Pavo ocelado

Pavo ocelado
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Pavo ocelado o Guajolote ocelado.jpg
Clasificación Científica
Nombre científicoMeleagris ocellata
Reino:Animalia
Filo:Chordata
Clase:Aves
Orden:Galliformes
Familia:Phasianidae
Hábitat:Península de Yucatán

Pavo ocelado (Meleagris ocellata). Especie de ave Galliforme, de la familia Phasianidae. En el pasado fue clasificado en un género propio, como Agriocharis ocellata, pero las diferencias entre esta especie y Meleagris gallopavo ha sido considerada como insuficiente para justificar segregación genérica.

Distribución

Se encuentra distribuido únicamente en una región de unos 130.000 kilómetros cuadrados en la Península de Yucatán, que incluye los estados mexicanos de Quintana Roo, Campeche y Yucatán, así como partes del sur de Tabasco y noreste de Chiapas. Además de Belice y el norte de Guatemala.

Características

Las plumas corpóreas de ambos sexos son una mezcla de color bronce y verde iridiscente. Es un ave grande, de entre 70-90 cm y 3 kg (hembra) a 4 kg (macho) de peso, endémica de la Península de Yucatán. No se conocen subespecies.

Aunque las hembras pueden tener colores más opacos con más tendencia al verde, las plumas del pecho generalmente no difieren por lo que no pueden ser utilizadas para determinar el sexo.

Ninguno de ambos sexos presenta barbas en el pecho como en el pavo norteño. Las plumas de la cola son, en ambos sexos, gris azulado con un círculo azul grisáceo en forma de ojo con una mancha azul-bronce cercana a la punta que está rematada por una punta dorado brillante. Las manchas, por las cuales el pavo ocelado recibe su nombre, llevan a algunos científicos a creer que esta ave está más emparentada con el pavo real que con el pavo norteño.

La parte superior de las plumas secundarias mayores de las alas son de color cobre iridiscente. Las plumas primarias y secundarias de las alas tienen un diseño de barras similar al del pavo norteño, pero las plumas secundarias tienen más áreas blancas, especialmente en los bordes.

Ambos sexos tienen la cabeza azul con algunos nódulos (verrugas) naranja o rojos, más protuberantes en machos. Los machos también presentan una carnosidad azul a manera de corona con nódulos, similares a los que poseen en el cuello. Durante la época de apareamiento esta corona se ensancha y se torna más brillante y con colores amarillo-naranja más acentuados. El ojo está rodeado por un anillo de piel roja brillante, que se torna más evidente en los machos durante la época de apareamiento.

Las patas son de color rojo fuerte y son más cortas y delgadas que las del pavo norteño. Los machos mayores de un año presentan espolones que en promedio miden 3,8 cm, aunque se han registrado espolones de hasta 5 centímetros. Dichos espolones son más largos y delgados que las del pavo norteño.

Los pavos ocelados son más pequeños que cualquiera de las especies silvestres del norte de América, con hembras adultas que pesan 4 kg antes de ovipositar y alrededor de 3 kg el resto del año, y machos adultos que llegan a pesar entre 5 a 6 kg durante la época de apareamiento.

Hábitos

Pasan la mayor parte del día en el suelo y prefieren correr para escapar al peligro durante el día a volar, a pesar de que pueden hacerlo rápida y poderosamente por distancias cortas, como la mayoría de aves en este orden, sólo lo hacen por necesidad. Perchan regularmente en árboles altos que los mantienen alejados de predadores nocturnos como los jaguares, y usualmente lo hacen en grupos familiares.

Reproducción

Las hembras depositan 8-15 huevos en un nido bien oculto en el suelo. Incuba los huevos por 28 días. Los polluelos son precoces y pueden abandonar el nido luego de una noche. Luego siguen a la madre hasta alcanzar la madurez, que es cuando comienzan a disgregarse aunque reagrupándose para perchar. El macho emite un gorjeo durante la época de apareamiento, mientras la hembra emite un débil cacareo.

Conservación

En el estado de Campeche, en una superficie aproximada de 10 000 hectáreas se conformó como uMaespecia-lizada en el manejo del pavo ocelado. El éxito en el correcto manejo de esta especie ha permitido no sólo la recuperación de las parvadas en el sitio, sino que a partir de ellas se ha iniciado la repoblación en varios puntos de la Península de Yucatán. A pesar de las numerosas extracciones para aprovechamiento cinegético y repoblación, las múltiples parvadas del ejido están compuestas por más de 120 individuos cada una. Esto es un caso único en la zona donde habita esta especie y es un indicador inequívoco de su adecuado manejo.

Fuente

  • Pavo oncelado Disponible en: “damisela.com” Consultado: 9 de agosto de 2011.
  • Carabias, Julia, et al. (coords.), 2010. Patrimonio natural de México. Cien casos de éxito. México, Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad. Rojas, Lorenzo, De la Cueva, Horacio. p.100.