Tarator
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Tarator. Plato búlgaro.
Historia
Es una sopa fría de yogur, que indudablemente tiene sus orígenes en el oriente, lo mismo que las sopas análogas de otros países, como la oroshka de Rusia, el gazpacho español, o el shashik de Turquía. El yogur, que en Bulgaria se denomina “podkwassa”, ha sido entre nosotros, durante mucho tiempo, alimento de dieta, condición que hoy va perdiendo. En Los Balcanes son conocidas desde antiguo sus ventajas para la salud, aun cuando los expertos lo quieran afirman orgullosas que en Bulgaria existen cientos de personas que han pasado el límite de los 100 años: uno de ellos, el búlgaro más anciano, se dice que ha celebrado ya su 119 cumpleaños. En los últimos años, el yogur ha ganado adeptos, de forma impresionante, en muchos países europeos y americanos. Si, como se dice, es cierto que las edades que se alcanzan en Bulgaria se deben a esta especialidad, no nos extrañe que aumente considerablemente el número de los centenarios de Europa.
Ingredientes
1 pimiento verde, sal
2 dientes de ajo, pimienta
3 cucharadas de aceite
100 g de nueces, 4 yogures
1/8 litro de nata agria
2 cucharaditas de eneldo picado
Modo de preparación
Pelar el pimiento y picarlo en dados muy finos, salarlo ligeramente y dejarlo enfriar en el frigorífico. El yogur, con el ajo, las nueces y el aceite, se bate en la batidora. Mezclar a ello la nata, y sazonar con sal y pimienta. Añadir el pimiento a la mezcla del yogur, y volver a sazonar si fuera necesario. Cubrir con el eneldo picado y algunas nueces partidas que se habrán reservado, y servir muy frío. Si se desea, se puede poner en cada plato 2 o 3 trocitos de hielo.
Fuentes
- Gööck Roland. Las 100 recetas de cocina mas famosas del mundo. Editorial Everest.
