Anemia normocítica

Anemia normocítica
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Es una enfermedad mediante la cual el cuerpo no posee suficientes glóbulos rojos sanos. Los glóbulos rojos nacen en la médula ósea, viven aproximadamente 120 días y mueren en el bazo. En estas anemias el tamaño de los glóbulos rojos es normal entre 80 y 100. La anemia hemolítica, aplásica o por inflamación medular y hemorragia aguda pertenecen a este grupo. La anemia secundaria por enfermedad crónica puede ser tanto normocítica como microcítica.

Anemia normocítica: Es una afección de salud que principalmente está caracterizada por la ausencia de glóbulos rojos en el organismo, si bien su apariencia y tamaño sean normales, la cantidad es inferior a la necesaria. Este padecimiento se relaciona generalmente con enfermedades crónicas renales, de la médula ósea o hemorragias profusas.

Causas

Se trata de un grupo muy heterogéneo de anemias en las que el volumen corpuscular medio se encuentra entre 80 y 100, siendo un volumen corpuscular normal. Los tipos más frecuentes de anemias normocíticas son:

  • Anemia hemolítica: donde existe una destrucción de los glóbulos rojos
  • Anemia secundaria por enfermedades crónicas
  • Anemia aplásica o por infiltración medular
  • Hemorragia o sangrado agudo

¿Cómo se diferencia estas anemias?

  • Cuando los reticulocitos son aumentados en la sangre la anemia es consecuencia de un sangrado agudo, un agrandamiento del bazo, una hemolisis. Si se presenta anomalía en el número de leucocitos, la causa de la anemia está en la médula ósea.
  • Cuando los reticulocitos son disminuidos y aparecen anomalías asociadas en leucocitos y plaquetas, la causa puede ser una aplasia, infiltración o distrofia de la medula ósea. En el caso de que los reticulocitos disminuidos se asocien con un perfil férrico, la anemia puede ser anemia ferropénica – es decir, consecuencia de un déficit de hierro- o una anemia por enfermedades crónicas.

Síntomas

Si la anemia es leve puede que no se presente ningún síntoma. Al principio los síntomas suelen ser leves como sentirse malhumorado, cansancio y debilidad, problemas de concentración o dolor de cabeza. Con el transcurso de la enfermedad aparecerán otros síntomas:

  • Aumento de la sensibilidad al frío, manos y pies fríos
  • Color azul de la esclerótica de los ojos
  • Uñas quebradizas, caída del pelo
  • Color pálida de la piel
  • Mareo
  • Dolor en la lengua
  • Dificultad respiratoria
  • Alteraciones del sueño
  • Síndrome de la piernas inquietas
  • Atrofia gástrica

Se presentan también los síntomas de la enfermedad o estado que produce la anemia.

Tratamiento

El tratamiento de las anemias normocíticas depende de la causa de la anemia. Algunas veces, puede ser necesario administrar sangre, especialmente en el caso de una hemorragia aguda grave. Si la hemorragia es crónica es importante buscar y eliminar su origen. Las hemorragias crónicas en mujeres en edad fértil se originan de las menstruaciones abundantes y prolongadas. El secundo origen más común de la pérdida de sangre ocurre a través del sistema digestivo por pólipos, En el caso de las anemias aplasicas el paciente necesitará un trasplante de medula ósea. El tratamiento de las anemias producidas por enfermedades crónicas se basa en el tratamiento de la enfermedad crónica y si es necesario se administra sangre. El tratamiento de las anemias hemolíticas depende de la causa de la hemolisis. Esta puede ser una enfermedad hereditaria, como son las talasemias, algunas toxinas, como toxinas hemolíticas de las serpientes, válvulas artificiales y enfermedades del bazo. Si tiene anemia normocítica o síntomas de anemia es recomendable que consulte con su médico para encontrar el origen y el tratamiento más adecuado para su problema.

¿Cómo puede diagnosticarse?

Ante la presencia de los síntomas y elaboración de historia médica completa y examen físico, el especialista indicará análisis de sangre y estudios tanto de la médula ósea como de la sangre periférica.

Causas y consecuencias de padecerla

Existen dos causas por las cuales se puede padecer la anemia normocítica: la congénita que es un problema que viene desde el nacimiento o la adquirida que es producto de una infección.La anemia normocítica congénita es causada por el rompimiento de los glóbulos rojos de la sangre. La enfermedad de células falciformes es un trastorno congénito de los glóbulos rojos. Padecer una enfermedad crónica o por tiempo prolongado puede ser uno de los desencadenantes más comunes del padecimiento de la anemia normocítica adquirida. Entre las enfermedades crónicas que pueden ser causantes de anemia normocítica están: tiroiditis, cáncer, enfermedades renales y artritis reumatoide. De igual forma y aunque no se dé con regularidad, existen medicamentos capaces de producir la anemia normocítica.

¿Cómo afecta a los niños, jóvenes y adultos?

Es un tipo de anemia que se presenta con mucha frecuencia en el adulto mayor, más que en poblaciones más jóvenes. De hecho, 8 de cada 10 ancianos padecen anemia normocítica normocrómica.

Efectos y consecuencias durante el embarazo

La futura gestante debe realizarse pruebas ates de concebir para descartar la posibilidad de padecer anemia normocítica, y en caso de estar ya en periodo de embarazo, será necesario recibir tratamiento para garantizar que la demanda de glóbulos rojos del feto sea satisfecha.

Fuentes