La danza del cuche de monte (El Salvador)

La danza del cuche de monte (El Salvador)
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Ne mijtutilis kojtan kuyamet
Danza Cuche.jpg
Puesta en escena
Lugar de estrenoBandera de El Salvador El Salvador


La danza del cuche de monte (Ne mijtutilis kojtan kuyamet en legua náhuat). Es una danza que define uno de los ciclos literarios náhuas más difundidos en la zona occidental y central de El Salvador. La obra consiste en varios poemas, canciones, bailes, narraciones y declaraciones poéticas. En la actualidad sólo quedan fragmentos que provienen de varios pueblos, recolectados hacia la primera mitad del siglo XX. Algunas secciones están transcritasen español y otras en un náhuat bastante españolizado. Kojtan Kuyamet significa El Tunco de Monte (Pecari tajacu), también llamado pecarí, jabalí, saíno, chancho de monte.

Descripción

El tunco funciona como centro de gravedad en todas las secciones de la danza ritual salvo en la primera. Pese a su carácter fragmentado, se trata de una obra maestra que demuestra la sensibilidad y el humor de los nahuas. En su forma actual, exhibe una belleza truncada como la Venus de Milo y el Satyricon. Salvo que se encuentren otros incisos orales en las aldeas indígenas, al presente sólo puede imaginarse su gloria pasada integral.

La danza se inicia con un poema convertido en canción folclórica, Kan kalaki tunal (Donde se entra/ ingresa el sol). Los versos recitan un lamento que expresa un intenso amor hacia el sol en el ocaso. Al sol se le llama Nuestro Padre o Nuestro Señor (tu-teku), actualmente un epíteto para Dios-Padre o el Dios cristiano. El grado de lamento sugiere un vínculo estrecho con rituales escatológicos o del fin de los tiempos, destinados a restaurar el sol. El poema posee una correlación obvia con La Canción del Kujtan Kuyamet. El título proviene del náhuat-pipil kan,(a) dónde; kalaki, entrar, ingresar (de kal “casa” + aki “entrar”) y tunal.

Además de significar sol, tunal también quiere decir, día. El día por excelencia denota el día del nacimiento, el día exacto del mes en que el embrión humano surge como el sol resplandeciente al oriente de las cavernas nocturnas. Esta fecha prodigiosa se halla asociada a las características que forman la personalidad, aun si se trate de tendencias más que de una predestinación estricta. El sol (tunal) se relaciona al fuego (tit) o, más bien, al fogón como centro de la casa y de la vida familiar. El dios del fogón se llama Wewetewt, el Dios Viejo, o su avatar Xiwteku, el Dios del Fuego, Verdor, Verde-Azul, Piedra Turquesa y del Año. El término xiw, fuego, resulta homónimo de la palabra para hoja, verdor y, por extensión, evoca todo lo exquisito de los colores verde y azul, incluso el cielo y las aguas.

El concepto representa el núcleo de la familia, la comunidad y el universo, al igual que uno de los centros anímicos que le otorgan una energía propia a todo individuo. Invoca el lugar seguro contra el caos de la periferia y del pasado. Xiw—raíz empleada en varias formas, por ejemplo, Paxiw, Por Dios: pal + Xiw— también quiere decir Dios. Habría una secuencia de sinónimos entre el sol, el día, el destino de nacimiento y la energía anímica personal, Dios y el fuego, como si se tratara de una consonancia primordial antes de su explosión en sentidos múltiple.

Fuente

  • Ne mijtutilis kojtan kuyamet/ La danza del cuche de monte[1]. Consultado 12/08/2019