Rafael Robaina Muñoz
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Rafael Rosario Robaina Muñoz. Maestro de generaciones, inolvidable por su consagración y apego a la causa de los humildes y para los humildes, excelente dirigente sindical, propagandista, elocuente del legado martiano, que brilló no solamente como educador, sino en el campo de la literatura, la historia, el arte y el deporte.
Sumario
Síntesis biográfica
Infancia y juventud
El maestro Robaina, como cariñosamente se le conocía, nació el 24 de octubre de 1925 en Pinar del Río, descendiente de familias notables de la cultura pinareña, su padre, el músico Rafael Robaina y su madre Lucía Primitiva Muñoz quien descendía de padres veteranos de la Guerra de Independencia.
Su niñez la desarrolló en el territorio del municipio cabecera de la provincia, donde cursó sus estudios primarios de primera y segunda enseñanza en diferentes escuelas, como fueron la escuela rural # 24 de Pinar del Río con la edad de 9 años, y después en la escuela Marañones en la calle Vélez Caviedes de Pinar del Río a los diez años. Concluyó sus estudios primarios en la escuela Manuel María Azcuy (Antiguo Cuartel Rovena) con la edad de 12 años obteniendo el Primer expediente de su curso.
A los 14 años comenzó sus estudios de Enseñanza Primaria superior en el Instituto de Segunda Enseñanza en Pinar del Río, donde obtuvo el certificado de Octavo Grado. Fue en este tiempo, que comenzó a reflejar sus inquietudes periodísticas y publicó notas en el libelo RIN – CAN, fundamentalmente de corte deportivo y fundamentalmente acerca de su tema favorito que es el béisbol, como el deporte popular.
La influencia positiva y la preocupación de sus padres por su instrucción lo convirtió muy tempranamente en un apasionado y entusiasta adolescente con inclinaciones hacia la teoría del saber y el deporte, llegando a ganar renombre en la clase intelectual pinareña, donde siendo muy joven ingresa en la escuela normal de Maestros en Pinar del Río, en el año 1943, donde se gradúa como maestro normalista en 1947, en su ciudad natal, con la ayuda de una beca que le dieron los profesores, donde muy pronto por sus convicciones y defensa de la justicia social es nombrado Secretario Auxiliar del Sindicato de Maestros Normales y Equiparados. También en este centro educacional escribe para el periódico “El Dictamen” que se editaba en la escuela.
Trayectoria laboral
A finales de 1947 ejerció como maestro en el municipio de Viñales donde contrae matrimonio con María Julia Hernández Hernández, profesora de Música y de cuya relación amorosa nació su único hijo Pedro Rafael al cual educó e instruyó en los mejores valores acorde con los principios y ética revolucionaria.
En Viñales laboró en las escuelas rurales de Barrio Quemados de Pineda, finca Los Quemaditos (1947), Barrio Malas Aguas, finca Bejuquera en el que ocupa plaza fija el 4 de noviembre de 1949 y Barrio San Vicente, finca Ancón (1950).
Se mantiene vinculado con la clase intelectual pinareña hasta el año 1952 en que comienza a residir en el municipio Los Palacios, desempeñándose como maestro de la escuela # 31 en la zona rural de Sabanilla o Rancho Mundito (hoy Niceto Pérez perteneciente al municipio San Cristóbal).
Trabajó además en otras escuelas de la zona rural la escuela # 10 en Barrio Sierra, finca El Coco (1954), año en que participa en la primera campaña de alfabetización rural; escuela #28 Barrio Paso Real, finca El Sabino (1955). En este mismo año comenzó a trabajar en el centro escolar # 1 (Antiguo seis colegio), centro de mayor categoría en la zona urbana, ocupando un aula de tercer grado con 73 alumnos donde obtuvo el 100% de promoción.
El 6 de septiembre de 1956, se funda el centro escolar “Fortuna Medel” en una edificación moderna, y Robaina es uno de los maestros que integra el claustro de profesores impartiendo clases en el aula de tercer grado.
Durante esta etapa se destacó como corresponsal de los periódicos “Vocero Occidental”,” Diario de La Marina”, “Información”, “El Mundo”, “Noticias de Occidente”, “El País” y la revista “Sol” desde 1958 hasta 1961, lo que lo convirtió muy pronto en una destacada personalidad en la esfera de la instrucción y la cultura de la provincia y del pueblo de Los Palacios.
Al triunfo de la Revolución
Al triunfar la Revolución en 1959 se integró desde los primeros momentos al proceso llevado a cabo, que lo encuentra laborando en la Escuela Fortuna Medel y ejerciendo como Secretario Fundador del Consejo Municipal de Educación, así como de la comisión de historia y corresponsal voluntario del INDER.
Representó un baluarte principal en la organización y ejecución de la Campaña de Alfabetización que se llevó a cabo en el municipio en 1961, participó como ascensor y fundador de un centro que, antes del triunfo revolucionario, se dedicaba a la prostitución, allí alfabetizó a 20 personas de un total de treinta con que contaba el centro. Posteriormente al unísono que continuaba impartiendo clases durante el día a los niños de la Escuela Fortuna Medel, impartía clases a los adultos en la batalla por el sexto grado hasta que concluyó esta en 1964.
Entre 1964 y 1974 se desempeñó como director del centro nocturno de superación de adultos en la Escuela Fortuna Medel donde se impartía seguimiento de la alfabetización, cursos de superación obrera campesina y facultad obrera campesina, llegando a tener 18 profesores, atendiéndolo sin tener un secretario y en ocasiones impartiendo clases.
El 8 de septiembre de 1965 se convirtió el antiguo cuartel de la guardia rural (Escuadrón 61 del ejercito Republicano) en el centro escolar Enrique Troncoso y comienza Robaina a impartir clases al mismo.
Otras actividades desempeñadas
Durante muchos años dedicó su vida a impartir clases y a formar las nuevas generaciones de palaceños, pero además no fue su única actividad ya que también se destacó en el deporte, el periodismo y la investigación histórica.
En el deporte jugó un papel muy importante al crear equipos de pelota, tanto con sus estudiantes, en los centros donde impartía clases, como en barrios del municipio, trabajando con los adultos, ama de casa y jubilados. Varios de los niños que formó como peloteros después fueron prominentes deportistas a escala provincial y nacional, entre los que se encuentran Emilio Salgado Quezada, Rodolfo Medina, Vicente Salgado Quezada, Jorge Medina, y otros.
Se destacó en la investigación histórica de centros educacionales, colaboró con el desarrollo de la historia del municipio y el movimiento revolucionario 26 de julio, en la zona entre otros. Fue secretario de la Unión de Historiadores de Cuba (UNHIC) y presidente de la comisión de historia del INDER, en el municipio de Los Palacios, hasta su muerte. Fue delegado al Sexto Congreso de la UNHIC.
Muerte
Falleció en Los Palacios, Pinar del Río el 5 de febrero del 2006.
Condecoraciones recibidas
En su trayectoria social, laboral y revolucionaria fue acreedor de más de 40 condecoraciones, órdenes, medallas, distinciones y reconocimientos sociales que lo convierten de hecho en una de las personalidades excelsas de la historia de este pueblo y que enriquecen el patrimonio de la sociedad palaseña.
- Orden de la educación cubana.
- Medalla de oro “Jesús Menéndez”
- Medalla “Frank País García”
- Medalla “Lázaro Peña” en dos ocasiones
- Medalla de la Alfabetización
- Medalla “40 Aniversario de las FAR” del Consejo de Estado
- Medalla “60 Aniversario de la CTC”
- Medalla “Mártires de Barbados”
- Medalla “28 Aniversario de los CDR”
- Orden por la Distinción Cubana
- Distinción Especial: Isabel Rubio Díaz, otorgada por la Unión Nacional de Historiadores de Cuba en la provincia.
Véase también
Fuentes
- Martínez Zamora, Luis. Presidente de la UNHIC en el municipio Los Palacios
- Robaina Hernández, Pedro Rafael. Archivos personales
