Samsung Galaxy S24 Ultra
Samsung Galaxy S24 Ultra vuelve a apostar por el cristal, los biseles están recubiertos de titanio. el color es prácticamente idéntico al que vimos en el iPhone 15 Pro Max. Su calidad de construcción es de las más altas que hemos visto.
El remate y la calidad de los acabados es sobresaliente. La botonera no tiene el más mínimo juego, pese a ser un móvil rectangular las esquinas no son demasiado molestas.
Sumario
Pantalla:
La pantalla es de 6,8 pulgadas, una resolución Quad HD+, tasa de refresco adaptativa de 120 Hz (120, 80, 60, 48, 30, 24 y 10 Hz en pantalla encendida) y un brillo pico de 2.600 nits.
Es compatible con HDR 10+, pero no tiene soporte para Dolby Vision. Tiene como desventaja frente a rivales como el iPhone o los nuevos paneles BOE que incorporan teléfonos como el OnePlus 12. No todo es brillo máximo. Este es un panel mucho más cuidadoso con la fatiga visual
El PWM dimming, que ha pasado ahora a los 492 Hz es más alto por los parpadeos del panel al hacerle fotografías con cámara DSLR. hace referencia a cómo regula el panel la señal brillo. Según se comporte el ciclo de apagado/encendido de los píxeles, será más o menos perceptible para el ojo humano. Cuanto menos perceptible sea mayor PWM Dimming, menor fatiga visual.
El comportamiento del brillo automático es mejorable. El pico máximo de brillo no se activa de forma inmediata, tal y como hacen la mayoría de sus rivales. Necesita algo de tiempo bajo fuerte incidencia de luz solar para poder brillar al máximo. Una vez llega a este pico, es algo irregular manteniéndolo.
Es un comportamiento prácticamente inevitable, ya que mantener tal cantidad de brillo de forma sostenida provocaría un importante drenaje de batería. Posee uno de los mejores comportamientos de brillo mínimo, hasta el punto de lograr que casi no se vea el panel. Esto permite un importante ahorro en modo Always on Display, y protege nuestra vista cuando estamos en entornos oscuros.
Novedades
- A nivel de software, como un nuevo "tono de color adaptable" que ajusta los colores y el balance de blancos en función de las condiciones de iluminación del ambiente. Su objetivo es lograr la mayor precisión del color independientemente del entorno en el que estemos.
- Opciones de calibración siguen siendo algo escasas, con ajuste de balance de blancos en modo "intenso" y ninguna otra opción si apostamos por el modo "natural".
- Ángulos de visión son buenos, con un ligero tinte azulado cuando inclinamos bastante el teléfono. Aquí sigue sin ser el panel que mejor representa el blanco, pero en términos generales estamos ante un pantalla sencillamente sobresaliente.
Sonido
Los altavoces se han renovado esta generación y el volumen máximo es alto, muy alto. No obstante, la distorsión es alta a partir del 80%, y el sonido es algo metálico en los rangos más altos de volumen. Mediante ecualización podemos corregir buena parte de este comportamiento, pero aquí hay cierto margen de mejora.
Desde los ajustes podemos activar la compatibilidad con Dolby Atmos automática, la cual aplica tanto al multimedia como a los propios juegos. Desde los propios ajustes de Dolby podemos también escoger entre distintos modos, a saber: película, música y voz. En mi experiencia, el modo automático no funciona demasiado bien.
Tenemos también un ecualizador multibanda (nueve bandas), en las que podemos configurar al gusto cómo será la salida de audio. Si no sabemos cómo hacerlo, podemos apostar por cualquiera de los cinco modos personalizados por Samsung.
Samsung tiene su tecnología propia Adapt Sound. Mediante la misma, se pretende crear preajustes personalizados según la propia edad del usuario. Según el rango en el que nos encontremos, se optimizan las frecuencias más óptimas.


