Grojovski G-39

Grojovski G-39 “Cucaracha”
Información sobre la plantilla
Grojovski G-39.jpg
La única foto conocida del Grojovski G-39 “Cucaracha”.
TipoAvión multifuncional
País de origenBandera de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas Unión Soviética
Historia de producción
FabricanteTalleres del TsAGI
Diseñado porPavel Ignatievich Grojovski
Producción1935

Grojovski G-39 “Cucaracha” (en ruso: Гроховский Г-39 “Кукарача”) – Caza interceptor concebido para destruir al enemigo mediante la técnica de embrestidas. Se construyó un prototipo con muchas limitaciones, fundamentalmente debido a la carencia de financiamiento, que no logró alzar el vuelo.


Historia

Los trabajos prácticos en el desarrollo de un avión “sin cola” comenzaron en el Oskonbyuró (Buró de Construcciones Especiales de las VVS RKKA) en Moscú a comienzos de 1933. Ya con anterioridad el colectivo dirigido por Grojovski había intentado incursionar en este tipo de aparatos, pero la gran cantidad de “lagunas” no permitia con seriedad entregarse al desarrollo de una tarea tan compleja. En particular se complejizaban los temas vinculados al logro de la estabilidad necesaria en el vuelo.

Ya para esa época volaban aviones sin cola creados por Cheranovski en la URSS y Lippisch en Alemania, pero en ambos casos se trataba de pequeños modelos experimentales.

Grojovski comprendía también con claridad la necesidad de comenzar por modelos experimentales. Sólo el desarrollo escalonado permitiría obtener la experiencia necesaria, pero este principio era ajeno a la forma de trabajo del buró. Desde su creación todos los trabajos concebidos por el colectivo bajo la dirección de Grojovski tuvieron un carácter práctico, pensado para que una vez concluidas las pruebas, pudiesen entrar directamente en servicio.

En aquellos años se comenzó a prestar atención a un nuevo tipo de combate aéreo: el derribo del avión enemigo por embertida. En Rusia este método fue popularizado por el piloto Nesterov y recibió el nombre de “Tarán”. Generalmente el “Tarán” se realizaba ubicando el avión propio a las 6 en punto del enemigo y cortando sus planos de cola o extremos alares con la hélice. En el mejor de los casos el avión atacante tomaba tierra con la hélice dañada, en otro muchos terminaba destruido junto a su oponente. El método del “Tarán” fue promovido durante la primera etapa de la Gran Guerra Patria, cuando la aviación alemana tenía superiorodad aérea. Muchos pilotos soviéticos embistieron contra el enemigo sus aviones en aquellos desiguales combates.

Grojovski decidió estudiar la posibilidad de construir un avión especializado en el derribo por embestida. Se trataba de diseñar un modelo capaz de infligir gran daño al avión enemigo sin grandes afectaciones propias. El resultado de este trabajo fue un avión sin análogos para la época que recibió la denominación G-39 del instituto y el apodo “Cucaracha”.

Descripción

Como base del pensamiento de Grojovski se diseñó un ejemplar sin planos de cola. A lo largo de todo el borde de ataque del ala se instaló un “cuchillo”, una fina y afilada lámina de acero de alta resistencia. En la proa se previó la instalación de una larga barra de borde afilados, que debía proteger un cañón neumático. Entre esta barra y las consolas alares se instalaba un fino cable de acero. Se pensaba que al momento del impacto ya fuese con el cable o con el filo del borde de ataque, resultase destruida la cola del enemigo.

La punta afilada de la barra de proa debía servir para destruir globos aerostáticos y dirigibles.

De manera general el G-39 repetía los esquemas de alas voladoreas de Cheranovski. El corto fuselaje en forma de habano presentaba a proa una cabina cerrada tipo burbuja. Delante del parabrisas se ubicaba una plancha blindada.

El ala presentaba un aflechamiento del borde de ataque de 38º y terminaba en unas superficies verticales insertadas en el borde de fuga. Los extremos alares inclinados hacia abajo, permitían lograr un colchón de aire, que ayudaba en las tareas de despegue y aterrizaje.

En la parte posterior del fuselaje, dentro de una hendidura semicircular en el ala, se ubicaba la hélice en configuración impulsora. El motor se instaló en la parte posterior del fuselaje mediante un sistema especial que le permitía rotar el motor de su posición horizontal a la vertical. De esta forma la hélice de paso variable se convertía de impulsora en tractora y generaba la necesaria fuerza ascensional para permitir el despegue vertical.

El tren de aterrizaje del G-39 presentaba cuatro ruedas. Las unidades principales presentaban unos largos aterrizadores cubiertos por un delgado carenado y se fijaban a la raíz alar, en el punto de unión con el fuselaje. Las otras dos ruedecillas se ubicaban en la partre inferior de las superficies verticales de extremo alar.

Desde la etapa de dibujo del nuevo modelo y en virtud de su apariencia, los diseñadores lo nombraron “Cucaracha”. Es interesante que no fue nombrado “Tarakán” que es el sustantivo en ruso para designar al insecto cucaracha, sino con el término en español “Cucaracha”, presente en el famoso corrido mejicano popularizado en inglés por Louis Armstrong en 1935.

Desarrollo del prototipo

Entre las novedades incorporadas en el desarrollo del modelo se encontró la introducción de capacidad de despegue vertical. La idea de tal osibilidad había sido presentada por Grojovski en su trabajo “Instalación de un grupo motriz en la zona media del fuselaje”. Con esta decisión la tarea técnica consistía en desarrollar un avión de embestida sin cola con capacidad de despegue y aterrizaje vertical. La concepción general del nuevo avión fue patentada por Grojovski el 25 de febrero de 1935.

A pesar de su novedad tecnológica, el nuevo modelo se basaba en un conjunto de descubrimientos documentados, cálculos, patentes e innovaciones. Por otro lado existía la confianza del colectivo en la instuición de su jefe. Aún sin la preparación técnica necesaria e incapaz de explicar cómo y por qué, Grojovski siempre terminaba teniendo la razón, incluso en aquellos casos en que la “ciencia” planteaba que sus ideas eran teóricamente incorrectas. Por esta razón la nueva tarea no generó dudas en cuanto a su éxito, ni en los trabajadores del buró, ni en los especialista invitados y pronto el nuevo modelo G-39 comenzó a tomar forma el los pliegos de dibujo.

Se presentó la tarea con sus especificaciones, pero el colectivo del buró carecía de conocimientos y experiencia para su desarrollo. Con su característico desprendimiento Grojovski, conciente de sus debilidades, decidió recurrir a ayuda externa para desarrollar la tarea, invitando a un grupo de reconocidos especialistas a trabajar en el nuevo proyecto. Para la concepción del proyecto fueron contratados V. F. Boljovítinov, S. G. Kozlov y A. Ye Kamínov.

El desarrollo y construcción del “Cucaracha” se realizó en condiciones muy difíciles. Los especialistas invitados podían dedicar al diseño sólo su tiempo libre, fundamentalmente en las noches. El modelo no se encontraba inscrito en ningún plan de desarrollo, por lo que no tenía asignación de recursos materiales.

La construcción se desarrolló en los talleres del TsAGI. Obtener un motor nuevo fue imposible, por lo que tuvieron que contentarse con el poco potente M-11 de 100 hp, retirado de otro avión. Para construir la célula tuvieron que utilizar los materiales sobrantes de otras producciones. Constantemente se hizo sentir la escases de personal calificado. La falta de equipamiento especializado en los talleres del TsAGI obligó a simplificar al proyecto en su máxima expresión, para hacer posible la producción de los elementos con las posibilidades del taller.

La cabina cerrada fue sustituida por una abierta con parabrisas. La hendidura semicircular en el ala, en la posición de la hélice fue sustituida por una rectangular. Como resultado de esta modificación el ala triangular terminó convirtiéndose en un ala en flecha y su borde de fuga en un gran estabilizador horizontal de gran área y envergadura.

El prototipo careció del equipamiento de embestida, ni los cuchillos alares, ni la instalación del sistema de la nariz con cañón neumático podían ser instalados en las condiciones del taller.

Otra de las características que parece desaparecer en este prototipo fue la posibilidad de despegue vertical. Al menos no se recogen evidencias que demuestren que se llegó a probar alguna vez por parte de los participantes en las pruebas.

Los talleres del TsAGI eran comúnmente visitados por Valeri Pavlovich Chkalov. A él se le había encomendado la tarea de probar el avión y por esta razón consideraba obligatorio conocer el aparato en la etapa de ensamblaje. Bajo sus consejos se conformó la cabina y se colocaron los equipos e instrumentos en la posición correcta.

Desarrollo de las pruebas

A fines de la primavera de 1935 la “Cucaracha” abandonó los talleres para el desarrollo de las pruebas. Al verlo sobre la pista Chkalov comentó:

- “Ah! En realidad parece una cucaracha. Lo probaré.”

Sin embargo, volar la “Cucaracha” resultó imposible. El G-39 corría por la pista aumentando su velocidad pero en ningún caso hizo por alzarse sobre la pista. Chkalov, sin darse por vencido, hizo correr el avión de un lado a otro de la pista sin lograr hacerlo volar hasta que se terminó el combustible. Ni su experiencia ni su persistencia lograron el ansiado resultado.

Irritado y dirigiéndose a los diseñadores del avión les espetó:

- “¡Una verdadera Cucaracha y las Cucarachas no vuelan! ¡En algún lado calcualaron mal o sobrepensaron, distinguidos!"

El fracaso del G-39 tiene su explicación en una serie de causas:

  • La escasa potencia motriz;
  • La posición de la hélice en relación al fuselaje, el ala y los carenados de los aterrizadores principales contribuían a disminuir el efecto de la hélice;
  • La baja calidad de la construcción del avión;

Con todas estas problemáticas en contra, la “Cucaracha” fue incapaz de alzar el vuelo.

Para Grojovski esto fue un terrible golpe. De haberse al menos elevado un poco, sus creadores hubiesen podido insertar al G-39 en el plan de desarrollo experimental y comenzar de nuevo, pero esta vez con mejores condiciones y mayor experiencia, utilizando además lo excelentes talleres de la Fábrica No.47 de Leningrado .

Pero Grojovski no cejó en su empeño y no sin ayuda de algunas personas importantes en las VVS, logró que el proyecto del “Cucaracha” fuese incuido en el plan oficial del Instituto Experimental del NKTP. Para esto tuvo que abandonar la idea del “Tarán” y del despegue vertical. Los trabajos en un modelo tan “progresista” no hubiesen recibido el apoyo.

El contrato con los especialistas invitados esta vez no fue renovado. Grojovski puso al frente del desarrollo a sus sustituto V. D. Urlapov teniendo en cuenta que ya el proyecto existía y se había acumulado la experiencia para asumir el trabajo. Tres meses después en la prensa soviética aparecería:

“El instituto experimental del Narkomtyazhprom en Leningrado comienza el desarrollo de un modelo de ala voladora con motor de 100 hp. Este avión puede transportar cuatro pasajeros y volar a una velocidad de 220 km/h. En un período de dos meses y medio el avión deberá encontrase listo para participar en la carrera pansoviética organizada por el periódico “Pravda”, el Comité Central del Komsomol y el Consejo de la OSOVIAJIM.”

A partir de este momento el desarrollo del G-39 desapareció sin dejar rastro alguno. Toda la información sobre su desarrollo ha desaparecido. Tampoco se logró claridad sobre su destino en los contactos con los trabajadores del instituto durante esa época. Es extraño como se “desapareció” un avión incluido en un plan estatal (al que se prestaba tanta atención en la URSS en aquellos años) e inscrito en una competencia nacional. Posiblemente todo esto esté vinculado al proceso que siguió luego de la disolución del instituto y la represión cinculada al arresto de M. N. Tujachevaski.

Especificaciones Técnicas

  • Tipo: G-39
  • Función: Caza experimental
  • Año: 1935
  • Planta motriz: 1 motor de pistón М-11 de 100 hp
  • Acomodación: 1
  • DIMENSIONES
    • Envergadura: 6.80 m
    • Longitud: 8.84 m
    • Altura: 3.16 m
    • Superficie alar: 14.20 m²
  • PESOS Y CARGAS
    • Peso vacío: 520 kg
    • Peso máximo de despegue: 698 kg
  • PRESTACIONEs
    • Velocidad máxima: 195 km/h
    • Alcance: 600 km
    • Techo práctico: 4000 m
    • Autonomía: 3.0 h


Fuentes