Néstor P. Miliáns Fernández

Néstor P. Miliáns Fernández, revolucionario Artemiseño,cubano,  desde la Lucha Clandestina contra el régimen de Batista y Miliciano desde la creación de las Milicias Nacionales Revolucionarias. Plantilla:Personaje histórico

Primeros años de vida.

Néstor P. Miliáns Fernández, nació el26 de febrero de 1935, en la finca “Flores” en el Dagame, barrio de las Cañas, termino municipal deArtemisa, hijo de Memesio e Isabel, campesinos que se dedicaban a laborar la tierra. Cuando Néstor tenía 7 años, se mudaron para el poblado de Las Cañas, empezando a asistir a la escuela publica de este poblado, donde alcanzo los primeros grados. Mas tarde fue matriculado en una escuela particular, donde cursó hasta el 5to grado.

Labor revolucionaria.

Cuando solo contaba con 16 años comenzó a trabajar, manejando un camión que se pudo conseguir, Néstor tenía muy buenas relaciones humanas, siendo muy querido por todos, su trato afable y su honestidad lo caracterizaban. No podía ver cometer ninguna injusticia, sin que su ánimo no se enardeciera ante la misma. Pronto son conocidas sus ideas de repulsa al régimen batistiano, cuando ocurre el cuartelazo traidor del 10 de Marzo, teniendo entonces el 17 años de edad,. Néstor comienza a conspirar, se organiza y llega a participar en varios sabotajes, como fue la quema de cañas en la colonia del paniaguado General Robaina. En 1956 cae preso, siendo brutalmente torturado en el cuartel de Guanajay. En esa ocasión cumplió prisión por espacio de 3 meses en la cárcel de Pinar del Río. Al regresar a las Cañas, es obligado por las autoridades a salir del poblado y se ve en la necesidad de esconderse en la Playa Guanimar, pero poco tiempo después cae nuevamente en manos de los sicarios del Comandante Pantoja, quien lo envía para la Habana, siendo juzgado por el Tribunal de Urgencias, el cual lo condena a cumplir prisión en el Castillo del Príncipe, donde estuvo recluido hasta el triunfo de la Revolución.

Después del triunfo de la Revolución.

Al triunfo de la Revolución, Néstor permaneció por espacio de unos meses en la Habana, en las actividades propias de esos primeros tiempos del triunfo revolucionario. Al regresar a su poblado natal “Las Cañas”, comenzó a trabajar en la fabrica de cemento, donde fue un obrero de vanguardia y se veía en él, una verdadera pasión por la Revolución, a la cual se entrego por entero. Él supo comprender, desde esos tempranos tiempos, la grandeza del proceso revolucionario, por lo que era querido y respetado por todos sus compañeros, ocupando siempre la vanguardia en la defensa de la Revolución. En el año 1961, un grupo de bandidos contrarrevolucionarios, dirigidos por Israel García Díaz ( Alias Tití ), merodeaban por la zona del poblado de las Cañas, donde este había vivido por mucho tiempo y donde tenía algunas relaciones este criminal cabecilla, lo que le facilito, en varias ocasiones a él y a su banda escapar, cuando estaban a punto de ser apresados por nuestras tropas milicianas. Este grupo de bandidos contrarrevolucionarios cometió infinidad de crímenes, atropellos y abusos con los pacíficos campesinos de la zona. Néstor P. Miliáns Fernández, revolucionario desde la Lucha Clandestina contra el régimen de Batista y Miliciano desde la creación de las Milicias Nacionales Revolucionarias, se convirtió en él más tenaz perseguidor de Tití, al cual conocía bien, por haber sostenido contacto con él, en los tiempos de la lucha contra la tiranía. Ante la traición de Tití, se había jurado, no estar satisfecho hasta que este no cayera en manos de la justicia revolucionaria. Néstor, que había comenzado a trabajar en 1959 como Guardia Jurado de la fabrica de cemento “Mártires de Artemisa”, y a pesar de que le dedicaba entre 14 y 16 horas diarias a las diferentes tareas de la fabrica, supo buscar el tiempo necesario para tratar de localizar los posibles escondites y paraderos del cabecilla contrarrevolucionario, formando parte de todos los cercos que a este, les fueron tendidos. Él había recibido un escrito del traidor, en el cual le decía que se preparara ya que lo iba a matar. Esta situación lo impulsaba aun más en su afán de captura.

Muerte.

El 23 de Agosto de 1961, estando Néstor, como siempre, con el continuo trabajo de la fábrica de cemento, invito a su compañero Reynaldo Aguiar a dar un recorrido en el jeep, dirigiéndose hacia el poblado de las Cañas. En la entrada de este poblado, en la carretera que lo une con Alquízar, Tití y un grupo de 7 bandidos le habían preparado una emboscada, haciéndole fuego concentrado sobre el vehículo, resultando mortalmente herido Néstor, quien llega ya cadáver al policlínico a las 10 de la noche de ese día y herido de gravedad su compañero Reynaldo Aguiar. Nunca en nuestra revolución, el crimen ha quedado impune y unos meses mas tarde fueron capturados los miembros de esta banda contrarrevolucionaria. El cabecilla Tití, fue juzgado y sancionado por nuestros tribunales revolucionarios, pagando por sus crímenes y atropellos.

Fuentes.

• Biblioteca Municipal de Artemisa.