Saludo (Cortesía)

El saludo
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Concepto:Es la forma de cortesía que denota, en grado muy elemental, la educación de una persona.

El saludo. Es la forma de cortesía que denota, en grado muy elemental, la educación de una persona. Se práctica en todos los países del mundo y aunque la forma de saludar varía en las diferentes regiones, siempre expresa buenos deseos.

Saludar proviene del latín salutare dar a una persona alguna, muestra exterior de cortesía o respeto, honrar con ciertas señales de cortesía establecidas. El saludo expresa la psicología de los pueblos, tuvo su origen en tiempos inmemorables y tiene carácter clasista.

Forma del saludo

  • Peculiares: Existen algunas formas peculiares del saludo, como por ejemplo: Los romanos acostumbraban a besarse exageradamente, los esclavos besaban las rodillas del amo. El esquimal se flota las narices, el japonés acude a la reverencia (ya que su código proxémico es inviolable), los americanos, en particular los los latinos, son dados a tocarnos al saludar.
  • Común: Dar la mano, el brazo, los besos (en la mejillas y manos). Las particularidades del saludo denotan el grado de intimidad entre los que saludan.

Cómo se debe saludar

La mano se debe dar extendiéndola a nivel del codo. El saludo será breve y firme, no se dará la mano muy fuerte ni muy suave, sino en forma moderada. Si se extiende la mano, no se debe tomar la iniciativa del brazo. No se bebe atraer a la persona que se saluda. Al encontrase un hombre y una mujer, será él quien inicie el saludo, pero deberá esperar a que ella extienda la mano para estrecharla, si por alguna causa ella no lo hace, se responderá el saludo con una sonrisa y una inclinación de cabeza. Si el hombre por desconocimiento de esta regla extiende la mano primero, la mujer la debe estrechar, pues dejar a una persona con la mano extendida es una descortesía que puede interpretarse como una ofensa. Se estrechan los dedos sin mucha fuerza.

Cuando se da la mano, se mira a los ojos y se obsequia la sonrisa como señal de placer por el encuentro. El hombre siempre se pone de pie para saludar. Las mujeres se ponen de pie para saludar a una persona muy anciana o a una personalidad. Las manos no se dan con guantes puestos, solo lo podrá hacer la mujer si sus guantes son largos, ya que son muy difíciles de quitar. No se puede penetrar a una casa con los guantes puestos y mucho menos sentarse a una mesa. Al llegar a un grupo, no se saluda individualmente a cado uno, sino que se saluda en forma general, con la frase adecuada y una leve inclinación de la cabeza. Es incorrecto incorporarse a un grupo sin saludar a marcharse sin despedirse.

Si se ve al cónyuge, no se debe separar de él para saludar a alguien. Cuando saluda una persona que no se recuerda, es preferible devolver el saludo, aunque no se recuerde quien es, se debe seguir la conversación para tratar de reconocerla. En algunos países se acostumbra besar la mano a las mujeres (solo a casadas, viudas o divorciadas) siempre sin producir chasquidos, con un roce de los labios. Solo es permitido dar la mano con guantes a los monarcas y al papa. A un alto dignatario de la iglesia no se le besa la mano, sino el anillo, emblema de su alta investidura. Cuando una mujer se percata de que va ha ser besada en la mano, la extiende sin levantarla, es el hombre quien se inclina para besarla. La mano solo se besa en locales cerrados, hacerlo en la calle es ridículo.

La mano que se aprieta por tradición es la derecha, si por alguna causa (invalidez, necesidad, etc.) tiene que ser la izquierda, se debe responder con la izquierda para no crear situaciones embarazosas. En la calle se debe evitar cruzar las manos con otra pareja para saludar, pues es incomodo y antiestético. Si la persona que se va a saludar, toma la iniciativa del abrazo, se opta por el, pero nunca se palmea las espaldas ni los hombros, ello constituye una grave incorrección, y no estará justificado a menos que deseamos romper relaciones seriamente con esa persona.

Si se viaja en un automóvil y se reconoce algún peatón, el que va en el auto debe saludar primero. En la calle no se saluda a viva voz de una acera a otra, en ese caso una señal, una sonrisa o una inclinación de cabeza. Nunca se debe obstruir el paso en una acera por prolongar un saludo. De mujer a mujer, en igualdad de condiciones, el saludo puede ser una inclinación de cabeza, acompañada de una sonrisa.

Si se recibe un visitante en compañía de su esposa, el anfitrión principal lo saluda a él, él le presenta la esposa, y entonces, al resto. Si cuando se va por la calle se ve a un desconocido, es preciso adelantarse por su izquierda y al pasar se vuelve la cabeza para saludarlo, nunca se hace a sus espaldas. Si un desconocido atiende una visita o una personalidad, no se le saluda, con un gesto basta. Si se está en un teatro solo se saluda si la función no ha comenzado, en el entreacto o al concluir la misma.

Variantes del saludo

Darse las manos es un gesto amistoso. En algunos pueblos existe la costumbre de hacerlo con la palma vuelta hacia arriba, lo que se podría interpretar erróneamente por los occidentales como una demanda de dinero, cuando lo que se indica es sumisión, al esperar que el otro, considerado más fuerte, ponga su mano sobre ella.

La inclinación, gesto universal que significa expresión de sumisión, puede ir desde un ligero movimiento de cabeza hasta postrarse literalmente. La sonrisa forma parte de los ritos del saludo en todo el mundo. Es considerada siempre como un gesto conciliador. La risa puede ser mal interpretada al hacer creer que se está burlando. El abrazo y el beso están también muy extendidos, aunque con significados distintos, según las culturas.

Tradiciones

Los antiguos persas saludaban a las personas de igual condición con un beso en la boca y a los de rango superior con un beso en la mejilla. Entre los romanos se consideraba como de mal tono el besar a una persona en presencia de otras. En Japón, los amantes solo pueden besarse a escondidas. Los rusos se besan hasta tres veces al saludarse, incluso en la boca. En la tribu africana de los Kukukuku, los hombres no pueden besar a las mujeres, ya que se considera que esto le restaría fuerza al luchar.

El saludo es un acto social importante, ya que a través de él se puede relacionar con personas que no se conocen y se expresa la educación a las conocidas; es por esto que se debe mostrar educado, cortés y así se ofrece una imagen agradable y gentil de la persona.

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