Usuario:Arian.Perez jc/Zona1

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Provincia Cienfuegos
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Provincia de Cuba
Otros nombres: La Perla del Sur
Ubicación de la Provincia Cienfuegos
Ubicación de la Provincia Cienfuegos
CapitalCiudad de Cienfuegos
EntidadProvincia
 • PaísBandera de Cuba Cuba
SuperficiePuesto 12.º
 • Total4 180 km²
Población (2010) 
 • Total407 189 hab.
 • Densidad97,4 hab/km²
 • Pobl. urbana329 982 hab.
GentilicioCienfueguero -a
Foto de Cienfuegos.jpg
Parque José Martí de la Ciudad de Cienfuegos

Cienfuegos. Provincia cubana localizada en la región centro-sur de Cuba, la ciudad del mismo nombre y capital de la provincia, se le reconoce indistintamente como la Perla del Sur o la linda ciudad del mar, la cual cuenta con un producto turístico peculiar, en el que se destacan como elementos fundamentales el potencial náutico. La ciudad conserva el atractivo principal en el centro histórico, conjunto de edificaciones que mantienen el ambiente tradicional y el valor de las construcciones, pues se ha logrado integrar las antiguas y las modernas, formando una unidad ambiental que la identifica dentro de las ciudades del Siglo XIX, cualidad que se ha tenido en cuenta por los organismos internacionales para otorgarle la condición de Patrimonio Cultural de la Humanidad.

Historia

Primeros habitantes

Hasta el presente, se tiene noticia de que los primeros seres humanos que habitaron en la zona que hoy se corresponde a la provincia de Cienfuegos, lo hicieron en la región de Rodas. Los estudios realizados en la región, dan cuenta de evidencias de poblaciones muy antiguas, de entre 3 mil y 6 mil años atrás, en lo que se ha denominado Complejo Palo Liso-Las Glorias.[1]

Otros lugares donde se ha encontrado presencia aborigen antigua, es en el sitio denominado La Ceiba, próximo a la desembocadura del Río Salado, en la Bahía de Jagua y en San Ignacio, municipio de Abreus.

Colonización

En su "Historia de las Indias"[2] Bartolomé de las Casas habla de la llegada de Diego Velázquez a la zona de la Bahía de Jagua y relata el proceso de instalación de este en cayo Ocampo. El propio Bartolomé vivió en Cienfuegos cuando como pago a sus servicios durante la conquista, le fue entregada una encomienda junto a su amigo Pablo de la Rentería.

Según una carta enviada por Velázquez, desde la región de Cienfuegos ordenó este la fundación de la Villa de La Santísima Trinidad:

En el puerto de Jagua a una legua hay un muy buen asiento, ribera del río Arimao casi en medio de las provincias 5, 6, 10 leguas de las minas, muy sano al parecer y de muchas crianzas de todo ganado: hice en él el nombre de Santísima Trininidad.[3]

La fundación de Trinidad en 1514, mejor ubicada con respecto a los yacimientos de metales preciosos y su excelente posición geográfica, fueron determinantes en la lenta incorporación del territorio de Jagua al ámbito socioeconómico de la colonia. Durante ese año en la región se practicaba una rudimentaria extracción de oro, aunque rápidamente los yacimientos se agotaron y para el 1560 solo subsistían algunos lavaderos del metal precioso.

Las tierras de Jagua se entregaron a prominentes miembros de los cabildos de La Habana y Trinidad y los terrenos alrededor de la bahía fueron ocupados por propietarios de hatos y corrales, que comerciaban sus productos con piratas y corsarios.En 1538 piratas y corsarios franceses se posesionaron en Cayo Carenas y Playa Alegre, e incluso el temido Jacques de Sores la visitó en una de sus incursiones. Francis Drake también llegó a Jagua y en su "Diario de Navegación" hace una descripción de la condiciones naturales, la flora y la fauna de la región.

Desde finales del siglo XVI y hasta fines del XVIII en la zona predominaban dos renglones económicos básicos: la cría de ganado y el cultivo del tabaco. La demanda de este último hizo que la producción en Trinidad no diera abasto, por lo que se plantaron nuevas vegas junto a los cursos de los ríos Arimao, Caonao, Mataguá y Damují entre otros.

Cuando la colonia española decretó el Estanco de Tabaco en 1717, los vegueros se negaron a abonar las rentas por las fincas, lo que provocó conflictos y tensiones con las autoridades coloniales.

Desde finales del siglo XVII y a lo largo del XVIII se presentaron proyectos para proteger la región, de la que España estaba consciente tenía, una gran importancia económica y estratégica. Finalmente por Real Orden en 1735 se concedió la autorización para tener tropas y formar compañías de milicias. Se le asignó al virrey de México la misión de fortificar la bahía, contratando para ello al ingeniero militar José Tantete. Diez años más tarde se termina la fortaleza de Nuestra Señora de los Ángeles de Jagua y en 1746, por idea del comandante de la misma, Juan Castilla Cabeza de Vaca, inicia la molienda el primer ingenio azucarero de la región en la hacienda Caonao.

Durante ese año aumentó la explotación maderera, e incluso algunas maderas finas fueron destinadas al nuevo Palacio Real de Madrid. La mayor parte de la producción se destinó a las construcciones navales en La Habana y al desarrollo azucarero en Trinidad, exportando en menor grado, hacia otras islas de las Antillas, en especial Jamaica.

A finales del siglo XVIII se comienza a cultivar café en la zona oriental del Escambray y años más tarde aparecen algunas plantaciones en las márgenes del Damují.

Fundación de Fernandina de Jagua

Antecedentes

Plano del puerto de Jagua confeccionado por Honorato de Bouyón en 1816

En 1798 los hermanos Lemaur, ingenieros militares que integraban la llamada Comisión Mopox, diseñan el primer plano de una ciudad y un astillero en la península de Majagua,[4] idea que Honorato de Bouyón, brigadier del Real Apostadero de Marina de La Habana, usa en 1816 en su propuesta de fomentar un astillero en la bahía de Jagua. Alejandro de Humboldt reconoce en sus estudios sobre Cuba entre 1800 y 1804, el pobre desarrollo económico de Jagua y el relativo aislamiento de su escasa población.

En 1817 se firmó el Tratado Internacional que establecía la supresión del tráfico trasatlántico de esclavos, uno de los motivos que llevó al Capital General José Cienfuegos Jovellanos y al Intendente Alejandro Ramírez a promover el cultivo de la tierra a pequeños propietarios blancos capaces de autoabastecer a Cuba. El Obispo de Espada, Juan José Díaz Espada y Fernández de Landa, respaldaba estas ideas, lo que unido a la conciencia del negativo tráfico negrero que había tomado Francisco de Arango y Parreño, propiciaron respaldo a una propuesta presentada por el teniente coronel de origen francés, Luis de Clouet.

Fundación de la ciudad

Referencias

Fuentes

  • «Síntesis histórica provincial de Cienfuegos». Editora Historia 2011. ISBN 978959704872-5