La vendedora de alcatraces
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La vendedora de alcatraces o Vendedora de alcatraces como también se le conoce es una obra de Diego Rivera, una pintura al fresco pintada en el año 1938. La pintura muestra aparece como una mujer indígena de México con características distintas como el pelo negro y la piel moreno. Ella está cargando un cesto de flores que se llaman alcatraces.
Historia
Se le conoce como el muralista mexicano por excelencia. Sus obras son muy coloridas y muestran la realidad de las personas del pueblo y también sus ideas políticas y su defensa de los derechos civiles. Podemos ubicar su estilo entre el realismo social y el preimpresionismo.
Rivera pintó las realidades de su país pero fue un artista internacional y muy influyente en México. Durante toda su vida viajo a países como Italia, Francia y España para perfeccionar su técnica pictórica. Se convirtió en un ejemplo para muchos otros pintores de su época. Murió en al año 1957 dejando obras importantes.
La obra que tiene ante usted es una pintura simple que forma parte de un conjunto de imágenes realizadas por Rivera donde aparecen mujeres y hombres con flores, especialmente alcatraces. Esa es una imagen común en México, especialmente de las personas indígenas de los pueblos.
==Descripción del Cuadro==
La Vendedora de alcatraces es una pieza con bastante color, lo que más llama la atención de la obra es la mujer indígena que ocupa el espacio central.
En esta pintura más de la mitad del lienzo lo ocupan los alcatraces o calas que están distribuidas por toda la obra. Los colores predominantes son el blanco y los tonos verdosos, amarillos y rosados. En el centro de la imagen se encuentra una mujer indígena que mira al frente y que se diferencia del resto del cuadro porque tiene un color general mucho más oscuro evidenciando así su origen indígena. Esto también queda patente con los rasgos de la cara y cabello y su piel morena.
En esta pintura, hay una mujer que aparece como una mujer indígena de México con características distintas como el pelo negro y la piel moreno. Ella está cargando un cesto de flores que se llaman alcatraces. Es muy fácil para identificarla como una campesina con sus ropas simples y su trabajo. También, en la pintura, podemos ver manos, piernas y la parte superior de la cabeza de una persona detrás de ella que está ayudándola para cagar el cesto. Los colores que se han usando en la pintura son oscuros por eso la pintura parece más fuerte y intensiva. Aunque el color de la piel de la otra persona parece igual de la mujer, va no lo dominan el significado principal de la pintura sobre la situación política y social de México.
Está acción de la persona ayudándole es la razón principal porque la pintura parece optimista. Es muy raro ver a otra persona ayudar a una mujer indígena porque ha habido discriminación en contra de las mujeres y los indígenas. Podemos interpretar que está intentando presentar una representación de la clase trabajadora sufrida de México y los retos de los trabajadores durante ese tiempo en una manera positiva. También, se dice que los alcatraces significan buena suerte. Consiguiente, para mí, la pintura parece muy positiva.
Creo que la escena representa la vida real en lugar de una imaginación. Hay personas haciendo trabajo cotidiano que da una experiencia real de la vida de esta sociedad. Por consiguiente, la situación en la pintura es verosímil.
Pienso que la escena es una percepción y visión del artista. La representa la ideología socialista que el artista quiere comunicar. La mujer está cargando un cesto de flores en lugar de otras cosas más pesadas. Es posible que sea porque el artista es un socialista y quiere la situación mejor para los trabajadores. La persona quien está ayudando también, probablemente, es resultado de este. Él artista ha mostrado con éxito como los trabajadores trabajan y ha añada su opinión personal de apoyo lo cual hace que la carga sean menos pesada. Entonces, a mi me parece que la pintura es una combinación de la realidad y el pensamiento optimista.
Datos del autor
Nació el 8 de diciembre de 1886 en la ciudad de Guanajuato. Al año y medio de haber nacido murió su hermano gemelo Carlos María, mientras Diego, que padecía raquitismo y tenía una constitución muy débil, se mantuvo con vida. Diego fue registrado bajo el nombre de Diego María Rivera, y fue bautizado como Diego María de la Concepción Juan Nepomuceno Estanislao de Rivera y Barrientos Acosta y Rodríguez.
En 1909, se trasladó a París, donde conoció a Angelina Petrovna Belova, más conocida como Angelina Beloff, pintora rusa con quien inició una relación amorosa que duró diez años.
A partir de entonces y hasta mediados de 1916, alternó su residencia entre México, Ecuador, Bolivia, Argentina, España y Francia, país este último en el cual tuvo los primeros contactos con los artistas de Montparnasse. Tuvo acercamientos con Alfonso Reyes Ochoa, Pablo Picasso y Ramón María del Valle-Inclán y, en general, con aquellos que participaron en las nuevas corrientes de Europa, como el cubismo, en el que también Diego se vio envuelto.
Ese mismo año, en París, nació su primer hijo, llamado Diego, fruto de su unión con Angelina Beloff que, sin embargo, murió al año siguiente. En 1917, influido por las pinturas de Paul Cézanne, se introdujo en el postimpresionismo, y logró captar la atención con sus acabados y vivos colores, a diferencia de otros muralistas mexicanos que aún no cobraban popularidad.
En enero de 1922, comenzó a pintar su primer mural, intitulado La creación, en el interior del Anfiteatro Simón Bolívar de la Escuela Nacional Preparatoria de la entonces llamada Universidad Nacional de México. Lo asistieron Carlos Mérida, Jean Charlot, Amado de la Cueva y Xavier Guerrero. El tema central es la formación de la raza mexicana. La figura central es un hombre que nace del árbol de la vida. Su obra pictórica comenzaría a convertirse en un factor considerable y de influencia para el movimiento muralista mexicano y latinoamericano.
En diciembre de ese mismo año, se casó con Guadalupe Marín, también conocida como "La Gata Marín", a quien conoció a través de Julio Torri mientras elaboraba el mural.
Entre agosto de 1929 y mayo de 1930, fue director de la Escuela Central de Artes Plásticas. Salió de ahí debido a un movimiento estudiantil organizado en su contra.
Rivera, poco después de ese incidente, regresó en 1934 a México, donde pintó el mismo mural, El hombre en el cruce de caminos, en el tercer piso del Palacio de Bellas Artes.
Falleció el 24 de noviembre de 1957, en San Ángel, al sur de la Ciudad de México, en su casa estudio, actualmente conocida como Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo, y sus restos se colocaron en la Rotonda de las Personas Ilustres.
