Rafael Ferro Macías
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Rafael Ferro Macías (1934 - 1958). Apodado Ferrito. Combatiente clandestino contra la dictadura de Fulgencio Batista. Ocupó importantes responsabilidades dentro del Movimiento 26 de Julio en Pinar del Río. Murió en un enfrentamiento desigual con las fuerzas del gobierno.
Biografía
Nació en un modesto hogar del reparto La Flora de la ciudad Pinar del Río el 4 de julio de 1934. Hijo de Ursinio Ferro y Rosa María Macías, estudia en la Academia González, más tarde ingresa en la Escuela Profesional de Comercio y en el Instituto de Segunda Enseñanza.
Al producirse el Golpe de estado del 10 de marzo de 1952 encabezado por Fulgencio Batista. Ferrito trabajaba en un establecimiento comercial de esta ciudad, la Sastrería el Capri, contaba en ese entonces con 18 años a partir de ese instante sus inquietudes revolucionarias en la lucha estudiantil se hacen más radicales, más conscientes y con objetivos más definidos, cuando el asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes conoció que había un líder, Fidel Castro Ruz que señalaba como único camino la lucha armada y él estaba dispuesto a seguirla. El carácter de Ferrito no le permitía estar sin hacer nada y tan pronto se organiza la primera dirección del M-26-7 (en julio de 1955), es uno de sus combatientes fundadores en las brigadas juveniles y junto a otros compañeros inicia actividades de propaganda y algún que otro sabotaje. Estas primeras acciones las realiza bajo la jefatura de su compañero Juan Cáceres Balladares.
Acciones relevantes
Participa en la Marcha de las antorchas el domingo de 29 de enero de 1956, que tendría lugar en el Parque Colón. Esta acción del movimiento estudiantil pinareño fue violentamente reprimida por las fuerzas represivas de la tiranía, muchos de los estudiantes fueron salvajemente golpeados y otros, heridos de bala, siendo Ferrito uno de los más apaleados en el suelo de las calles Máximo Gómez y Colón siendo trasladado y detenido para la jefatura de la policía.
Ya para los días finales de este año 1956, se había convertido en un destacado luchador y líder del movimiento insurreccional pinareño. Al frente de un grupo de combatientes del movimiento, se alza en las montañas situadas entre Viñales y la ciudad capital, con el objetivo de distraer al ejército batistiano; pues se esperaba para esta fecha 30 de noviembre de 1956, la llegada del Yate Granma con un grupo de expedicionarios encabezados por Fidel Castro Ruz.
Este intento en Pinar del Río y Minas de Matahambre falló y la mayoría de los jóvenes bajo su jefatura tuvieron que replegarse y fueron detenidos y conducidos al regimiento Rius Rivera, donde Rafael Ferro Macías fue torturado sin que de sus labios saliera una sola palabra, más tarde fueron conducidos a la cárcel provincial de dicha ciudad.
Durante los años 1957-1958 participa activamente en las acciones y sabotajes en la ciudad de Pinar del Río. Tenazmente perseguido por el ejército para finales de febrero de 1958 contribuye en la organización de la guerrilla suburbana del Guayabo, donde concurren alrededor de una docena de combatientes muy perseguidos, quemados, bajo la jefatura de Manuel Nodarse (Bola Prieta), también se incorpora entre marzo y abril al intento de crear un frente guerrillero dirigido por Juan Palacios. Baja al llano y continua la lucha clandestina realizando riesgosas acciones .
Muerte
Se incorpora nuevamente a la lucha en las montañas a finales de julio de 1958 bajo las ordenes de Dermidio Escalona Alonso siendo uno de los fundadores del frente guerrillero de Pinar del Río. De la sierra bajó el capitán Rafael Ferro Macías enviado por sus compañeros a ocupar la jefatura de acción y sabotaje del MR-26-7, importante y peligrosa misión que se le había encomendado en el llano, en la clandestinidad dura y difícil.
El 18 de agosto de 1958, cuando trataba de conseguir armas para el movimiento, y en el lugar conocido como el Bar de Izquierdo en el kilometro 2 1/2 de la carretera a La Coloma es sorprendido. Al saberse acorralado trata de defenderse , pero es baleado por sus atacantes, los que sabiendo que estaba moribundo le dan el tiro de gracia.
Sus familiares, compañeros y el pueblo pinareño velaron su cadáver en su domicilio de la calle Vandama y le hicieron guardia de honor, sobre sus hombros colocaron la estrella de comandante y cubrieron su ataúd con la bandera del MR-26-7.
Fuente
- Otero Alonso Osniel, Historiador.