Hermanos Olivera

Plantilla:Personaje históricoHermanos Olivera. Durante la Guerra de los Diez Años, se desencadenaron sangrientas medidas de represión y castigo por parte del gobierno español. Uno de los hechos de mayor connotación en la región fue el asesinato de los hermanos Olivera.

Asesinato de los hermanos Olivera

El 7 de marzo de 1869 en Alacranes se produce una matanza que conmocionó al territorio, mucho más cuando las víctimas del cuerpo de voluntarios acusados de conspiración, eran miembros de una familia con significación económica y también política en la región. Tuvo como aliados más fieles y sangrientos al cuerpo de voluntarios

Los asesinados fueron los jóvenes: Urbano Olivera Olivera, Manuel Olivera La Flor, (hermanos), y su primo Quiterio Olivera Navarro de 27, 21, y 16 años de edad respectivamente. El hecho ocurrió en el traslado de estos presos por el cuerpo de voluntarios de Alacranes, desde La Unión hasta Las Villa de Alacranes, donde se encontraba la cárcel municipal.

Les fue aplicada la “Ley de fuga” cuando se revelaron en el punto conocido como Callejón de Fumero contra (los Voluntarios) sus captores, a quienes mandaba el sargento Antonio Márquez.

Urbano Olivera

Urbano Olivera, hijo del primer matrimonio del hacendado Manuel María Olivera, dueño del ingenio “Buen Amigo” en el Cuartón de Zapata, jurisdicción de Alacranes, había recibido junto a su menor hermano Manuel las enseñanzas del colegio “La Empresa”.

Dirigido por el insigne educador y patriota matancero Antonio Guiteras Font. Y al igual que muchos de sus condiscípulos eran consecuentes con los ideales de libertad y justicia que se proclamaban en el plantel yumurino, esto los condujo a sumarse a la lucha por la independencia de Cuba.

Urbano había sido electo regidor del ayuntamiento de Alacranes, y según consta en las actas del Cabildo era notable su empeño por el avance de la municipalidad. Conocido por sus ideas liberales, fue acusado de poseer en su finca rifles y una bandera como la de Narciso López, hecho que provocó la histeria de los voluntarios y por el que fue apresado junto a sus parientes corriendo la suerte ya descrita.

Dejó cuatro huérfanos y su esposa embarazada; sus dos hijos varones, Urbano y Manuel, fueron oficiales del Ejército Libertador en la contienda del 1995.

Fuente

Museo "Juan Gualberto Gómez"