Milagros Soca Tur

Milagros Soca Tur
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Nacimiento25 de mayo de 1929
San Luis, Santiago de Cuba, Bandera de Cuba Cuba
Fallecimiento18 de junio de 1998
Santo Domingo, Villa Clara, Bandera de Cuba
Causa de la muerteEnfermedad
NacionalidadCubana
PadresRafael y Manuela

Milagros Soca Tur. Heroína Nacional de la Zafra. Luchadora incansable, mujer trabajadora y muy entusiasta. Natural de Santiago de Cuba.

Biografía

La zona oriental del país la vio nacer el día 25 de mayo de 1929, en San Luis, provincia de Santiago de Cuba. Sus padres Rafael y Manuela procedian de una familia humilde. Desde muy temprana edad comienza a trabajar para ayudar a su familia.

En 1941 vino a vivir a Santo Domingo, donde comienza a administrar un bar cantina más conocido como “El bar de Milagros la Oriental”, sobrenombre que llevó hasta su muerte. Se vinculó en la lucha clandestina contra el gobierno durante el período insurreccional. Ayudó a las tropas de Víctor Bordón con comida. En su mismo establecimiento vendía bonos del Movimiento 26 de Julio, escondió armas. Participó de forma activa en la Huelga del 9 de abril de 1958. Viajó a New York acompañada de su esposo, allí adquirió una bandera del movimiento 26 de julio, a su regreso la escondió dentro de un TV portátil y así pudo introducirla en el país. Esa bandera luego sería ondeaba en el Busto Martiano del Parque Central dominicano al ocurrir la toma del poblado por los rebeldes (27 de diciembre de 1958).

Cuando triunfa la revolución su primera iniciativa fue aprender las letras, ya que de niña su condición no se lo permitió. En 1968 entregó el bar cantina al Poder Local y comenzó a trabajar en la dulcería “Renovación” como empleada. Luego administró la peluquería El Encanto y el cabaret Los Taínos. En 1969 al 1970 trabajó como empleada en la tienda La Ideal.

Se incorpora a las distintas tareas convocadas para trabajar en la agricultura cañera y agropecuaria. Es fundadora de los CDR y la FMC.

Trayectoria como machetera

En 1969 fue movilizada 4 meses, albergada en la zona de La Luisa (Rodrigo) para dirigir la zafra de los 10 millones. Participa de forma permanente en los cortes de caña de la Brigada Antonio Maceo dirigida por Justo Gutiérrez (segundo Héroe Nacional de la zafra en el país).

A partir de esta fecha participó permanentemente en siembra y limpia de caña. En 1974 se convierte en la primera machetera a nivel nacional. En este año participa como delegada al II Congreso de la FMC. Se le premió con un viaje a los países de Europa socialista.

Mantuvo la condición de Vanguardia en los años 1975 y 1976 recibiendo de estos años y hasta 1979 ostenta la orden Héroe Nacional de la zafra. Su sindicato le entrega la “Regla de Oro”, que se daba a los mejores trabajadores del comercio y la gastronomía.

Años después se le otorgan las órdenes por el Consejo de Estado: Jesús Menéndez, Lázaro Peña y Fernando Chenad Piña, por más de 25 años en el sector del comercio.

En enero de 1976 acumuló en 26 días al campo 26 678 arrobas para un sobrecumplimiento de 317%.

Insertada en una brigada de más de 50 hombres, para ellos “una joya de altos quilates”, la bautizan jocosamente como “plan jaba” por se la primera que llegaba al campo.

El 12 de enero de 1976 fue la primera villaclareña en ser proclamada Heroína de la zafra con más de 36 800 arrobas de caña cortadas.

Es felicitada en carta del 21 de enero de 1976 por Vilma Espín, Presidenta Nacional de la FMC. El 10 de marzo de 1976 sobrepasó las 80 000 arrobas en saludo al Día Internacional de la Mujer.

En 1977-1979 obtuvo la condición Heroína Nacional de la zafra y hasta 1982 recibe trofeos de Mejor Machetera Nacional. En el 81-83 recibió las medallas de la orden Jesús Menéndez y en el 84 la medalla Lázaro Pérez González. En 1982 es invitada como delegada al II Congreso del Sindicato de Comercio y Gastronomía. En 1983 fue invitada a participar en el Acto Nacional por el 26 de julio celebrado en Santiago de Cuba.

Muerte

En 1997 su salud fue acortando ante la gran extensión de sus ánimos. Fallece el 18 de junio de 1998, tras larga y penosa enfermedad.

Fuente

  • Archivos del Museo Municipal de Santo Domingo