema de dominación capitalista y de la mentalidad hegemónica del país. Por eso, propone hacer una historia que sea leída desde la blancura y deja de demonizar a los ladinos como correlato binario de los indígenas.
En su ensayo “La antropología, la blancura, el mestizaje y la construcción de lo nacional en Guatemala”, introduce el conceptos de racismo cultural como un antimestizaje basado en valores simbólicos de la blancura. A lo largo del ensayo, el autor argumenta que la dicotomía indígena-ladino ha sido extrapolada por los antropólogos con la representación dominante que en Guatemala separa a la “gente decente” de los no blancos, sobre todo de aquellos ladinos populares denominados shumos o choleros. Entonces, la blancura no es solamente un color de la piel que identifica a un segmento poblacional de una sociedad pigmentocrática. Es el poder de imponer los criterios que humanizan a las personas a través del empleo de categorías específicas. Es un fenómeno transnacional con hegemonía policlasista e interétnica.