José Ramón Reyes Moro
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José Ramón Reyes Moro. Mártir de Playa Girón, hijo de Campo Florido. Era un hombre serio, muy amante de su hogar, que dio la vida por la Revolución.
Síntesis biográfica
Nació en el poblado de Minas, Guanabacoa, el 29 de mayo de 1919 y se trasladó con su familia para Campo Florido. Curso sus estudios primarios en una escuelita de la localidad, teniendo que abandonarlos en 4to Grado.
Trayectoria revolucionaria
Era obrero, conductor de la ruta 62 de Guanabo. En noviembre de 1960 ingresó en Las Milicias Nacionales Revolucionarias. Pertenecía al Batallón 123 y, como el resto de sus compañeros pasó trincheras, recibió curso de capacitación y entrenamiento militar en la Escuela de Responsables de Milicias, de Matanzas, y ayudó en la limpia de gusanos en el Escambray.
Se incorpora a la limpia del Escambray y el 9 de abril de 1961, José Ramón regresó muy feliz de encontrarse junto a su esposa Berta Fernández y a sus hijos Ramoncito y María Teresa. Le contaba a su familia detalles interesantes de su estancia en las lomas villareñas, sobre cómo vivían los campesinos y con cuánto agradecimiento trataban a los milicianos, pues nadie antes se había ocupado de ellos.
Muerte
El día 16 tenía señalado el turno para ir al médico para examinarlo. El teniente del batallón le dio permiso para que atendiera su enfermedad que en los últimos tiempos le había molestado mucho. Pero él dijo que no, que este era el momento en que la Patria necesitaba de todos y que iría a defenderla junto con sus compañeros.
El día 16 de abril, su compañía tenía guardia y no regresó a su casa debido a esto. Sin embargo mandó a decirle a su esposa que no se preocupara que él iría a la visita del médico, pero el día 17 por la mañana no fue. Su esposa comenzó a inquietarse y fue a Regla a la Casa del batallón 123, para ver que sucedía. Ella le dijo que si estaba enfermo no tenía que ir y el con gran firmeza le dijo "No, que ahora más que nunca había que echar para adelante" y subió para el ómnibus.
Así parte para Playa Girón el 17 de Abril de 1961 y es herido al día siguiente. Según sus compañeros una bomba de napalm cayó cerca de dónde se encontraba alcanzándolo en un costado, así y todo él no quiso retirarse del campo de batalla, pero su jefe lo mandó enseguida para el Hospital.Lo llevaron al hospital de Colón y luego lo trasladaron al de Matanzas.
Murió al día siguiente, día 19 de abril en la tarde. Antes de morir estas fueron las palabras que le dijo a un compañero: Mi hijo es de los jóvenes rebeldes y yo, para la Revolución estoy dispuesto a darlo todo, aún la vida. De todas maneras hemos de morir, pero muriendo por la patria no se muere.
