Mirlo shama

Mirlo Shama
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Clasificación Científica
Reino:Animalia
Filo:Chordata
Clase:Aves
Orden:Paseriformes
Familia:Muscicapidae
Subfamilia:Turdinae

Mirlo Shama (Copsychus malabaricus). Es una especie de ave de la familia Muscicapidae, que se distribuye de forma natural por la India y Australia.

Descripción

El macho tiene un color negro azulado en la parte superior con un reflejo metálico; la parte inferior del cuerpo es de color pardo castaño y el obispillo es blanco, tiene una larga cola de 95 a 110 mm, la hembra tiene la parte superior del cuerpo de un color pardo oliváceo y la parte inferior de un color pardo rojizo, es bastante arisca, los machos tienden a ser mayores que las hembras y pesan entre 80 y 125 gramos, esta masa varía en función del sexo y también de las temporadas y dificultades fisiológicas que les están vinculadas.

Hábitat

Se extiende desde la India hacia Indochina, el archipiélago de las Molucas, las Islas de Java y Borneo, donde vive en los bosques densos y las selvas vírgenes; sin embargo, los jardines les proporcionan el mejor lugar de nidificación, se puede también encontrar en setos, zonas arbustivas, en linde de bosque, en parques o cultivos, o incluso en zona urbana. Si solo se tiene un macho, hay que proporcionarle una jaula espaciosa debido a la longitud de sus plumas caudales, a una pareja le vendrá bien una pajarera amplia de interior o de jardín. No se pueden mezclar con estríldidos pequeños, porque podrían matarlos.

Alimentación

Se alimentan con una gran variedad de especies de insectos, de otros pequeños animales, consumen también frutas, y a veces semillas. Los mirlos buscan principalmente sus presas en tierra. Son importantes consumidores de lombrices que cogen excavando la humus, saben hacer salir las presas de sus galerías golpeando ligeramente el suelo antes de extirparlos, también aprovechan las hojas en descomposición, agitan las hojas de manera ruidosa en busca de toda la clase de invertebrados, insectos tan en estado de larvas que de imagos, de las arañas, de los myriapodes, de las babosas, de los pequeños caracoles. Excepcionalmente, se alimentan de pequeños vertebrados como renacuajos, de pequeños anfibios adultos o lagartos, además si son cazadores al suelo, los mirlos no dudan en explorar los árboles y los arbustos para recoger a los insectos que se coloca, en particular las orugas, y también de vez en cuando gusanos de la harina. Las presas animales son especialmente importantes en la alimentación del mirlo durante la temporada de nidificación, mientras que los frutos caídos o las bahías toman gran importancia en otoño y en invierno.

Costumbres

Un mirlo shamas masculino de un año de la subespecie Turdus merula merula ya puede comenzar a cantar dados el mes de enero por bonito tiempo, con el fin de establecer un territorio, va seguido a finales de marzo por el varón adulto. El borde del varón es un gorjeo no repetitivo y mélodieux, grave flauta y bastante, a las estrofas más o menos largas pero a menudo terminadas por sonidos menos puros y a veces chirriando un poco. Este borde se realiza desde la cumbre de los árboles, el techo de las casas o cualquier otra percha que domina los alrededores. Cantan de marzo a junio, a veces a principios de julio. Un estudio parece poner de manifiesto que el borde dura más tiempo cuando el varón está en mejor forma, y cuando su hembra está en un período de fertilidad máximo.
Son capaces de imitar otras especies de pájaro, y también de los gatos, de los humanos o de las alarmas, pero el sonido obtenido es generalmente escaso y difícil de detectar. Las grandes subespecies de montaña, especialmente T. Sr. Maximus, tienen un borde comparativamente de pobre calidad, con un directorio limitado comparado al de las subespecies occidentales, srilanquesas o de la India peninsular.

Reproducción

El Mirlo Shama masculino corteja a la hembra con una desfile nupcial quién está formada por cursos oblicuos combinados con meneos de cabeza, el pico abierto, y un borde realizado con una grave voz y estrangulada. La hembra permanece sin moverse hasta que aumente la cabeza y la cola para permitir el acoplamiento.
La separación de los pares ocurre sin embargo en un 20% de los casos después de una temporada de reproducción que tiene un escaso tipo de éxito, además aunque “socialmente” monógamo, estudios pusieron de manifiesto que el porcentaje de paternidad híbrida puede alcanzar un 17% en esta especie.

Nidificación

Una pareja de shamas hará su nido en un nidal, con la mitad de su parte delantera cubierta, comienza generalmente a poner en abril o en mayo, busca un sitio conveniente para la nidificación en un arbusto (arbustivo o trepador), generalmente en aproximadamente 2 m del suelo, favoreciendo algunas especies vegetales como el hiedra, el houx, el espino, el madreselva o el pyracantha. El nido puede también instalarse sobre la bifurcación de una rama de árbol; aunque el varón pueda ayudar a la construcción del nido, principalmente aportando materiales de construcción. La hembra pone entre 2 y 6 huevos (generalmente 4) y la cáscara del huevo son más pálidas que las de los otros.

Incubación y cría

La hembra empolla sola durante 13 días antes de la aparición, que da nacimiento a oisillons nidicoles, desnudos y ciegos de una masa de 5 a 6 g. Los padres se ocupan ambos del pequeños. La masa alcanzada por el polluelo a la edad de ocho días es determinante para la supervivencia posterior, la masa ideal sería entonces de 35 a 45 g, por debajo de estos valores el polluelo tendría muy poca oportunidad de sobrevivir.
En efecto, el período que sigue la estancia al nido es primordial para la supervivencia. Durante treinta días, los jóvenes son entonces especialmente vulnerables, los más pesados son entonces favorecidos con relación al más ligeros. A los doce días, los polluelos pesan entre 60 y 65 g. y dejan su nido muy pronto, al cabo de 10 a 19 días una semana antes de saber volar se arrastran fuera del nido, se dejan caer agitando, y van a ponerse a cubierto a proximidad, Aún serán alimentados por sus padres durante 3 semanas después de su salida del nido. Si la hembra comienza a una segunda nidada, el varón garantizará solamente la cría de los jóvenes.
Durante el período en que sus padres alimentan los pequeños, aprenderán a elegir su comida. A medida que su experiencia y su confianza aumentan, comienzan a aventurarse más antes de en el territorio parental. Los jóvenes terminan por tomar su independencia y volar, siendo su propio jefe, no son expulsados nunca por sus padres

Subespecies

Se reconocen nueve subespecies:


Fuentes