Legañas

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Legañas
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Concepto:Humor segregado por las glándulas sebáceas de los párpados, que se cuaja en el borde de estos y en los ángulos de la abertura ocular.

Legañas. Son residuos duros producidos por el organismo, en este caso, por el aparato visual.

Cómo se forman

En el borde libre de los párpados de los ojos se encuentran las glándulas de Meibomius (de 30 a 40 en el párpado superior y de 20 a 30 en el inferior), de forma alargada, secretoras de un gel lubricante espeso que al resecarse forma un material aglutinante conocido como legañas, que se acumula en las comisuras de los párpados. Esta secreción atrapa células epiteliales muertas de las pestañas, polvo y otras partículas, evitando que lleguen al ojo.

Características

Las legañas son consideradas antiestéticas y antihigiénicas: lo primero puede ser justificable, pero lo otro no es del todo cierto. Los ojos que son tan maravillosos e inimitables en su composición segregan constantemente líquido para hacer frente a bacterias, polvo y cuerpos extraños en general.

Si le producen asco o fastidio las legañas, recuerde que se tratan de una reacción de los ojos para protegerse. A veces su exceso puede significar algún problema oftalmológico.

Cómo quitar las legañas al bebé

Las legañas se producen en los bebés como consecuencia de la obstrucción que sufren los conductos lacrimales a causa del exceso de mucosidad, este hecho impide que las lágrimas puedan fluir con normalidad y en consecuencia se produce una secreción que combina la mucosidad, las lágrimas, el polvo, las células muertas, etc., originando las denominada legañas.

Cuando los bebés no duermen, el parpadeo suele eliminar esta secreción gracias a las lágrimas, pero cuando duerme el parpadeo es inexistente y por tanto aumenta la posibilidad de que se produzcan las legañas. Se trata de una secreción que puede ser blanquecina, amarillenta o verdosa y procede de la mucosa y las glándulas de los párpados que, en contacto con el aire, se resecan alrededor de los ojos del bebé pudiendo llegar a sellárselos.

Las legañas también pueden producirse por otro tipo de problemas, como por ejemplo la conjuntivitis, una inflamación de la conjuntiva causada por una infección, una alergia, etc. En cualquier caso es fundamental limpiar bien los ojos del bebé utilizando una gasa estéril humedecida con suero fisiológico con el propósito de reblandecer las legañas que impiden al pequeño abrir los ojos.

Las legañas se deben retirar con mucho cuidado a fin de evitar que se puedan introducir restos legañosos en los ojos, recuerda que nunca debes realizar esta acción con los párpados en seco. La higiene es fundamental en este proceso, hay que tener en cuenta que los ojos del bebé son muy delicados y que son un blanco potencial para virus y bacterias.


Cuando se produzcan legañas lo más adecuado es acudir al especialista para que determine cuál es el origen o motivo y nos aconseje el tratamiento más adecuado, si se trata de conjuntivitis, posiblemente nos recetará unas gotas o una crema, si se tratara de legañas producidas por una obstrucción lacrimal, posiblemente te enseñe a realizar al bebé unos masajes en la pared nasal a fin de aliviar dicha obstrucción.

Elimina las legañas

Cuando dormimos solemos amanecer con los ojos literalmente pegados. El haber estado varias horas con los ojos cerrados hace que se formen esas pequeñas legañas en el lagrimal, que hacen imprescindible tener que lavarnos la cara, además de por higiene, para despejarnos. Que nuestros ojos generen estas sustancias es totalmente normal pero, si lo hacen en exceso, puede deberse a una enfermedad o una infección que debemos tratar. No obstante, antes de acudir a nuestro oculista, y siempre que nuestro problema no parezca demasiado severo, podemos recurrir a la manzanilla o al suero fisiológico para limpiar esta parte de la cara.

Consejos

  • Procure no usar los dedos secos para retirar las legañas. Use un paño limpio con un poco de agua o de saliva.
  • Si las legañas están bastante duras de retirar cierre bien sus ojos, aplíquese un poquito de alguno de estos componentes, jabón o champú, en las puntas de los dedos, páselos suavemente por las pestañas unos segundos y retire con abundante agua. No abra los ojos hasta que no sienta residuos de alguno de los dos componentes. Seque con una toalla limpia.
  • Si nota o siente en un lugar público que tiene legañas, no se prevenga de usar un pañuelo limpio o una toallita para asear el rostro. O vaya a una fuente de agua cercana, si la hay, como un baño o un lavamanos.
  • Hay legañas que se desprenden parpadeando constantemente los ojos. Haga esto si no maneja o no tiene que estar concentrado(a) observando algo.
  • Si usa pestañita y/o maquillaje de ojos, retírelos bien del rostro cuando se limpie. Los residuos de estos productos pueden ser causantes de legañas más grandes y tiesas.
  • Al usar gafas, revise bien el vidrio de los lentes para notar si no tienen una legaña pegada. ¡Mucho ojo!

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