Judío (etnia)

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Judío
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Concepto:La palabra "judío" se deriva del reino de Judá, que incluyó dos de las doce tribus de Israel.

Los judíos son un pueblo que desciende de los israelitas bíblicos y que están unidos por la religión llamada judaísmo. La identidad judía no es una raza sino una mezcla de elementos étnicos, nacionales y religiosos. Un individuo puede formar parte del pueblo judío por la conversión al judaísmo.

Los judíos han sufrido una larga historia de persecución en diferentes lugares y su población ha ido variando a lo largo de los siglos. Hoy en día, la mayoría de las autoridades estiman que la actual población judía mundial oscila entre los 12 y los 15 millones, la mayoría de ellos residentes en Estados Unidos e Israel.

Etimología

El término "judío" (en hebreo, yehudi [iejúdi]: 'alaba a [el dios] Yeh') procede de Judá (en hebreo, Yehuda [iejúda]), quien era uno de los hijos del patriarca bíblico Jacob. Judá (o su variante griega Judea) designaba también a una entidad política que existió en la región oriental del Mediterráneo, al menos desde mil años antes de la era común y hasta un siglo después. Los habitantes de Judea eran los judíos, término que luego fue ampliándose también a los que habían emigrado desde Judea y a sus descendientes. En castellano, el término judío procede del latín judaeus, a su vez derivado del griego Ioudaios. Existe equivalencia etimológica en otras lenguas; por ejemplo, jude en alemán, juif en francés, jueu en catalán, jew en inglés, xudeu en gallego, chodigo en aragonés, jøde en danés, zsidó en húngaro, etc.

La palabra "judío" no aparece en la Torah (los 5 libros atribuidos al profeta Moisés), sino que viene a aparecer en el resto de los libros del Tanaj; esto no significa que la palabra "judío" sea peyorativa frente a la palabra "hebreo" (ivri).

Judíos y judaísmo

Hasta el siglo XVIII, los vocablos judíos y judaísmo eran prácticamente sinónimos. Sin embargo, la llegada de la Haskalá (ilustración judía) supuso un cambio radical en la mentalidad de muchos judíos que se vieron a sí mismos como miembros de un mismo pueblo, pero separados de la tradicional adhesión a la fe judaica.

Identidad judía

Generalmente, el uso del término judío se utiliza para referirse a tres grupos: aquellos que tienen orígenes étnicos judíos, aquellos que practican el judaísmo y aquellos que se identifican como tales por su identificación cultural e histórica. La halajá, la ley judía, da otra definición de la identidad judía. De acuerdo con la legislación judía, judío es aquel que: a) es hijo de madre judía (ley que deriva del pasaje de Deuteronomio 7:1-5) o b) aquella persona que se convierte formalmente al judaísmo bajo la supervisión halájica de un reconocido Bet Din (corte judía) presidida por tres dayanim (jueces). Este proceso de conversión está desarrollado en textos legales judios, tales como el Talmud, el Shulján Aruj y las interpretaciones de la ortodoxia rabínica. Pero además de esa definición ortodoxa existen otras definiciones, como las de las corrientes reformistas, reconstruccionistas y liberales, que afirman que es judío aquel que tiene un padre judío (en el sentido genérico, es decir, un padre o una madre). El humanismo judío afirma que es judío "quien se siente judío" sin importar si tiene ascendencia judía o si hace una conversión religiosa.

Por conversión

Si bien el judaísmo no fomenta la conversión y a lo largo de la historia no se conocen casos en donde el pueblo judío haya sometido a otro a convertirse, el mismo está contemplado. Para hacerlo es necesario tener un estudio amplio sobre la Torá, capacitado por un Moré (Maestro). Los filtros para la conversión al judaísmo, si bien varían según las distintas corrientes, suelen ser muy exigentes, puesto que se busca por parte de los rabinos que la conversión sea sincera y sin motivaciones ulteriores. En el pasado hubo ejemplos de conversiones en masa al judaísmo, como es el caso del pueblo de Samaria, que sin ser descendientes de Jacob en un sentido físico abrazaron el judaísmo aunque nunca perdieron del todo sus creencias y costumbres, por lo cual los judíos de Jerusalén nunca los vieron con total agrado. Otro caso de conversión en masa es la de los jinetes partos.

Pérdida de la condición de judío

En cuanto a la pérdida del judaísmo, acorde con la ley judía (Halajá), no existe modo de perder el judaísmo. Quien nace judío o se convierte, no pierde su condición de judío incluso después de cometer uno de los tres peores pecados: paganismo, asesinato o aberraciones sexuales. A pesar de esto la ley judía utilizó otra arma contra pecadores de mayor escala: el expulsar de la comunidad (“El Herem” o “El Nidui”). El poder de separar de la comunidad se remonta a las primeras épocas bíblicas, pero se empezó a usar en forma sistemática durante la época talmúdica en el Segundo Templo de Jerusalén, y se continuó su uso durante la era moderna. Baruch Spinoza, Uriel da Costa son algunos de los judíos más importantes que fueron depurados. Marx y Freud vivieron algo parecido. Cabe acotar que, de acuerdo con la ley judía, existen caminos para ser aceptado nuevamente en la comunidad, y esto marca el hecho de que, según ésta, no existe pérdida de la judeidad.

Grupos étnicos

Ashkenazim

Ashkenaz es el nombre dado a Alemania por los judíos y ashkenazí («alemán») es el nombre que recibían los judíos de Alemania. Se usó luego para describir a los judíos provenientes de Europa de modo general. Su idioma es el yídish, que es un dialecto germano con influencia hebrea y eslava. Habitaron principalmente en Alemania, Polonia, Ucrania y Rusia. No son judíos ashkenazim los que tienen raíces en los siguientes países de Europa: la Península Ibérica y regiones de Italia, Grecia, Turquía, los Balcanes, Inglaterra, Holanda y Francia. Los judíos ashkenazim adoptaron las interpretaciones de las mitzvot de las escuelas rabínicas de Israel, y los judíos orientales, las de las escuelas babilónicas.

Sefaradim

Sefarad es el nombre hebreo para lo que fue la provincia romana de Hispania. Sefardí quiere decir "español" en hebreo antiguo y es la palabra para designar a los judíos de España y Portugal. Hicieron grandes contribuciones a la cultura hispana, pero fueron expulsados por motivos religiosos de la península en 1492, por orden de los Reyes Católicos. A los descendientes de estos judíos se les siguió llamando sefardíes, sefaraditas o sefarditas, sin importar en qué parte del mundo hayan nacido. Su idioma es el judeoespañol o ladino, que es un dialecto del castellano. Muchos de estos judíos expulsados terminaron acompañando a los conquistadores al Nuevo Mundo, instalándose en México, Sudamérica y Puerto Rico.

En 1924, el general Primo de Rivera concedió la ciudadanía española a los judíos sefardíes por "razones históricas", lo cual salvó muchas vidas durante la Segunda Guerra Mundial. Un caso muy claro fue el del cónsul Ángel Sanz Briz, que salvó a miles de judíos del Holocausto en Hungría, diciendo que los judíos sefardíes eran ciudadanos españoles y por tanto tenían apoyo total de su gobierno, aunque para salvar vidas se hizo pasar a muchos no-sefardíes por sefardíes.

En 1991, el Museo del Holocausto Yad Vashem de Israel distinguió su acción y reconoció a sus herederos el título de Justo entre las Naciones, inscribiendo su nombre en el memorial del Holocausto. En 1994 el gobierno húngaro le concedió a título póstumo la Cruz de la Orden del Mérito de la República Húngara. Fue el primer diplomático español que apareció en un sello de correos de España.

Mizrajim o edot hamizraj

Mizrají (mizrajim en plural) es el nombre dado a las comunidades judías que inmigraron de los países del Medio Oriente, notablemente de Yemen, Irak e Irán. Muchos los denominan erróneamente sefaradim dentro del mismo Israel, aunque nada tienen que ver con la Península Ibérica. El término correcto para denominarlos en hebreo es edot hamizraj (comunidades del Oriente). Toman su interpretación de los preceptos de las escuelas rabínicas de Babilonia. Son los judíos del mundo árabe e iranio.

Lenguas judías

Tradicionalmente, se conoce como idioma hebreo la lengua litúrgica del judaísmo (también conocido como lashon ha-kodesh, 'lengua santa'), el lenguaje en el que el Tanaj fue escrito, el habla de los judíos durante siglos y, junto con el árabe, uno de los dos idiomas oficiales del Estado de Israel.

Tal y como lo conocemos hoy, el hebreo (o hebreo moderno) es fruto de la obra del lingüista Eliezer Ben Yehuda que llegó a Palestina en 1881 y revivió un lenguaje que únicamente se utilizaba en los servicios religiosos judíos, pues durante más de dieciséis siglos quedó en desuso.

Por otro lado, en la mayoría de los casos, allá donde se asentaban en la diáspora, los judíos desarrollaban un lenguaje propio consistente en la mezcla de vocablos nativos y hebreos. Así, el ladino de los judíos de la Península Ibérica o el yídish de los judíos de la Europa Central. Otros idiomas menores son el judeo-arameo, judeo-persa o judeo-árabe.

Población

Antes de la Segunda Guerra Mundial la población judía del mundo era de aproximadamente 18 millones. El Holocausto redujo este número en unos 6 millones. Hoy se estima que hay un número aproximado de 15 millones de judíos que habitan en 134 países

Zonas con población considerable

La cifras dadas a continuación representan estimativos mínimos de la población judía mundial, un 0,2 por ciento de la población mundial total.

País o región Población judía Población total %
Estados Unidos 5.300.000 - 6.155.000 301.469.000 1,8-1,9%
Israel 5.542.000 7.337.000 75,5%
Europa 2.000.000 710.000.000 0,3%
Bélgica 30.000 10.419.000 0,3%
España 12.000 47.150.800 0,03%
Francia 494.000 64.102.140 0,8%
Rusia 228.000 142.400.000 0,15%
Reino Unido 267.000 60.609.153 0,4%
Alemania 220.000 82.310.000 0,3%
Ucrania 103.591 46.481.000 0,2%
América (excl. EEUU) 1.000.000 850.000.000 0,1%
Canadá 371.000 32.874.400 1,1%
Uruguay 34.000 3.420.722 1,0%
Argentina 185.000 39.921.833 0,5%
Brasil 101.000 190.730.694 0,1%
Chile 75.000 16.134.219 0,4%
México 67,000 112.000.000 0,1%
África 113.000 906.000.000 0,01%
Sudáfrica 106.000 47.432.000 0,2%
Oceanía 130.000 31.000.000 0,35%
Australia 126.000 20.788.357 0,6%
Asia (excl. Israel) 50.000 3.900.000.000 0,001%
Total 14.128.000 6.453.628.000 0,22%

Fuentes

  1. Estalper J, ed, Enciclopedia de Historia de los Judíos (1986); Bacon J, El Atlas Ilustrado de la civilización judía, (1991)dounidense. 2006.
  2. Juan Pedro Cavero Coll (2007). El pueblo judío en la historia.
  3. Muchnik, Mario. Mundo Editorial Lumen. Barcelona, 1983
  4. Paul Johnson (2006). La historia de los judíos. Zeta Bolsillo.
  5. Stillman NA, Los Judios de los territorios árabes en los tiempos modernos (1991).