Teatro Martí : Prodigiosa permanencia

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Teatro Martí : Prodigiosa permanencia
Información sobre la plantilla
Teatro marti prodigiosa permanencia.jpg
Autor(a)(es)(as)Nancy González Arzola
Editorial:Ediciones Unión
Diseño de cubierta:Rafa Celda y Hoa Melgar
Diseño:Beatriz Pérez Rodríguez
EdiciónVivian Lechuga
ISBN978-959-209-993-7
PaísBandera de Cuba Cuba
Notas
Tratamiento digital de imágenes: Sigfredo Ariel

Teatro Martí : Prodigiosa permanencia. Libro de Nancy González Arzola publicado por Ediciones Unión en 2010.

Contenido

El Martí devino teatro permanente, a pesar de la precariedad implícita en el concepto de teatro provisional de verano. Fue uno de los lugares de encuentro que integran el grupo más interesante de la arquitectura teatral del siglo XIX español, que funcionaban solamente durante el verano ya que el sistema constructivo, así como el tipo de materiales empleados, permitían desarmar y armar cada vez en sitios diferentes de la ciuclad, dejando sus fachadas exteriores en pie, aprovechables luego en otras construcciones. Pero los cambios de administración (colonia, intervención norteamericana, república y revolución) y quizás el eterno verano, cambiaron el destino del teatro Martí: durante muchas décadas, sus espacios acogieron una propuesta diversa e ininterrumpida de actividades. La más importante fue, sin dudas, la celebración de la Primera Asamblea Constituyente de la República. El Martí acumuló méritos artísticos e históricos que le hicieron merecedor del título de Monumento Nacional durante la década del 30 del siglo XX.

Pero factores como la explotación indiscriminada a que estuvo sometido, sin recibir el mantenimiento constructivo adecuado, en obediencia a la primera intervención estatal ocurrida en plena colonia (desde 1887 hasta 1898) a sólo tres años de su inauguración (1884); sucesivos cambios de dueño y segunda intervención estatal durante la república (1935), resultado del sistema de arrendamientos, lo llevan al estado físico crítico. La intervención estatal del 1965 determina obras de remodelación y mantenimiento, y lo reinaugura con un nuevo concepto de la programación artística y administrativa que funciona hasta 1973, en que su deplorable estado físico obliga a cerrar de nuevo, hasta hoy, con el intento de restaurarlo definitivamente. González Arzola realizó una exhaustiva investigación del inmueble que parte de la consulta de documentación original, hallazgos arqueológicos en el edificio y juicios técnicos derivados del estudio de la teoría teatral, lo cual siguió enriqueciendo su historia con interesantes informaciones sobre artistas, público, sucesos, dueños, crónicas de Julián del Casal, entre otros autores y artistas destacados. Esos apuntes han dado pie a la escritura de este interesante, ameno e imprescindible título para la historia teatral cubana.

Datos del autor

Nancy González Arzola (Guanajay, 1944). Escritora, arquitecta, profesora y, diseñadora de vestuario, escenografía y dirección de arte cinematográficos. Escribió e ilustró el libro de cuentos Las Carolinas blancas, publicado por Ediciones Vigía (2000). Participó en la edición del libro de cuentos El silencio de las maravillas y ha colaborado en diversas revistas culturales. Ha trabajado en los largometrajes: Maité, Reina y Rey, Guantanamera, Las profecías de Amanda, Lista de espera y El cuerno de la abundancia.

Índice

  • El Teatro Martí, como el mar, siempre recomenzando, por Reynaldo González /11
  • De la autora /15
  • Introducción /21
  • El Irijoa / 28
  • El dueño /35
  • El codueño /37
  • Arquitectura y escenografía /39
  • El Irijoa y la prensa colonial /46
  • El vecino Centro Gallego /50
  • Crónicas de teatro y ambientes de la ciudad /53
  • El dueño reclama a ultramar /71
  • Deterioro físico y moral /76
  • La muerte del dueño /78
  • La Asamblea Constituyente y la respuesta popular /101
  • Noches alegres y tristes en el Martí /106
  • A manera de epílogo. La reapertura del Martí, por Enrique Núñez Rodríguez /145
  • Bibliografía y fuentes /147

Fuente