Lata
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Lata. Envase opaco y resistente que resulta adecuado para envasar líquidos y productos en conserva. Los materiales de fabricación más habituales son la hojalata y el aluminio.
Recipiente metálico usado como envase opaco para líquidos y productos en conserva. Los materiales de fabricación más habituales son la hojalata y el aluminio.
Sumario
Características
Concretamente deriva de “latta”. También se llama lata al envase fabricado con hojalata o con aluminio. Por lo general estos recipientes se utilizan para almacenar diferentes tipos de conservas o bebidas, aunque también pueden guardarse pinturas, barnices y otras sustancias.
La lata de bebida es generalmente un contenedor que permite conservar y transportar líquidos destinados al consumo humano. Suele tener forma cilíndrica, fabricado de aluminio (u hojalata).
Se puede incluir en su interior, desde los refrescos que incluyen las bebidas carbonatadas, los zumos de frutas, hasta bebidas alcohólicas como: Cerveza, Los Cocktails con Bebidas Carbonatadas como Gin Tonic. Suelen elaborarse mediante chapas de fino metal con el objeto de que puedan soportar, no sólo la presión del líquido carbonatado, sino también los ácidos que suelen contener las bebidas de su interior.
Las latas están hechas principalmente de aluminio, y esto les hace tener unas características idóneas para el envasado de alimentos.
- Ligereza
- Herméticas: Protegen del aire, oxígeno y bacterias que pueden contaminar el contenido.
- protección del contenido: Estanqueidad y protección contra la luz.
- Rapidez de enfriamiento.
- Resistencia a la rotura.
- Inviolabilidad: No pueden abrirse sin que se aprecie que ha sido manipulada.
- Reciclabilidad: La lata es reciclable tanto por los sectores del acero como del aluminio; sin embargo, a día de hoy la tasa de recogidas es muy inferior a la de otros materiales como el papel y cartón.
- Decorable: Pueden personalizarse mediante la impresión de litografías.
- Biodegradable: Expuesto a la intemperie, un envase de acero desaparece en pocos meses convirtiéndose en óxido de hierro, inocuo para el suelo.
- Las latas de gaseosas y otras bebidas están compuestas de aluminio.
- A las propiedades que ya hemos mencionado se suma el hecho de que el aluminio es un metal opaco que no deja pasar la luz, lo que favorece la preservación de los alimentos.
Antecedentes
La formación de estas primeras latas era completamente a mano, un artesano experimentado podía producir aproximadamente sesenta latas diarias. El procedimiento era que se cortaba un pedazo de hojalata y se encorvaba soldando los extremos de esta forma obtenían un cuerpo cilíndrico, entonces se cortaban dos pedazos circulares uno que se utilizaba para el fondo de la lata en el cual se doblaban los bordes para soldarlo con el cuerpo y el otro disco sería para la tapa. Este tipo de latas se conocía en el mercado como lata 3 piezas.
Los primeros envases contenían productos de pastelería, carnes y especies. Y no contenían ningún diseño en el exterior de la lata. Fue hasta el año 1866 que las latas se presentaron en el mercado con algún tipo de arte exterior. Uno de los avances más destacados en cuanto a los alimentos que se enlataban fue el de Gail Borden, quien en el año 1856 patento la leche condensada enlatada. Con la intención de reducir la tasa de mortalidad infantil que en el momento había crecido mucho. Borden abrió dos plantas de producción de latas para poder cubrir la demanda que surgió.
Muchos productores estaban moviéndose de los envases de vidrio por su fragilidad y demás beneficios a los envases de hojalata. Pero el mayor problema de estos nuevos envases era como se abrirían, por lo que en en 1858 Ezra Warner patento la solución, una mezcla de bayoneta con una hoz. Previo a esta herramienta la sugerencia para abrir las latas era el uso de martillo, cincel o en su defecto un disparo de fusil; este abrelatas nunca llegó a ser de uso doméstico por el peligro que representaba. Como el resto del proceso con los años se fue perfeccionando, hasta que en 1870 William Lyman patenta su abre lata de rueda de giro, una variante de lo que hoy conocemos.
Al mismo tiempo que toda la evolución del empaque sucedía en el año 1860 en Francia, Louis Pasteur estaba investigando sobre un nuevo método para eliminar los microorganismos que podían degradar los alimentos. El método consistía en elevar la temperatura del líquido a 44°C durante un corto tiempo; sus resultados habían dado origen a un nuevo proceso que actualmente garantiza la seguridad de numerosos productos alimenticios del mundo; había nacido la Pasteurización.
Los últimos cambios y avances que se dieron para solucionar el problema que las aleaciones de estaño y plomo, utilizados para las soldaduras, ocasionaban a la salud es la metodología que conocemos hoy en día. Una empresa suiza se encargó de la construcción construir soldadores donde los electrodos fijos de cobre fueron sustituidos por un hilo de cobre continuo que se desplazaba a la misma velocidad que el envase a soldar. Ahora conocida como la fabricación de latas de tres piezas. Fue hasta 1962 que se desarrolló en Canadá para las latas de bebidas: desarrolla una tapa con una lengüeta precortada que al tirar de la argolla se desprendía de la tapa (ring pull) y dejaba una ranura en forma de gota de agua por la cual se vertía el contenido de la lata.
Los envases metálicos hoy en día se construyen principalmente a partir de dos metales: acero y aluminio. El acero es el más común debido a su bajo costo en la producción. Se puede distinguir además entre los materiales ferrosos: hojalata, chapa cromada y chapa negra, y los materiales no ferrosos: aluminio. Para cualquiera de las tres formas de los materiales ferrosos la composición típica del acero es prácticamente la misma, se trata de un acero dulce (bajo contenido en carbono).
Materiales de fabricación
El material tradicional para la fabricación de latas de conserva ha sido desde el siglo XIX, y sigue siendo, la hojalata. No obstante, desde finales del siglo XX la hojalata convive con el aluminio, una alternativa que va ganando peso por influencia de la industria de las bebidas carbonatadas, donde es predominante.
A inicios del año 1810 Peter Durand estableció la primera patente para los materiales utilizados para preservar alimentos, en donde se encontraba el metal. Se describió el empaque como un vaso de hojalata, hecho de hierro recubierto de estaño y unido por una soldadura. Este material presento ventajas ante el cristal que era el material utilizado de preferencia por la gente de la época para conservar alimentos. La hojalata era más ligera, no sufría de quebraduras, resistía la corrosión y conducía bien el calor. Las primeras pruebas del material fueron para utilizarlas con el alimento del ejército y la marina de Gran Bretaña. Latas que al momento de consumir se encontraban en condiciones satisfactorias
Clasificación
Existen tres clasificaciones que se pueden encontrar en el mercado de acuerdo con su contenido, número de piezas y forma.
De acuerdo con su contenido podemos mencionar que se utilizan para varias industrias como la de alimentos, bebidas, industriales y aerosoles.
Se pueden clasificar también de acuerdo con su número de piezas ya sea de dos, tres o de compartimientos. Y por último en base a su forma pueden ser cilíndricos, rectangular, tipo sardina, y tipo estuche.
La globalización facilita a los consumidores elegir entre los mejores productos del mundo. El marco regulatorio se vuelve cada vez más estricto en cada país y región, a favor de la seguridad y salud de la población y un desarrollo sostenible. Las Autoridades imparten responsabilidad civil y penal a los fabricantes, importadores y propietarios de marcas.
Existen dos tipos básicos de botes: el de dos piezas (cuerpo y tapa superior) y el de tres piezas (cuerpo y tapas superior e inferior), que es el más habitual para las conservas.
Ventajas de envasado en latas de metal
El metal es 100% hermético y asegura una barrera eficaz contra el oxígeno, olores, luz; por ende conserva la calidad y la caducidad tanto de alimentos como de productos industriales.
Alta seguridad en los alimentos y protección óptima de los mismos, satisface las necesidades de nuestros clientes para la mejor calidad del producto cuando se trata de sabor y salud.
Un envase con seguridad óptima para productos industriales satisfaciendo los requerimientos de la ONU y de fácil de manejo durante su distribución debido a su volumen; resistente al impacto y al trato duro y a productos agresivos.
Es importante que los productores puedan asegurar que sus productos en contacto con alimentos cumplan la reglamentación siempre en pro de la salud del consumidor. Algunos puntos importantes que resaltan son: que no provoquen alteraciones en la composición de los alimentos, que no ocasionen deterioro de las características organolépticas del producto y como más importante que no causen daño a la salud.