Anatoli Kárpov
Sin duda, Karpov ha sido una de los jugadores mas extraordinarios de la historia, especialmente por los muchos triunfos que ha logrado .Sin embargo su estilo no es especialmente brillante, sino que está basado en la sencillez y profundidad de sus ideas. Muchas veces se le ha comparado con Capablanca y realmente es una comparación acertada en muchos aspectos. Como el gran cubano, Karpov confía más en su talento que en la preparación y su punto fuerte siempre han sido las posiciones sencillas y sobre todo los finales, donde ha brillado a gran altura.
Biografía Anatoli Karpov,Rusia
Anatoli Evgenievich Karpov, nació en Zlatoust, una pequeña ciudad al sur de los Urales, el 23 de Mayo de 1951. Realmente fue un niño prodigio, puesto que aprendió a jugar a los cuatro años, y muy pronto comenzó a destacarse. A los once años ya tenía la categoría de candidato a maestro, algo muy importante en aquel momento en la URSS. Cuando tenía 15 años, en 1966, se convierte en el maestro más joven de la URSS, al vencer en Leningrado en un torneo de candidatos contra maestros y precisamente ese año se produce su debut internacional, que aunque no fue tan espectacular como el de Kasparov, no deja de ser curioso y sorprendente. La federación de la URSS lo envía a Trinec (Checoslovaquia) para tomar parte en un torneo juvenil, pero a su llegada se comprueba que ha habido un error, y el torneo no es para juveniles sino es un cerrado internacional. Ya no hay tiempo para rectificar y Karpov toma parte en la prueba.Tras este triunfo, el joven Karpov empieza a ser considerado una muy sólida promesa, y al año siguiente gana el Campeonato de Europa Juvenil, en Gronigen una prueba de tanto prestigio como el mismo campeonato mundial de la categoría. Un punto importante en su carrera tiene lugar en 1968, cuando enrolado en la Universidad de Moscú, donde cursa estudios de Ciencias Económicas, conoce al que luego sería su entrenador durante muchos años, el gran maestro Furman, que influiría decisivamente en su rápido ascenso. Un año más tarde, Karpov gana el derecho de representar a la URSS en el campeonato mundial, al vencer en un torneo clasificatorio por delante de Vaganian, en aquel entonces uno de los juveniles más fuertes, y toma parte en esa prueba, celebrada en Estocolmo, en Agosto de 1969. Karpov tiene suerte en la fase previa, donde está a punto de no clasificarse, tal vez por nervios, pero una vez en la final, vence de modo inobjetable, ganando las primeras siete partidas y proclamándose vencedor dos rondas antes del final. Hasta ese momento, sus actuaciones, aunque brillantes, estaban circunscritas al ámbito juvenil, pero en 1970, tras ganar el campeonato de la RSFSR imbatido y con 1,5 puntos de ventaja sobre el GM Krogius, toma parte en el torneo internacional de Caracas, donde consigue el título de gran maestro. En el año 1971, toma parte en el Campeonato de la URSS de 1971, una prueba que, como siempre, reúne una participación impresionante, incluyendo varios campeones mundiales. Karpov queda 4º, sin duda un buen resultado, El año siguiente, 1972, es crucial para el ajedrez soviético. Fischer arrebata a Spassky un título que, desde Alekhine, siempre había sido de los soviéticos. La Federación de la URSS se plantea como una prioridad máxima recuperar ese título, y Karpov es la figura más prometedora en ese momento, por lo cual recibirá todo el apoyo institucional continuación, Karpov toma parte en la Olimpiada, donde como primer reserva, logra 13 puntos de 15 posibles y vuelve a vencer en otro torneo, el de San Antonio (Texas) empatado con Petrosian y Portisch. Ya en ese momento se codea con las mayores figuras mundiales en un plano de igualdad. Su camino hacia el título mundial se inicia con el torneo ínter zonal de 1973, disputado en Leningrado, donde Karpov gana, aunque nuevamente empatado con Korchnoi. En 1974 pasa la primera fase del torneo de Candidatos al derrotar de modo claro a Polugaevsky por 5,5 a 2,5 sin perder partida, aunque el match fue mucho más disputado de lo que la puntuación indica. La final del torneo de Candidatos es precisamente contra Korchnoi. Por consiguiente, ese encuentro entre Karpov y Korchnoi, fue prácticamente un Campeonato del Mundo. Lo que ocurrió después es bien conocido. Fischer renunció a jugar el match por el Campeonato mundial, y en 1975 Karpov recibió el título mundial sin jugar. Sin embargo sus siguientes actuaciones justificaron su título, ya que ganó torneos uno tras otro en una impresionante racha que incluían los torneos de Ljubliana y Milán en 1975, Skopje, Ámsterdam, Montilla y el Campeonato de la URSS en 1976, Bad Lauterberg y Las Palmas en 1977. En todos esos torneos Karpov solo perdió dos partidas: ante Ander son (Milán 1975) y Geller (Cto URSS 1976). En 1978 Karpov tuvo que defender su título mundial por primera vez, y su rival fue de nuevo Korchnoi, aunque la situación había cambiado mucho, sobre todo debido a que éste último había desertado de la URSS y los problemas políticos salpicaron la lucha .A pesar de lo apurado de la victoria, Karpov siguió demostrando en los torneos que era el número 1. Este periodo, de 1976 a 1981, puede considerarse como el de su mejor momento pues ganó prácticamente todos los torneos en que tomó parte, y así en 1981, cuando tuvo que defender nuevamente su título, y una vez más contra Korchnoi, Karpov se mostró claramente superior y ganó el match, celebrado en Merano, por 6 a 2. En el siguiente ciclo irrumpió con gran fuerza la figura de Kasparov, que sería su gran rival en los siguientes diez años, y con el que disputaría nada menos. Esta fue la última partida del match, ya que el 15 de Febrero de 1985, tras más de cinco meses, fue cancelado por Campo manes, entonces presidente de la FIDE, sin ganador, al interpretar que ambos jugadores habían llegado al límite del agotamiento. En aquel momento se habían disputado 48 partidas y Karpov ganaba por 5 a 3, pero su resistencia estaba claramente mermada. La última victoria de Karpov había sido en la partida 27, mientras que Kasparov había ganado la 32 y las dos últimas, la 47 y 48 por lo que cabía suponer estaba físicamente más entero que su rival. En Septiembre de 1985 se disputó un nuevo match, también en Moscú, aunque esta vez con límite de 24 partidas y Kasparov logró el triunfo al ganar por 13 a 11. Esta vez Karpov no empezó tan bien, ya que perdió la primera partida, pero luego ganó la 4 y la 5, aunque un grave error en la 11 volvió a dejar las cosas igualadas.
Según las normas establecidas, el campeón derrotado tenía derecho a un match de revancha y éste tuvo lugar en 1986, jugándose la primera mitad en Londres y el resto en Leningrado. Karpov ganó de nuevo el derecho a disputar el título, al vencer en los matches de Candidatos, y de nuevo en Octubre de 1987 volvió a enfrentarse a Kasparov, esta vez en Sevilla. Este encuentro fue el más igualado de todos, y terminó con empate a 12 puntos. Durante el transcurso del match, ninguno de los contendientes logró aventajar a su rival por más de un punto. El momento crítico ocurrió en la partida 23, cuando con empate a 11 puntos, Karpov logró vencer. Todavía lograría Karpov una oportunidad más de disputar el campeonato mundial a Kasparov, aunque ahora tuvieron que pasar 3 años. En el Campeonato mundial de 1993 Karpov no fue el protagonista. Como es sabido, ese match fue el inicio del cisma de la FIDE. Pero eso no pareció importarle a Karpov, pues su nuevo título le espoleó para lograr nuevos triunfos y en 1994 consiguió el que probablemente fue su mayor éxito de toda su carrera, al ganar el fortísimo torneo de Linares En este torneo todas sus partidas son muy interesantes, aunque hay que destacar que dejó escapar a su mayor enemigo al omitir un sencillo golpe táctico que ganaba un peón. La FIDE continua en una racha de despropósitos y cambia de nuevo las reglas del campeonato mundial, decidiendo que se jugará cada año, en lugar de los dos previstos. Karpov, que considera que él ha ganado el título hasta el año 2000, renuncia a jugar en Las Vegas en 1999 y pierde el título de la misma forma en que lo ganó, sin jugar.