Pez cristal

Pez de Cristal
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Pequeño pez transparente, al cual se le puede ver sus órganos internos, de ahí su nombre Pez Cristal.
Clasificación Científica
Nombre científicoAmbassis lala, Chanda ranga
Reino:Animalia
Clase:óseos
Orden:Perciformes
Familia:Centropomidae

Pez de Cristal, este pez es tan transparente que puede vérsele el esqueleto. Resulta muy difícil de distinguir en el agua, y cuando se mete entra las hierbas desaparece por completo.

Características

Extremadamente curiosos y llamativos estos peces que raramente superan en acuario los 5 cm de longitud, tienen el cuerpo corto, romboidal, muy comprimido lateralmente y su cuerpo es de una transparencia tal que permite observar al trasluz sus órganos internos. La boca puntiaguda, presenta el maxilar inferior más largo y sobresaliente, lo que demuestra la alimentación de presas en superficie, tí­pica de este pez. La aleta dorsal es doble; puntiaguda, la delantera, y flexible, mas suave, la parte posterior, siendo también muy desarrollada la aleta anal. El cuerpo de estos peces, cuando jóvenes, presenta tres zonas verticales negras que se desvanecen en los ejemplares desarrollados, para tomar un tono amarillo vinoso o amarillo dorado. El dimorfismo sexual, es muy poco acusado, aunque los machos presentan un borde azul en la aleta dorsal, que falta en las hembras. La vejiga natatoria del macho, visible por transparencia, termina en punta mientras que es redondeada en el sexo opuesto. Originario de los cursos de agua dulce de India, Bengala, Birmania y Tailandia su antiguo nombre genérico, Ambassis lala, querí­a decir algo sin valor. Pueden llegar a terrenos salobres y arrozales, viviendo en cardúmenes relativamente numerosos. Estos peces suelen vivir de tres a cinco años, probablemente más en óptimas condiciones.

Alimentación

Se le puede alimentar con pequeñas presas vivas: Dafnias, cyclops, artemia salina, entre otras, que pueden alternarse con alimento comercial en escamas previamente reducido a polvo entre los dedos. La alimentación debe ser frecuente.

Reproducción

Se aísla la pareja en un tanque de unos 25 litros, abundantemente plantado y provisto de vegetales flotantes, relleno con agua del acuario común y se eleva la temperatura hasta 26 C. La hembra pone hasta un centenar de huevos en tandas de cinco o seis que se adhieren a las plantas. Acabada la puesta se retiran los padres. Los alevines nacen a las veinticuatro horas, debiendo ser alimentados con abundantes infusorios. A los tres o cuatro dí­as de edad, han de dárseles nauplius de artemia en gran cantidad y disponiendo un difusor, de forma que la corriente arrastre el alimento y lo lleve hasta la boca de los pequeñuelos. Es fundamental una sobrealimentación dirigida mediante difusores de aire, muy abundante, que condiciona el éxito de la crí­a.

Hábitat

Necesitan acuarios alargados y no demasiado altos de una capacidad mí­nima de 40 litros. El agua ligera o francamente alcalina pH: 7,2 a 8,2, debe ser bastante dura, más de 15 DH y preferiblemente salobre, 1,5 grs de sal gorda de cocina disueltos en cada litro de lí­quido. El recipiente, rico y densamente plantado en el fondo y costados, debe tener una zona central despejada. Necesitan plantas de superficie: Riccia, Salvinia, Azolla, Lemna, entre otras, y buena iluminación. La temperatura del medio puede oscilar entre 180°C y 260°C, siendo la óptima, para la reproducción, 250°C a 270°C.

Enfermedades

Estos peces pueden sufrir alteraciones irreversibles en los cambios bruscos de acuario y también se muestran sensibles a ciertas afecciones digestivas provocadas por exceso de alimento seco y escasez de comida viva.

Defensa

Si un enemigo de afilados dientes pasa por su lado, queda totalmente confundido, pues solo ve un esqueleto flotante. La conclusión que saca es, lógicamente, que un rival se le ha adelantado para dejarle tan solo ese esqueleto abandonado. El depredador echa una ojeada y se marcha. Y eso justamente es lo que estaba esperando este pez de cristal. Entonces sacará de nuevo sus aletas y, coleteando, se alejará en busca de un gusano. Esto no siempre resulta fácil en el río. En el acuario la situación es completamente diferente, pues se le suministra gusanos vivos desde la superficie del agua.

Fuentes

  • Datskevich, Víctor.Aletas Multicolores. Moscú: Editorial RADUGA, 1987.