Zona Protectora El Rodeo
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Zona Protectora El Rodeo. Ubicada en el cantón de Mora, provincia de San José, en Costa Rica. Posee una extensión de 2.350 hectáreas, un tercio de ellas cubiertas de bosque tropical, delimitadas por los ríos Virilla, Quebrada Honda y Jaris, con un clima húmedo y muy caliente. Esta zona constituye una importante área de conservación porque protege las últimas fracciones de bosque importante en el Valle Central y refleja cómo estaban compuestos estos bosques originariamente. Creada en 1976, por Decreto Ejecutivo nº 6112-A.
Sumario
Ubicación geográfica
Enmarcada en el cantón de Mora, provincia de San José, en Costa Rica.
Características física del ecosistema
Se caracteriza por poseer montañas bajas muy erosionadas y deforestadas. Cuenta con una extensión de 2.350 hectáreas, un tercio de ellas cubiertas de bosque tropical, delimitadas por los ríos Virilla, Quebrada Honda y Jaris. La altitud sobre el nivel del mar del lugar varía desde los 550 a los 1.000 metros, está última cota situada en el llamado Alto Gracias a Dios.
Asume un clima húmedo y muy caliente, con una estación seca prolongada que contribuye a un déficit de agua de más de 70 días. La precipitación anual media es de 2.200 mm y la temperatura de 24 grados.
En esta zona natural y sus alrededores se presentan cuatro formaciones sedimentarias de edad Mioceno: Pacacua, Peña Negra, Turrúcares y Coris; cuatro formaciones volcánicas y siete fallas geológicas.
El río Jaris, en su ribera izquierda, entalla una falla de cizalla que separa las unidades sedimentarias (Formación Pacacua y Peña Negra) de las unidades volcánicas (Formación Aguacate). En la vertiente sur encontramos suelos arcillosos de colores rojizos con una erosión verdaderamente avanzada.
En otro sector, La Hacienda el Rodeo, se presentan terrenos muy accidentados con fuertes pendientes, mientras que en la cuenca del río Jaris se presentan terrenos quebrados con pendientes de 45 - 60%. Protege más de 16 quebradas permanentes y unas 20 quebradas intermitentes que son afluentes del río Quebrada Honda y del río Jaris, que a su vez son afluentes del río Virilla.
Zonas de vida
Las dos zonas de vida principales que encontramos en El Rodeo son el bosque húmedo tropical transición a premontano y el bosque muy húmedo de premontano. Está rodeada de áreas de cultivo, ganadería y proyectos urbanísticos y posee diversos ecosistemas entre los cuales destaca el bosque secundario, seguido del bosque ripario.
Existe una pequeña zona donde se mantiene un fragmento importante de bosque poco alterado, sobre las laderas de la Fila Diamante. Como ecosistemas culturales destacamos el potrero arbolado por su máxima extensión.
La diversidad de especies en El Rodeo es grande, cuenta con 1.026 plantas vasculares nativas y 75 introducidas, 50 especies de hongos poliporoides, 43 de mamíferos terrestres y voladores, 250 especies de aves, 80 de reptiles y anfibios, 342 de mariposas diurnas, 152 de escarabajos y 68 especies de libélulas.
Posee una diversidad media de especies arborescentes, el bosque premontano, siendo más diverso que los bosques secos estacionales del Pacífico Norte, pero menos diverso que los bosques lluviosos de tierras bajas del Caribe y el Pacífico sur. Las familias más importantes que podemos encontrar son la Moraceae, Fabacea y Lauráceas.
Flora
Entre las especies de árboles más usuales destacan el pochote (Bombacopsis quinata), el ron rón (Astronium graveolens), el cocobolo (Dalbergia retusa), el bálsamo (Myroxylon balsamum), el cedro amargo (Cedrela odorata), el Guanacaste (Enterolobium cyclocarpum) y el roble de sabana (Tabebuia rosea).
En el sotobosque abundan las platanillas y los helechos arborescentes. En las zonas abiertas son comunes el guácimo (Guazuma ulmifolia), el roble de sabana (Tabebuia rosea), el corteza amarilla (Tabebuia ochracea), el guarumo (Cecropia sp.), la balsa (Ochroma pyramidale) y el guachipelín.
Flauna
Protege la única población de venado cola blanca (Odocoileus virginianus) del Valle Central, además de contar con especies como el mono carablanca (Cebus capucinus), el pizote (Nasua narica), el mapache (Procyon lotor), el armadillo común (Dasypus novemcinctus), el armadillo zopilote (Cabassous centralis), el perezoso (Choloepus hoffmanii), el coyote (Canis latrans), la zorra gris o tigrillo (Uroscyon cinereoargenteus), el león breñero (Herpailurus yagoaroundi), el caucel (Leopardus wiedii), el tepezcuintle (Agouti paca), la guatuza (Dasyprocta punctata), la comadreja (Mustela frenata), el tolomuco (Eira barbara), la ardilla común (Sciurus variegatoides) y muchos ratones silvestres y murciélagos.
Los reptiles están representados por el garrobo (Ctenosaura similis) y la iguana verde (Iguana iguana). Entre las aves destacan el tucán pico iris (Rhamphastos sulfuratus), el carpintero común (Melanerpes sp) y algunas especies de gavilanes.
Esta zona protectora constituye una importante área de conservación porque protege los últimos trozos de bosque importante en el Valle Central y refleja cómo estaban compuestos estos bosques originariamente. Además, protege el hábitat de muchas especies endémicas o únicas del país, tanto local como regional. La mayor parte del bosque más y mejor conservado de El Rodeo se encuentra en manos de la Universidad para la Paz, mientras que algunas zonas con diferente cobertura boscosa forman parte de manos privadas.
Fuentes
- Artículo: Zona Protectora El Rodeo. Información tomada del sitio: ecosistemasdecostarica.blogspot.com. Consultado el 25 de febrero de 2022.
