Plazoleta de la Cañada
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Plazoleta de la Cañada, tambien conocida con los nombres de Las Palmitas, de las Tres Palmitas y de La Marquesita. Es una plazoleta ubicada al final de la Calle Real del Jigüe, en Trinidad, Sancti Spíritus, Cuba. Este espacio, de lenta conformación aprovechando el declive del terreno, drenaba las aguas de la plazoleta de la Soledad o de Segarte hacia este punto, y se prolongaba hasta su encuentro con la calle de Colón. La plazoleta, por tanto, durante mucho tiempo fue unespacio pantanoso, de nombre y configuración imprecisos, por ubicarse en una de sus esquinas la tienda Marqués de Cara Vaca.
Calles Aledañas
En la actualidad, está delimitada por las calles Real del Jigüe en su encuentro con las de la Media Luna y de Alameda. La de la Media Luna la delimita por el sur. La de la Alameda —Lameda en el padrón de 1767— fue abierta en 1750, en tiempos del gobernador Francisco Gutiérrez de Rivera. Y, en un principio, la de Real no llegaba hasta la de los Santos o Alameda, en su intersección con la de la Media Luna y, por tanto, la plazoleta no era tal.
Entre 1700 y 1773, hacia este punto se prolongó la calle de Real, con el nombre de Real de Ripalda. Documentos de la década de los años 70 del [[siglo XVIII aluden «a la calle nueva que se titula del Conde de Ripalda», también relacionada con el puente que, al término de la calle Real sobre la cañada, Ripalda construyó por esos años. Es probable que la calle Real del Jigüe, bajo la denominación de Ripalda, se continuara por un derrotero desaparecido o integrado a la calle de la Alameda, hasta enlazar con el camino de Sancti Spiritus, que entonces nacía en lo que es hoy la calle de Gutiérrez en su encuentro con la de Santo Domingo. Esta última hipótesis es muy sugerente, pues hay menciones de casas situadas en «la calle de Ripalda donde estaba la Alameda».
La esquina de Real y Cañada se configuró por la construcción de la vivienda del comerciante Juan Antonio Entenza en un solar que compró,en 1777, a José Domingo Silva con una «casa de guano, madera y embarros situada en el Puente que le nombran del Conde de Ripalda, lindando por un costado con solar y casa de Pablo Borrelly por el otro haciendo esquina a la calle de la Media Luna». Tal descripción refuerza la idea de que, las calles Real y de Media Luna,se encontraban en un punto anterior al actual.Hacia 1795, ya de mampostería y tejas, la vivien da lindaba con la destinada a una factoría de tabacos, que administraba Blas Muñoz, también dueño de la vivienda del frente, en la esquina del callejón de la Cañada, que compró en 1788 a Pedro Alcántara Trujillo y a su esposa María de la Encarnación Muñoz. Al morir Blas Muñoz, su viuda, María Josefa Borrell, la vendió al comerciante Lorenzo Corbeller. La plazoleta de la Cañada vino a tomar forma propiamente cuando se empedraron las calles, quedando en el centro de la misma un espacio de tierra, triangular. En 1902, el Centro de Veteranos solicitó y se le confirió autorización para construir un parque en esta plazoleta que, recientemente, fue demolido; además, se rehízo el empedrado del ámbito de la plazoleta.
Fuente
- García Santana, Alicia y Julio A. Larramendi (2010): Trinidad de Cuba. Un don del cielo. Ciudad de Guatemala: Editorial Polymita S.A., 2010. p. 286. ISBN 978-9929-8078-0-8
