Perdiz nival

Perdiz nival
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Clasificación Científica
Reino:Animalia
Filo:Chordata
Clase:Aves
Orden:Galliformes
Familia:Tetraonidae

Perdiz nival. Ave galliforme de la familia Phasianidae ampliamente extendida por las regiones frías del Holártico, y que también habita en las partes altas de las principales cadenas monta­ñosas de Eurasia y Norteamérica, entre el límite superior de los árboles y las nieves perpetuas, donde las particularidades de cada zona a través del proceso de adaptación natural de la especie han dado lugar a varias subespecies.

Otros nombres

Comunes

  • Perdiz ártica
  • Logópodo alpino
  • Perdiz blanca

Científico

  • Lagopus mutus

Hábitat y distribución

Encontrada en los círculos polares hasta Spitzbergen y en varias islas del ártico, en la tundra ártica y en las laderas alpinas y pirenaicas, donde la vegetación es muy escasa.

Características

El cuerpo de la perdiz nival se halla cubierto de un plu­maje denso que proporciona a su cuerpo la apariencia de un volumen del cual en realidad carece ya que su peso alcanza escasamente los 400-500 gramos.

Las patas también están recubiertas de pluma blanca y poseen una carúncula roja sobre el ojo. El macho en el cortejo nupcial tiene el pecho y los flancos de color pardo negruzco con gran cantidad de manchas, mientras que la hembra presenta un plumaje con el color más leonado. En otoño el pecho y los costados del macho son grises y la hembra parece más oscura que el macho. En invierno ambos sexos son enteramente blancos, con la excepción de la cola negra y las mancha del mismo color que discurre desde el pico a través del ojo, distinguiendo a los machos.

El paso del plumaje estival al invernal tiene lugar de un modo gradual; en la primavera tiene una tonalidad que va del gris al marrón oscuro y, para mediados de agosto, pasa al pardo grisáceo; en octubre, al blanquecino con manchas marrones y en diciembre adquiere el limpio y característico color blanco.

Comportamiento

En los meses de verano, la perdiz nival se establece en el límite de las nieves eternas que coronan las montañas en las que vive, en la vertiente norte de las cimas más elevadas. En el invierno, suele localizarse en los lugares soleados, y, solamente en condiciones excepcionales, abandona las al­turas propias de la especie. Se trata de una especie gregaria que vive en pequeños grupos compuestos de 4 o 6 ejemplares que durante los meses de invierno pueden aumentar hasta 20-30 perdices. No se trata de una especie sedentaria sino que tiende a trasladarse permanentemente por la montaña, actividad que está facilitada por su condición de gran andadora. Por la mañana, sale a la búsqueda del alimento y por las noches duerme acurrucada bajo un saliente rocoso. En in­vierno, excava una madriguera aprovechando el amparo que le ofrece la misma nieve. El vuelo de estas perdices es rápido y muy diferente al de otras perdices. No obstante, se trata de un vuelo de distancias cortas. La perdiz nival nunca se lanza hacia los valles y, en caso de peligro, prefiere adentrarse en los terrenos quebrados e inaccesibles.

Reproducción

La perdiz nival realiza su nido en excavaciones someras, escasamente tapizadas de hierba, plantas y algunas plumas. La ocupación de territorios por los machos se produce durante el mes de marzo y el periodo de canto se extiende desde abril hasta junio con un máximo de actividad en abril. Con ello podemos decir que mayoritariamente cría de mediados a finales de mayo y solo tiene una pollada, compuesta por entre 5 y 10 huevos aproximadamente. Son huevos subelipticos, lisos y brillantes, de color blancuzco a amarillo cremoso pálido con manchas o moteado irregular de pardo chocolate oscuro con un tamaño de 43,6 x 31,1 mm. Ponen los huevos a intervalos de 1-2 días incuba solo la hembra empezando por el penúltimo huevo y durante unos 24 a 26 días. Los polluelos son nidifugos y con plumón.

Al principio del periodo de cría los polluelos son atendidos por ambos padres; empollados por la hembra y guardados por el macho, pero buscándose su propio alimento. Las plumas de las alas crecen muy pronto y pueden volara débilmente a los diez días. En la parte final del periodo de cría los machos tienden a dejar a la familia y unirse en grandes bandadas agregándose machos inmaduros. Las hebras y jóvenes, hablamos aproximadamente de la primera mitad de agosto, permanecen unidos, reuniéndose más tarde con otras y formando bandadas de otoño. En invierno se disgregan los bandos y el lagópodo selecciona por una parte zonas con abundante nieve para pernoctar y, por otra, busca lugares si nieve para alimentarse.

Alimentación

Su alimentación básicamente se soporta gracias a ejemplares de la familia ericaceas (80% del régimen alimenticio en invierno) localizados en las landas, que son formaciones vegetales que crecen en laderas sin arbolado de orientación norte, noreste o este, mezclados con prados. Destacan sobremanera dos especies en la alimentación, una de ellas localizada en zonas calcáreas se denomina comúnmente dríades (Dryas octopetala) y la otra se encuentra en las zonas siliceas y se conoce como el arándano (Vaccinium myrtillus)

Subespecies

Se conocen 30 subespecies

Fuentes