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| − | Clubes revolucionarios en Sagua la Grande. Los clubes revolucionarios en Sagua la Grande se fundaron durante la Guerra Necesaria en total secreto y conspiración debido a que en la ciudad sagüera había una fuerte represión del colonialismo español contra los independentistas. A pesar de ello, varios hombres y mujeres patriotas se sumaron a auxiliar materialmente a las tropas mambisas de la Tercera Brigada del Cuarto Cuerpo del Ejercito Libertador en Sagua la Grande, nombres que se dieron a conocer con el fin de la Guerra del 95 en Cuba. | + | '''Clubes revolucionarios en Sagua la Grande'''. Los clubes revolucionarios en [[Sagua la Grande|Sagua la Grand]]<nowiki/>e se fundaron durante la Guerra Necesaria en total secreto y conspiración debido a que en la ciudad sagüera había una fuerte represión del colonialismo español contra los independentistas. A pesar de ello, varios hombres y mujeres patriotas se sumaron a auxiliar materialmente a las tropas mambisas de la Tercera Brigada del Cuarto Cuerpo del [[Ejército Libertador|Ejercito Libertador]] en Sagua la Grande, nombres que se dieron a conocer con el fin de la [[Guerra del 95|Guerra de 1895]] en Cuba. |
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| + | Con la fundación del [[Partido Revolucionario Cubano]] (PRC) llegan a la región de Sagua la Grande varios comisionados del Delegado [[José Martí]] para preparar la conspiración para la guerra venidera que se organizaba. El primero, Federico Zayas, llega a Sagua en [[1893]], para crear un comité del PRC, lo cual no secundaron sus pobladores por oponerse a la causa de la independencia. Con el mismo objetivo, arriba [[Juan Gualberto Gómez]] a dicha región en junio de [[1894]], sin lograr estimular los intereses patrióticos en este lugar. La llegada, en diciembre de ese mismo año, de [[José Luis Robau]], quien se puso en contacto con diversos patriotas de la zona, aceleró la conspiración en el territorio, con la creación de clubes revolucionarios durante la Guerra Necesaria y la incorporación de los sagüeros a la lucha armada<ref>Colectivo de Autores: Historia Municipal de Sagua la Grande. Inédita, p. 36.</ref>. | ||
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| + | En Sagua la Grande, en febrero y marzo de 1895 comienza a desarrollarse un movimiento conspirativo en el cual estaban implicados el doctor Alfredo de Figueroa, Antonio Zelada, Eugenio Varela, Tomás Basail, Agustín Carvajal, Nicolás Alberdi, Antonio y Miguel Masferrer, José Luis Robau, Ricardo Pocurull, José Sánchez Jorro, los hermanos Caraballo y los Delgado, Rogelio Tomasino, Luis y Pedro Núñez, Rafael Gutiérrez Quirós, Florencio Peraza, Francisco Martínez y Luis Mesa. | ||
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| + | En [[1896]], en el hogar de Manuel Gutiérrez Quirós se reúnen Pedro y Luis Núñez, Delfín y Rogelio Tomasino, Florencio Peraza, Manuel Alberdi, Manuel Seigli y Agustín Carvajal, para tomar como acuerdo no seguir la estructura y organización de un club, sino que cada uno hiciera una labor particular y que el punto en común ante determinadas circunstancias —delaciones, traiciones—sería la casa de Manuel Gutiérrez. Cuando Gutiérrez Quirós, Alberdi y Peraza, amenazados de prisión, emigraron hacia [[Jamaica]], Delfín Tomasino se convierte en punto de convergencia del laborantismo en Sagua hasta el fin de la gesta armada. | ||
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| + | Los nombres antes mencionados no han de considerarse los únicos miembros del laborantismo en Sagua, pues también aparece registrado José Eufemio Morales Rodríguez como auxiliar del club de Sagua, certificado por su presidente Delfín Tomasino Bonet<ref>Manuscritos del Museo de Sagua la Grande.</ref>. Durante la Guerra Necesaria, existió un club femenino sin nomenclatura, presidido por [[Elvira Delmonte Lamar]] —“La dama del paraguas”; “Número Diez” y “Z” — y que tuviera como único miembro —conocida hasta el momento — a Narcisa Rodríguez, negra y criada doméstica. | ||
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| + | Con el inminente triunfo mambí en la Guerra Necesaria, fundan un Comité Patriótico y de auxilios integrado por Eduardo Francisco Rodríguez, Manuel F. Ledón, Manuel Rasco, Delfín Tomasino, Manuel Gutiérrez Quirós, Manuel Alberdi, Manuel Seigli, Florencio Peraza, Rogelio Tomasino, Teodoro Miranda, Lic. Rodríguez Feo, Simeón Gordinez, Antonio Bustillo, Agustín Carvajal, Luis Velazco, José A. Alfonso, Bruno Recio, Ladislao Arbeláez, Atanasio Inza, Manuel F. Arenas, Manuel Santa Cruz, Pedro Rodríguez Mora, José Martel, Aniceto Caraballo, Alfredo López, Luis López, Juan de Dios Oña, Ignacio Larrondo, José V. Andreu, Eugenio Varela, Miguel Junquera, Ricardo Cartaya, Tomás Castañeda, Felipe Esparza, Calixto Casals, Pedro Núñez. Por otra parte, el 14 de octubre de 1898 surge el Club José Martí, en la morada del doctor Simeón A. Godínez, posteriormente presidente de dicha junta<ref>Alcover Beltrán, Antonio M. (1905): ''Historia de la Villa de Sagua la Grande y su jurisdicción.'' Imprenta Anidos La Historia y El Correo Español, Sagua la Grande, pp. 376-429.</ref>. | ||
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| + | === Acciones de los clubes revolucionarios en Sagua la Grande === | ||
| + | Los clubes revolucionarios en Sagua la Grande tuvieron la peculiaridad de no reunirse, no organizarse con una estructura directiva sino que cada patriota sagüero de manera independiente auxiliaba a las tropas mambisas y solo en circunstancias excepcionales mantenían contacto entre sí. Esta particularidad fue resultado directo de la represión española muy fuerte en esa localidad, una de las razones Sagua era para la fecha uno de los enclaves azucareros más importantes del país. | ||
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| + | En estas difíciles circunstancias, junto a los bandos de reconcentración del Capitán [[Valeriano Weyler]] y sumados a la falta de una administración militar que le garantizara al soldado mambí lo indispensable para sobrevivir en la guerra irregular, los patriotas sagüeros auxiliaron material y moralmente a las tropas mambisas. Su auxilio se desplegó en alimentos, principalmente en productos que ellos no podían encontrar en la manigua, como: azúcar, café, sal, chocolate, arroz y galleta<ref>Recibos en los manuscritos del Museo de Sagua la Grande. </ref>. También, en medicinas y utensilios médicos que solventaron los dos problemas sanitarios esenciales en el territorio: la propagación del paludismo y las curas antisépticas de las heridas de balas. Además de solventar otras necesidades de vestimenta y utensilios como: ropas, calzados, escarapelas, insignias, utensilios para sus bestias (caballos), para taparse del frío, papeles y tinta para poder comunicarse con las ciudades y el exterior del país<ref>Mani, Adriana y Moya, Nereyda (2021): ''Los clubes revolucionarios en Las Villas Occidentales.'' Editorial Mecenas, Cienfuegos, pp. 39-54.</ref>. | ||
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| + | El principal medio de transporte empleado para trasladar estos víveres y necesidades básicas a las tropas de la Tercera Brigada de la Segunda División era el sistema ferroviario. Los responsables de este punto de comunicación eran Agustín Carvajal, Luis Velazco y el maquinista José Roque. En la medida de las posibilidades, los clubes revolucionarios de esta región no se limitaron a ayudar únicamente a su brigada, sino que también lo hacían con las otras dos y con la Segunda División del Cuarto Cuerpo del Ejército Libertador. | ||
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| + | El fin de la Guerra Necesaria lo marca la entrada de las tropas mambisas de la Tercera Brigada del Cuarto Cuerpo del Ejército Libertador, dirigidas por José Luis Robau, en Sagua la Grande el [[1 de enero|1ro. de enero]] de [[1899]]<ref>Colectivo de Autores: Historia Municipal de Sagua la Grande. Inédita, p. 51.</ref>. A partir de esa fecha, se pone en conocimiento público y se le brinda respeto y tributo a aquellos patriotas sagüeros que a riesgo de su vida conspiraban en la clandestinidad a favor de alcanzar la independencia cubana del colonialismo español. | ||
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| + | == Referencias == | ||
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== Fuentes == | == Fuentes == | ||
| − | * | + | * Alcover Beltrán, Antonio M. (1905): Historia de la Villa de Sagua la Grande y su jurisdicción. Imprenta Anidos La Historia y El Correo Español, Sagua la Grande. |
| − | + | * Colectivo de Autores: Historia Municipal de Sagua la Grande. Inédita. | |
| − | + | * Mani, Adriana y Moya, Nereyda (2021): ''Los clubes revolucionarios en Las Villas Occidentales.'' Editorial Mecenas, Cienfuegos. | |
| − | + | * Manuscritos del Museo de Sagua la Grande. | |
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| − | * Mani, Adriana y Moya, Nereyda (2021): ''Los clubes revolucionarios en Las Villas Occidentales.'' Editorial Mecenas, Cienfuegos | ||
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Clubes revolucionarios en Sagua la Grande. Los clubes revolucionarios en Sagua la Grande se fundaron durante la Guerra Necesaria en total secreto y conspiración debido a que en la ciudad sagüera había una fuerte represión del colonialismo español contra los independentistas. A pesar de ello, varios hombres y mujeres patriotas se sumaron a auxiliar materialmente a las tropas mambisas de la Tercera Brigada del Cuarto Cuerpo del Ejercito Libertador en Sagua la Grande, nombres que se dieron a conocer con el fin de la Guerra de 1895 en Cuba.
Sumario
Formación de los clubes revolucionarios en Sagua la Grande
Con la fundación del Partido Revolucionario Cubano (PRC) llegan a la región de Sagua la Grande varios comisionados del Delegado José Martí para preparar la conspiración para la guerra venidera que se organizaba. El primero, Federico Zayas, llega a Sagua en 1893, para crear un comité del PRC, lo cual no secundaron sus pobladores por oponerse a la causa de la independencia. Con el mismo objetivo, arriba Juan Gualberto Gómez a dicha región en junio de 1894, sin lograr estimular los intereses patrióticos en este lugar. La llegada, en diciembre de ese mismo año, de José Luis Robau, quien se puso en contacto con diversos patriotas de la zona, aceleró la conspiración en el territorio, con la creación de clubes revolucionarios durante la Guerra Necesaria y la incorporación de los sagüeros a la lucha armada[1].
Clubes revolucionarios en Sagua la Grande
En Sagua la Grande, en febrero y marzo de 1895 comienza a desarrollarse un movimiento conspirativo en el cual estaban implicados el doctor Alfredo de Figueroa, Antonio Zelada, Eugenio Varela, Tomás Basail, Agustín Carvajal, Nicolás Alberdi, Antonio y Miguel Masferrer, José Luis Robau, Ricardo Pocurull, José Sánchez Jorro, los hermanos Caraballo y los Delgado, Rogelio Tomasino, Luis y Pedro Núñez, Rafael Gutiérrez Quirós, Florencio Peraza, Francisco Martínez y Luis Mesa.
En 1896, en el hogar de Manuel Gutiérrez Quirós se reúnen Pedro y Luis Núñez, Delfín y Rogelio Tomasino, Florencio Peraza, Manuel Alberdi, Manuel Seigli y Agustín Carvajal, para tomar como acuerdo no seguir la estructura y organización de un club, sino que cada uno hiciera una labor particular y que el punto en común ante determinadas circunstancias —delaciones, traiciones—sería la casa de Manuel Gutiérrez. Cuando Gutiérrez Quirós, Alberdi y Peraza, amenazados de prisión, emigraron hacia Jamaica, Delfín Tomasino se convierte en punto de convergencia del laborantismo en Sagua hasta el fin de la gesta armada.
Los nombres antes mencionados no han de considerarse los únicos miembros del laborantismo en Sagua, pues también aparece registrado José Eufemio Morales Rodríguez como auxiliar del club de Sagua, certificado por su presidente Delfín Tomasino Bonet[2]. Durante la Guerra Necesaria, existió un club femenino sin nomenclatura, presidido por Elvira Delmonte Lamar —“La dama del paraguas”; “Número Diez” y “Z” — y que tuviera como único miembro —conocida hasta el momento — a Narcisa Rodríguez, negra y criada doméstica.
Con el inminente triunfo mambí en la Guerra Necesaria, fundan un Comité Patriótico y de auxilios integrado por Eduardo Francisco Rodríguez, Manuel F. Ledón, Manuel Rasco, Delfín Tomasino, Manuel Gutiérrez Quirós, Manuel Alberdi, Manuel Seigli, Florencio Peraza, Rogelio Tomasino, Teodoro Miranda, Lic. Rodríguez Feo, Simeón Gordinez, Antonio Bustillo, Agustín Carvajal, Luis Velazco, José A. Alfonso, Bruno Recio, Ladislao Arbeláez, Atanasio Inza, Manuel F. Arenas, Manuel Santa Cruz, Pedro Rodríguez Mora, José Martel, Aniceto Caraballo, Alfredo López, Luis López, Juan de Dios Oña, Ignacio Larrondo, José V. Andreu, Eugenio Varela, Miguel Junquera, Ricardo Cartaya, Tomás Castañeda, Felipe Esparza, Calixto Casals, Pedro Núñez. Por otra parte, el 14 de octubre de 1898 surge el Club José Martí, en la morada del doctor Simeón A. Godínez, posteriormente presidente de dicha junta[3].
Acciones de los clubes revolucionarios en Sagua la Grande
Los clubes revolucionarios en Sagua la Grande tuvieron la peculiaridad de no reunirse, no organizarse con una estructura directiva sino que cada patriota sagüero de manera independiente auxiliaba a las tropas mambisas y solo en circunstancias excepcionales mantenían contacto entre sí. Esta particularidad fue resultado directo de la represión española muy fuerte en esa localidad, una de las razones Sagua era para la fecha uno de los enclaves azucareros más importantes del país.
En estas difíciles circunstancias, junto a los bandos de reconcentración del Capitán Valeriano Weyler y sumados a la falta de una administración militar que le garantizara al soldado mambí lo indispensable para sobrevivir en la guerra irregular, los patriotas sagüeros auxiliaron material y moralmente a las tropas mambisas. Su auxilio se desplegó en alimentos, principalmente en productos que ellos no podían encontrar en la manigua, como: azúcar, café, sal, chocolate, arroz y galleta[4]. También, en medicinas y utensilios médicos que solventaron los dos problemas sanitarios esenciales en el territorio: la propagación del paludismo y las curas antisépticas de las heridas de balas. Además de solventar otras necesidades de vestimenta y utensilios como: ropas, calzados, escarapelas, insignias, utensilios para sus bestias (caballos), para taparse del frío, papeles y tinta para poder comunicarse con las ciudades y el exterior del país[5].
El principal medio de transporte empleado para trasladar estos víveres y necesidades básicas a las tropas de la Tercera Brigada de la Segunda División era el sistema ferroviario. Los responsables de este punto de comunicación eran Agustín Carvajal, Luis Velazco y el maquinista José Roque. En la medida de las posibilidades, los clubes revolucionarios de esta región no se limitaron a ayudar únicamente a su brigada, sino que también lo hacían con las otras dos y con la Segunda División del Cuarto Cuerpo del Ejército Libertador.
El fin de la Guerra Necesaria lo marca la entrada de las tropas mambisas de la Tercera Brigada del Cuarto Cuerpo del Ejército Libertador, dirigidas por José Luis Robau, en Sagua la Grande el 1ro. de enero de 1899[6]. A partir de esa fecha, se pone en conocimiento público y se le brinda respeto y tributo a aquellos patriotas sagüeros que a riesgo de su vida conspiraban en la clandestinidad a favor de alcanzar la independencia cubana del colonialismo español.
Referencias
- ↑ Colectivo de Autores: Historia Municipal de Sagua la Grande. Inédita, p. 36.
- ↑ Manuscritos del Museo de Sagua la Grande.
- ↑ Alcover Beltrán, Antonio M. (1905): Historia de la Villa de Sagua la Grande y su jurisdicción. Imprenta Anidos La Historia y El Correo Español, Sagua la Grande, pp. 376-429.
- ↑ Recibos en los manuscritos del Museo de Sagua la Grande.
- ↑ Mani, Adriana y Moya, Nereyda (2021): Los clubes revolucionarios en Las Villas Occidentales. Editorial Mecenas, Cienfuegos, pp. 39-54.
- ↑ Colectivo de Autores: Historia Municipal de Sagua la Grande. Inédita, p. 51.
Fuentes
- Alcover Beltrán, Antonio M. (1905): Historia de la Villa de Sagua la Grande y su jurisdicción. Imprenta Anidos La Historia y El Correo Español, Sagua la Grande.
- Colectivo de Autores: Historia Municipal de Sagua la Grande. Inédita.
- Mani, Adriana y Moya, Nereyda (2021): Los clubes revolucionarios en Las Villas Occidentales. Editorial Mecenas, Cienfuegos.
- Manuscritos del Museo de Sagua la Grande.
