Poder popular establecido en El Realengo 18 (1932)

Poder popular establecido en El Realengo 18 (1932)
Información sobre la plantilla
Fecha:1932
Lugar:Municipio El Salvador, provincia Guantánamo
País(es) involucrado(s)
Bandera de Cuba Cuba

Poder popular establecido en El Realengo 18 (1932). Debido a la situación de guerra y aislamiento que vivió la zona durante el cerco, funcionó un verdadero poder popular en la llamada "República del Realengo", expresado en la Asociación con sus correspondientes poderes ejecutivo y legislativo y con las atribuciones de un gobierno institucional, con las limitaciones lógicas del caso.

Antecedentes

Entre los campesinos del Realengo 18 surgió una organización llamada Delegación de Barrio, de Cuartón, encargada de entregar la tierra a quienes la solicitaran. El delegado general de barrio inscribía al interesado y lo remitía al delegado de cuartón, el que le asignaba no menos de una caballería de tierra con la condición de que la cultivara y no vendiera los derechos de posesión ni las bienhechurías, de hacerlo no tendría derecho a más tierra.

Esto se hacía para evitar el lucro, el negocio con las tierras del Estado. Inicialmente fue dirigida por Juan Ramírez, después por José Ignacio Moral. Lino Álvarez no aceptó alegando su condición de analfabeto, lo hizo más tarde, entregándose en una larga lucha legal en defensa de la tierra.

En 1932, la Delegación de Vecinos, de carácter pacifista, se transformó en la Asociación de Productores Agrícolas del Realengo 18 y colindantes, de carácter más amplio, asumía la defensa solidaria de las tierras periféricas, cuyos habitantes estaban en mayor peligro de ser desalojados. Esta asociación proclamaba el derecho de los campesinos a apoderarse de las tierras por ser del Estado.

«Siendo las tierras y montes del Estado Cubano el único patrimonio en que está vinculada la soberanía y estabilidad de la República, y en vista de no oponer una enérgica y poderosa resistencia contra los constantes asaltos, usurpaciones y robos de tierras, por la desconocida Geofagia, perpetrados por compañías particulares con las tierras del Estado, creemos patriótico y humano y por la estabilidad de un presente y futuro de prosperidad y bienestar para nuestra amada Cuba, tomar posesión de las tierras nuestras, por ser del Estado Cubano, en la proporción de que cada cubano adquiera una parcela en la que pueda, por medio de su honrada labor, proveer a sus necesidades y a las de su prole. Defender en cuerpo y arma la más mínima pulgada de tierra que sea nuestra por ser del Estado Cubano, constituimos esta Asociación que significa una poderosa columna de defensa nacional»

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Administración de justicia

En cuanto a la administración de la justicia se declaraba que los comités de barrio serían los encargados de parcelar las tierras equitativamente, para los problemas internos, estaban facultados a intervenir personalmente en la resolución de cualquier dificultad que se presente entre los vecinos, por causa de daños, linderos y otras, armonizando siempre con equidad y justicia. En caso de intransigencia, lo comunicaría al Ejecutivo, y este a un jurado armonizador que nombraría el presidente para procurar por todos los medios y dentro de la mayor armonía solucionar la dificultad.

Poder ejecutivo

El poder ejecutivo (La Junta) estaba representada por el Comité Central, compuesto por: presidente, Lino Álvarez; vice, Gil Hierrezuelo; secretario, Tomás R. Pichardo; vice, Luis Felipe Cuevas; tesorero, Vicente Fernández Pérez; vice, Néstor Martínez; vocales, Pablo Rivó Cascaré, Casimiro Lora, Dionisio Olivares, Pedro Torres, Julio Caballero y Demetrio La O Barrientos y 120 suplentes.

El poder ejecutivo estaba constituido por los Presidentes, Secretarios y Tesoreros de los 12 barrios o cuartones: José Grande, La Caridad, Los Ñames, Soledad de Mayarí, El Lechero, La Ayúa, Baltasar, San Fernando, El Saíto, Saltadero, Limonar y Zarbapicada, con facultad de proponer y discutir todo lo pertinente para la buena marcha de la Asociación y especialmente en aquella emergencia, todo cuanto tuviera que ver con los intereses del pueblo.

Los principales dirigentes integraban el Comité Central de Lucha que dirigía el Partido. En todo el periodo de lucha se organizaron brigadas de trabajo colectivo para la cosecha de café y el cultivo de frutos menores que no permitió que pasaran hambre y se organizó un curso de alfabetización con estudiantes llegados desde La Habana.

Véase también

Fuentes

  • José Antonio Almenares. Historiador del municipio El Salvador.