Silvano

Silvano
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Deidad
Religión o MitologíaMitología griega
País o región de origenGrecia Antigua

Silvano . Originariamente Silvanus era un simple epíteto de una divinidad de las selvas (silvae en latín), probablemente de Fauno o del dios griego Pan. Después, el epíteto se personificó en un dios auténtico, de nombre Silvanus o Silvano. Dios de las selvas, puestas directamente bajo su protección, era amigo de los hombres y en su favor se cuidaba de que crecieran bien las plantas. Tutelaba los árboles de los bosques y de los campos; protegía de peligros a todas las tierras cultivadas y a las casas de campo.

Dios, asimismo, de los ganados y, por tanto, protector de campesinos, así como de los pastores y de los cazadores, Silvano era, además, el dios de los confines, es decir, de los límites de la propiedad de cada individuo. Por ello, los antiguos romanos guardaban tres imágenes del dios: una en la casa, otra en medio de la finca y una tercera en los límites de la propiedad. Un tanto bribón, a la manera de los Faunos, como habitante de las selvas salvajes y abandonadas, se divertía suscitando apariciones y ruidos que aterrorizaban a los viandantes. De él provenían los rumores misteriosos de los bosques, y se decía que quizás en el silencio de la noche dejara sentir desde las densas y tupidas arboledas su terrible voz. Silvano no tuvo nunca un culto ni un templo específicos, ni sacerdotes. Su templo eran los campos. Para tal culto bastaba un bosque, un simple árbol, o un pequeño y rústico altar de piedra construido por los mismos campesinos, cazadores o pastores. Lo tenía también en las casas, pero las oraciones, ofertas y devociones tenían siempre un carácter personal y privado. Se le ofrecía leche o cualquier animal del ganado. Es digno de mención el hecho de que en el culto a Silvano no se admitía a las mujeres. Esto recuerda un paralelo existente con el culto a Bona Dea, donde solamente eran admitidas las mujeres, quedando excluidos los hombres.

Silvano ha llegado hasta nosotros en las leyendas y en sus representaciones como un viejo con una corona de pino en la cabeza, una rama de pino en la mano izquierda, un cuchillo de jardinero en la derecha y con un perro como fiel compañero. A veces, en la mano izquierda, lleva una piel de animal llena de frutos.


Fuentes

Enciclopedia de la mitología. Escobedo, J. C. - 2011