Traqueítis
|
Traqueítis es una grave afección con peligro para la vida, que se caracteriza por una obstrucción aguda de las vías aéreas superiores y secreciones purulentas intratraqueales.
Aunque no es una afección frecuente, se puede presentar particularmente en los niños menores de 3 años; pero también puede afectar a niños mayores.
Sumario
Nombres alternativos
Traqueítis bacteriana o Traqueítis bacteriana aguda.
Características
Por lo general, existe un antecedente de una infección respiratoria viral previa, en especial una laringotraqueítis, que, como resultado del daño de la mucosa traqueal o de una disminución de los mecanismos de defensa locales, favorece una infección bacteriana secundaria. La traqueítis bacteriana se ha reportado también, aunque más infrecuentemente, como una complicación posamigdalectomía o posadenoidectomía, o por una infección nosocomial en unidades de cuidados intensivos.
En recién nacidos con bajo peso al nacer, la traqueítis bacteriana está asociada a intubación intratraqueal prolongada.
Etiología
El agente causal más frecuente es el Staphylococcus aureus, aunque también puede ser causada por Haemophilus influenzae tipo b, la Moraxella catarrhalis, el Streptococcus pyogenes, Clamidias y gérmenes entéricos gramnegativos. Más raramente por gérmenes anaerobios y por el Corynebacterium diphtheriae.
Síntomas y signos
El cuadro clínico se caracteriza por un grave estado tóxico e infeccioso, fiebre elevada, estridor y otros signos de obstrucción de las vías aéreas superiores. Tos profunda (similar a la causada por el crup), dificultad respiratoria, fiebre alta y sonido chillón al respirar (estridor).
Diagnóstico
El diagnóstico se confirma por medio de la laringotraqueobroncoscopia, en la cual se observa edema e inflamación de la mucosa y secreciones purulentas al nivel y por debajo del cricoides. Además, este método permite hacer el diagnóstico diferencial con la laringotraqueítis viral y con la epiglotitis, y al mismo tiempo remover secreciones traqueobronquiales, para la posterior intubación nasotraqueal. Por lo tanto, la Endoscopía es, al mismo tiempo, diagnóstica y terapéutica.
Complicaciones
Se han reportado las siguientes complicaciones: síndrome de shock tóxico, shock séptico, edema pulmonar, síndrome de distrés respiratorio agudo, neumonía, neumotórax y formación de pseudomembranas
Evolución y pronóstico
La evolución es rápidamente progresiva y fatal, sino se instaura un tratamiento inmediato y adecuado. El pronóstico es favorable, en la mayoría de los pacientes.
La fiebre tiende a desaparecer a los 2 ó 3 días de iniciado el tratamiento antimicrobiano. Cuando disminuyan el edema y las secreciones purulentas, puede desintubarse, aunque se debe seguir con una vigilancia estrecha, mientras se continúa la administración de antibióticos y oxígeno.
Tratamiento
Las bases del tratamiento son:
- Ingreso en unidad de cuidados intensivos.
- Establecimiento de una vía respiratoria artificial, que permita además aspirar las secreciones mucopurulentas traqueales.
- Agentes antimicrobianos de acuerdo con el germen que se sospeche o identifique.
- Administrar oxígeno de acuerdo con las necesidades.
- Ventilación mecánica en caso de edema pulmonar, falla respiratoria o neumonía.