Mijaíl Chigorín

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Mijaíl Chigorín
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Ajedrecista ruso
NombreMijaíl Ivanóvich Chigorín
Nacimiento12 de noviembre de 1850
San Petersburgo,
país de Rusia,
Imperio ruso Bandera del Imperio Ruso
Fallecimiento25 de enero de 1908
Lublin,
Polonia Bandera de Polonia
Causa de la muertediabetes
Nacionalidadrusa
Otros nombresMikhail Tchigorin, Mikhail Ivanovich Tchigorin

Mijaíl Chigorín (San Petersburgo, 12 de noviembre de 1850 - Polonia, 25 de enero de 1908) fue un ajedrecista ruso. Su nombre completo era Mijaíl Ivanóvich Chigorín, aunque se conoce también como Mikhail Tchigorin y Mijail Chigorin. Se le considera el fundador de la escuela rusa de ajedrez.

Síntesis biográfica

Infancia y juventud

Mijaíl Chigorín nació cerca de San Petersburgo en 1850. Se quedó huérfano a los 10 años, por lo que tuvo que vivir su adolescencia en un orfanato. Tras completar su educación, estableció su residencia en San Petersburgo y comenzó a trabajar como Oficinista para una institución estatal.

Su importancia en la historia del ajedrez es muy grande, no sólo porque se le considera el fundador de la escuela rusa de Ajedrez, sino por la extraordinaria calidad de su juego.

Carrera deportiva

Chigorín llegó al ajedrez relativamente tarde. Aprendió a mover las piezas a lo 16 años; pero no le dio importancia. Terminó sus estudios e ingresó con funcionario gubernamental, ya que pertenecía a una familia burguesa acomodada.

A los 24 años despertó en él la pasión por el ajedrez, hasta tal punto que abandonó su trabajo, dejó a su familia (se había casado muy joven) y se dedicó a jugar profesionalmente. Los resultados fueron halagüeños.

Su éxitos le permitieron desafiar a Steinitz con el título mundial en juego. El encuentro se jugó en La Habana en 1889 y fue derrotado por 10 partidas perdidas, 6 ganadas y unas tablas. No obstante, ganó el torneo de Nueva York de 1890 y ganó en un encuentro a Gúnsberg. Durante los años 1890 y 1891 jugó con Steinitz sendas partidas por telégrafo, y las dos las ganó Chigorín, por lo que volvieron a jugar por el título mundial en La Habana en 1892. La partida vigesimosegunda fue dramática para Chigorín. Cuando llevaba una pieza de ventaja y posición ganadora se dejó dar un sencillo mate en dos. Totalmente desmoralizado perdió la siguiente partida, y a la postre el encuentro.

Un error tan grave hubiera retirado a cualquier otro jugador, pero Chigorín comenzó, a partir de entonces lo más fructífero de su carrera. En 1893 empató un encuentro con Siegbert Tarrasch, en 1896 quedó segundo en el torneo de Budapest, por detrás de Rudolf Charousek, y en los años 1899, 1900 y 1901 ganó los tres primeros torneos nacionales de Rusia. Desarrolló una intensa actividad como organizador del ajedrez en Rusia, lo que le valió el reconocimiento de fundador de la escuela rusa de ajedrez.

Chigorín fue uno de los mejores representantes de la Escuela moderna de ajedrez a su pesar. Él admiraba el estilo romántico de Adolf Anderssen y Paul Morphy. Rechazó los principios teóricos de Steinitz, aunque sólo desde el punto de vista teórico. Fue uno de los mejores especialistas de su tiempo del Gambito Evans. Pero este espíritu romántico chocaba frontalmente con su pragmatismo, y demostró conocer los principios de la Escuela moderna como nadie. Claro que esto nunca le impidió lanzarse a fantásticas combinaciones en cuanto podía.

Características de su juego

Era partidario del juego abierto que tanto predominó en la época de Morphy, y ante la nueva ola de aperturas cerradas, promulgadas por Steinitz, el ruso reaccionó con rebeldía. A dichas aperturas contestaba con jugadas que no estaban en la teoría y que parecían absurdas, pero que degeneraban en partidas cuyas posiciones se abrían como por arte de magia. Estudios posteriores han demostrado que estas jugadas no eran tan absurdas como parecían, de hecho supusieron un gran avance en la teoría de aperturas y fueron utilizadas por muchos teóricos de la escuela soviética. Algunas de estas ideas se siguen utilizando en la actualidad.

Fue un genio del ajedrez, original y creativo, pero su increíble irregularidad le impidió tener un lugar preferente en la historia. En sus partidas era capaz de crear una obra de arte (como muchas que podéis encontrar en esta web) o de cometer errores garrafales que le conducían a la derrota. También es necesario recordar las numerosas ideas innovadoras que aportó al ajedrez, su dominio del gambito Evans no ha podido ser igualado por nadie y ha alcanzado el rango de legendario. Chigorin fue de los pocos que osaron rechazar parte de las ideas de Steinitz, su opinión era clara:

"Las mejores normas de juego están lejos de conocerse".

Para Mikhail lo más importante era un rápido y correcto desarrollo de las piezas, lo que permitía lanzar ataques contra el enroque del rival con garantías de éxito. En realidad estas ideas se anticiparon a lo que sería la época del Hipermodernismo, a principios del siglo XX, con Richard Reti a la cabeza.

Aportes y contribuciones

Su aportación al ajedrez fue determinante para que este deporte se hiciese popular en su tierra de origen, Rusia, ideas que sirvieron como base sobre la que se desarrolló la posterior escuela soviética. Por ejemplo, Tchigorin organizó el primer torneo por correspondencia en Rusia, también el primer torneo sólo para jugadores rusos (con sus ganancias fundó un periódico dedicado exclusivamente al ajedrez). Gracias a todo esto gozaba de gran popularidad entre sus compatriotas, como por ejemplo el gran escritor Leon Tolstoi, que confesó ser un enamorado de su juego.

Chigorin Influyó en el juego de muchos jugadores de distintas épocas. Por ejemplo, el campeón del mundo Alexander Alekhine comentó:

"Tchigorin parece hallarse fuera de la serie de los maestros del pasado; ha sido una gran figura y su enorme talento posiblemente le sitúe entre los genios, pues la profundidad de sus ideas es a veces inescrutable para el simple mortal. No se si alcanzaré el nivel del pensamiento de Tchigorin".

Pero sobre todo es admirado por rebelarse contra las ideas posicionales que empezaban a predominar en su época, Tchigorin demostró gran valentía al optar por la belleza como medio de obtener la victoria, un camino siempre más arriesgado y difícil de encontrar. Es una pena que tuviese sus famosos despistes que le llevaron a la perdición en demasiadas ocasiones.

Como muchos de los jugadores de esa época, colaboró en varias revistas de ajedrez, como "El heraldo de ajedrez" y "La hoja de ajedrez". Estas colaboraciones eran muy habituales entre los maestros, la falta de torneos hacía que los ajedrecistas desarrollasen su creatividad por otras vías.

Estadísticas

Las estadísticas de Chigorin son:

  • 409 victorias.
  • 136 tablas.
  • 244 derrotas.

Con un promedio de 60'5 % (el promedio se saca de sumar victorias y tablas, y dividirlo por las partidas totales).

Calculando su rating, con las partidas que nos han llegado hasta hoy, obtuvo un ELO máximo de 2695 y un ELO medio de 2600 a lo largo de toda su carrera.

Muerte

Enfermo de diabetes, se retiró a Lublin con su familia, donde murió.

Fuentes