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Dimitrov enseñaba a los comunistas y a todos los trabajadores búlgaros a permanecer vigilantes, a desenmascarar implacablemente a todos los enemigos del pueblo, a conservarse fieles hasta el fin a la causa de la liberación de la clase obrera, a la causa del comunismo, a seguir siempre y en todo las enseñanzas del Partido Comunista de la Unión Soviética.
 
Dimitrov enseñaba a los comunistas y a todos los trabajadores búlgaros a permanecer vigilantes, a desenmascarar implacablemente a todos los enemigos del pueblo, a conservarse fieles hasta el fin a la causa de la liberación de la clase obrera, a la causa del comunismo, a seguir siempre y en todo las enseñanzas del Partido Comunista de la Unión Soviética.
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El pueblo búlgaro, bajo la dirección del Partido Comunista de Bulgaria edificó con éxito el socialismo. Su amistad cada vez más sólida con los pueblos de la Unión Soviética y de todos los países del campo de la paz, de la [[democracia]] y el socialismo, constituyó la garantía de su victoria.
  
 
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Revisión del 09:22 16 dic 2019

Jorge Dimitrov
Información sobre la plantilla
Dimitrov.jpg
Heroico hijo de clase obrera Búlgara.
NombreJorge Mijailovich Dimitrov
Nacimiento18 de junio de 1882
cerca de la ciudad búlgara Radomir
Fallecimiento1949

Jorge Mijailovich Dimitrov (1882-1949). Lider de la clase obrera búlgara, en 1933 es acusado por el incendio del Reichstag alemán junto a otros compañeros, ridiculizó y desenmascaró a la camarilla hitleriana, demostró que la farsa había sido montada por los propios nazis, y frustro el propósito de asestar a los comunistas un golpe decisivo.Ocupó el cargo de jefe del gobierno de la República Popular Búlgara desde 1946 hasta su muerte, en 1949.

Síntesis biográfica

Nació un 18 de junio de 1882, cerca de la ciudad búlgara Radomir. Para sobrevivir tuvo que trabajar de impresor y desde los 15 años participó en la actividad política, dirigiendo la Unión de Sindicatos de Bulgaria.

Desde 1910 y con 28 años Dimitrov formó parte del Comité Central del Partido Comunista de Bulgaria.

Trayectoria revolucionaria

Cuando Dimitrov tenía 41 años de edad, una dictadura fascista derrocó al gobierno constitucional campesino de Stam-bolijski y desató una dura represión contra el Partido Comunista y sus militantes, a pesar de las duras condiciones de represión y persecución, se preparó en la clandestinidad el levantamiento popular antifascista, en septiembre de 1923.

Este movimiento y acción armada del proletariado búlgaro fue aplastado violentamente, debiendo Dimitrov salir del país porque fue sentenciado a muerte. Se dirigió al extranjero donde continuó su actividad política. En Yugoslavia, lideró durante 3 meses el periódico del partido “Diario Obrero”. Fue reconocida internacionalmente su labor.

Dimitrov era un internacionalista proletario consecuente. Combatía con abnegación el “chovinismo” y el nacionalismo búlgaros, la guerra imperialista. El gobierno búlgaro reaccionario lo perseguía cruelmente. A pesar de las veces que fue condenado a prisión y de las dos veces que fue condenado a muerte, Dimitrov no cesó sin embargo de luchar por los intereses de los trabajadores.

Dimitrov se adhirió al Partido Obrero Socialdemócrata de Bulgaria en 1902, y luchó activamente en el seno de la corriente marxista revolucionaria contra los reformistas. Más tarde, después de la victoria de la Gran Revolución de Octubre en Rusia, y debido al impulso revolucionario que ésta había provocado en Bulgaria, se produjo el nacimiento del Partido Comunista búlgaro. Como dirigente del Partido Comunista de Bulgaria, formó parte de la Internacional Comunista. En 1921, los comunistas búlgaros nombraron a Dimitrov delegado al III Congreso de la Internacional Comunista. En 1923, dirigió conjuntamente con Koralov, la insurrección de Septiembre que contribuyó sensiblemente a despertar la conciencia de clase de los obreros y de los campesinos búlgaros. En el XII Pleno del Comité Ejecutivo de la Internacional Comunista, realizado en septiembre de 1932, dio a conocer su propuesta sobre el Frente Único y la acción del proletariado para derrotar al fascismo.

En Berlín, cuando Jorge Dimitrv tenía 51 años, conjuntamente con sus camaradas B. Popov y W. Tanev, fue detenido un 9 de marzo de 1933, acusándoseles del incendio del Reichstag (parlamento alemán), ocurrido un 27 de febrero del mismo año.

Dimitrov era una personalidad notable en el movimiento obrero mundial, uno de los organizadores de la lucha internacional contra la guerra y el fascismo, por la paz y el comunismo. Desplegó una gran actividad en el seno del Comité Ejecutivo de la Internacional Comunista. Su intrepidez y su talento de tribuno resplandecieron en 1933 durante el proceso de Leipzig, cuando Dimitrov denunció la provocación fascista y reveló al mundo entero el rostro bestial del fascismo. Su actitud plena de valor desempeñó un gran papel en la movilización de la clase obrera y de todos los trabajadores para la lucha contra la guerra y el fascismo. Gracias a la intervención del gobierno de la URSS y a la acción revolucionaria del mundo entero, Dimitrov fue arrancado de las garras sangrientas del fascismo y llegó a la URSS.

En Moscú, Dimitrov realizó un intenso trabajo para agrupar a los trabajadores en lucha contra el fascismo. Elegido en 1935 secretario general del Comité Ejecutivo de la Internacional Comunista, permaneció en ese puesto hasta la disolución de la misma en 1943. Dedicado a las cuestiones de estrategia y de táctica de los comunistas en la batalla contra la guerra y el fascismo, luchaba por crear y consolidar el frente único contra la reacción imperialista, por formar y educar los cuadros dirigentes de los partidos comunistas hermanos, fieles a la doctrina del marxismo-leninismo. Fue miembro del Soviet Supremo, desde 1937 hasta 1945.

Fue líder del movimiento de resistencia búlgaro durante la II Guerra Mundial. Durante la segunda guerra mundial, Dimitrov se consagró a movilizar las fuerzas populares para la lucha contra los invasores hitlerianos. Organizaba los movimientos de liberación antifascista en los países ocupados por los hitlerianos, dirigía la lucha de los patriotas búlgaros contra el fascismo. Por sus grandes méritos en la lucha contra el fascismo, Dimitrov fue condecorado con la Orden de Lenin en 1945.

Cuando el Ejército Soviético entró en Bulgaria, el pueblo búlgaro guiado por Dimitrov, derribó al fascismo e instauró el régimen de la democracia popular. En noviembre de 1945, Dimitrov, de nuevo en Bulgaria después de 22 años de exilio, desplegó una actividad tumultuosa, dirigió todo el trabajo del Partido, y lanzó un llamado a la lucha por la paz, por la democracia y el socialismo. En la edificación del régimen democrático popular de Bulgaria, dio pruebas de su gran talento de estadista. Bajo su dirección tuvieron lugar el referéndum sobre el régimen político y las elecciones a la Gran Asamblea Popular. Después de una brillante victoria en las elecciones, Dimitrov fue elegido por unanimidad, primer ministro de la República Popular Búlgara.

Dirigió la redacción del proyecto de la nueva Constitución que fue en seguida sometido al examen del pueblo entero. La adopción de la nueva Constitución y la nacionalización casi simultánea de la industria y los bancos, consolidaron en Bulgaria el régimen de democracia popular, una de las formas de dictadura del proletariado. Dimitrov dirigió la restauración y el desarrollo de la economía nacional. El pueblo búlgaro obtuvo grandes éxitos en los dominios económico y cultural, en la elevación del nivel de vida de las masas trabajadoras. En diciembre de 1948, el V Congreso del Partido Comunista Búlgaro trazó el plan de construcción de los fundamentos del socialismo en Bulgaria.

Dimitrov era un eminente teórico del marxismo-leninismo. Exhortaba siempre a inspirarse en la doctrina marxista, en la experiencia del Partido Comunista de la URSS. Defendía con ardor la idea del internacionalismo proletario, luchaba incansablemente contra el nacionalismo, cualquiera que fuese. En el internacionalismo, decía, los comunistas ven la garantía del éxito de la clase obrera de cada país que lucha por el socialismo. En sus discursos y artículos relativos a las cuestiones del movimiento obrero internacional, a la estrategia y a la táctica de los partidos comunistas en lucha contra el imperialismo, en la edificación de una Bulgaria nueva, democrática y popular, Dimitrov aplicaba de una manera creadora el materialismo dialéctico y el materialismo histórico. En carta a la redacción de la revista “Filosofska Misl” (Pensamiento filosófico), precisaba que el estudio de la filosofía afirmaba cada vez más su convicción en la

“necesidad absoluta de asociar la teoría y la práctica, pues la práctica sin teoría es ciega, y la teoría sin práctica es estéril. Es de una importancia capital para el proletariado que debe no sólo explicar científicamente la realidad, sino transformarla radicalmente para sí y para su pueblo”.

Dimitrov se refirió en detalle a las cuestiones planteadas acerca de la función y las tareas de la revista “Filosofska Misl”. Indicó en modo especial, que la revista tenía que desenmascarar y extirpar por todos los medios la ideología fascista (el racismo, la teoría de la dominación de las razas “superiores” sobre las razas “inferiores”, el “führerismo”, la teoría del superhombre, el “chovinismo” gran-búlgaro); que debía denunciar y estigmatizar toda falsificación fascista de la historia en general y de la historia búlgara en particular. La revista, decía Dimitrov, debe ayudar a los intelectuales a formarse una concepción del mundo marxista-leninista, científica. Debe examinar desde el punto de vista marxista los problemas nuevos planteados por la práctica de la construcción socialista. Dimitrov exigía un lenguaje claro, accesible a los lectores. Para mejorar constantemente la revista, se necesitan conocimientos, un inmenso trabajo de sistematización y una severa autocrítica.

Dimitrov enseñaba a los comunistas y a todos los trabajadores búlgaros a permanecer vigilantes, a desenmascarar implacablemente a todos los enemigos del pueblo, a conservarse fieles hasta el fin a la causa de la liberación de la clase obrera, a la causa del comunismo, a seguir siempre y en todo las enseñanzas del Partido Comunista de la Unión Soviética.

El pueblo búlgaro, bajo la dirección del Partido Comunista de Bulgaria edificó con éxito el socialismo. Su amistad cada vez más sólida con los pueblos de la Unión Soviética y de todos los países del campo de la paz, de la democracia y el socialismo, constituyó la garantía de su victoria.

Muerte

En 1949 murió Jorge Dimitrov a los 67 años, siendo jefe del gobierno de la República Popular Búlgara y uno de los más grandes líderes de la clase obrera mundial, un comunista íntegro y un revolucionario de profesión, luchador internacionalista, un heroico combatiente del movimiento comunista.

“En toda la lucha de la clase obrera”, “y en el movimiento socialista y comunista de nuestro país, no ha habido, en los últimos cincuenta años, ningún acontecimiento importante al que no estuviera vinculado el nombre del camarada Jorge Dimitrov y su apasionante actividad de organizador y dirigente”
Manifiesto del Comité Central del Partido Comunista búlgaro en ocasión de la muerte de Dimitrov.

Fuentes