Lesiones traumáticas del pene
Lesiones traumáticas del pene: Lesiones o golpes localizados, los cuales pueden ocasionar equimosis o hematomas.
Descripción
El pene puede ser lesionado por un objeto penetrante ( por ejemplo, un cuchillo, una bala) o por un golpe, cuando el órgano este erecto. La colocación de una banda de constricción alrededor del cuerpo del pene ( por ejemplo, un arillo, un cordón, una liga de hule) puede también causar lesión por isquemia, que puede conducir a la gangrena.
La piel puede ser lacerada o aun arrancada si es cogida en una máquina. Uno o más de los cuerpos cavernosos se puede romper, en cuyo caso puede ocurrir sangrado profuso por debajo de la fascia de colles, que se puede extender al escroto, al perineo y hacia arriba a la porción inferior del abdomen. La presión producida por la hinchazón puede conducir a la gangrena. No es raro que exista una lesión uretral asociada.
Habitualmente hay antecedentes de lesión traumática. La piel puede estar lacerada o arrancada y puede ser evidente una gran hinchazón por el sangrado debido a laceración o contusión cesará espontáneamente. Los grandes hematomas pueden requerir ser evacuados.
Los cuerpos que constriñen se deben, por supuesto, quitar. Deberán buscarse lesiones uretrales inmediatas o tardías. Las pérdidas extensas de piel requerirán la colocación de injertos.
Formas de tratamiento
En raras ocasiones una lesión local intensa puede dislocarse hasta el testículo dentro del abdomen, del pene o del perineo o de las regiones vecinas. el reemplazamiento de este órgano requiere intervención quirúrgica. Heridas leves pueden producir trombosis de los vasos sanguíneos.
Tipos de lesiones
Las lesiones del pene pueden ser benignas o malignas, pero también pueden ser provocadas por infección. Cuando exista la menor duda se deberá tomar una muestra para biopsia.
Fuentes
UROLOGÍA GENERAL: Dr. Donald R. Smith