La anunciación (pintura)
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La anunciación (pintura). Obra de la pintora cubana Antonia Eiriz.
La obra
Precedida cronológicamente por el tríptico Ni muertos, La anunciación deviene rápidamente en emblema del impresionante conjunto presentado por Antonia Eiriz en 1964.
En una entrevista concedida poco antes de morir Antonia reconoce la influencia de Guido Llinás en la génesis de esta obra:
Así, con su proverbial modestia, la artista se refiere a una de las obras esenciales de la pintura cubana contemporánea. La aparición del ángel coronado de la muerte a la humilde costurera, retorcida en su silla en un espasmo de dolor ante el presagio de que su alumbramiento concluirá en trágico aborto, hace que La anunciación resulte una dura metáfora de una época contradictoria y apasionada cuyas expectativas oscilaron entre el amor y la esperanza, por una parte, y la violencia y el odio, por otra.