La Vizcaína
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La Vizcaína. Concebida para albergar comercio en bajos y viviendas en altos, con magistral aprovechamiento del espacio.
Historia
El 3 de marzo de 1934, la edición conmemorativa del periódico El Fénix señalaba que la ferretería La Vizcaína tenía 70 años de establecida. Hasta 1955, fue una edificación de mampostería y tejas, porque entonces su dueño, Gregorio Amézaga, decidió reedificarla.
Magníficos albañiles y carpinteros emprendieron la ejecución de la obra proyectada por la arquitecta espirituana María Luisa Pérez López, concebida para albergar comercio en bajos y viviendas en altos, con magistral aprovechamiento del espacio.
Los constructores se vieron precisados a acelerar su labor, puesto que Amézaga estaba gravemente enfermo y su familia deseaba que pudiera contemplar la obra antes de fallecer. Así, en 1957, se terminó una buena parte del edificio.
Características
El inmueble, que tiene elementos racionalistas en un área urbana donde predominan códigos antiguos, es todo un símbolo de la arquitectura moderna en Sancti Spíritus y una evidencia del temple de sus constructores, herederos de las mejores tradiciones. Desde su conclusión y hasta la actualidad ha mantenido gran parte de los elementos originales; además de que, en los bajos, han permanecido instalaciones públicas y en altos, las viviendas.
Fuentes
- Artículo libro-de-las-construcciones-espirituanas. Disponible en iderc consultado el 26 de mayo de 2014.
- Artículo boticas disponible en El Nuevo Fénix consultado el 26 de mayo de 2014.
