Azotemia en gatos

Azotemia en gatos
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Concepto:Se define como azotemia al aumento de productos de desecho nitrogenados no proteicos de la sangre, siendo la urea y la creatinina las que más comúnmente se miden.

Azotemia en gatos Se define como azotemia al aumento de productos de desecho nitrogenados no proteicos de la sangre, siendo la urea y la creatinina las que más comúnmente se miden. Por lo que decir que un gato presenta azotemia es decir que el gato tiene aumentada la urea y la creatinina o solo una de las dos. ¿Qué es la urea? La urea es una molécula de reducido tamaño y producto final del metabolismo de las proteínas formado en el hígado en el ciclo de la urea. Esta sustancia se filtra por el glomérulo del riñón y se reabsorbe en el interior del túbulo renal y los túbulos colectores del riñón. ¿Qué es la creatinina? La creatinina es un compuesto que se forma a través de la degradación de la creatina, un nutriente importante para los músculos. La creatinina es el producto de desecho creado en el metabolismo normal de los músculos y se produce a una tasa constante, dependiendo de la masa muscular del felino. Finalmente se filtra también en el glomérulo del riñón pero no se reabsorbe después, secretándose en la orina.

Tipos de azotemia en gatos

Existen tres tipos de azotemia en gatos. Sin embargo, en los tres se produce una disminución de la filtración glomerular renal con el consecuente aumento de la creatinina y de la urea. Azotemia prerrenal felina La azotemia prerrenal se desarrolla como consecuencia de una reducción de la perfusión del riñón por una alteración en el flujo sanguíneo, como puede ser una hipovolemia, un gasto cardíaco inadecuado, una vasodilatación destacada o la deshidratación. En estos casos, al disminuirse la perfusión renal, se disminuye la tasa de filtración del glomérulo, lo que ocasiona una eliminación más lenta de la urea y la creatinina, apareciendo en mayores concentraciones en sangre. La urea se reabsorbe mucho más, apareciendo más rápido en la analítica debido al tránsito más lento en los túbulos y conductos. La creatinina es la que más lentamente se aumentará, ya que no se reabsorbe. En estos casos, los gatos deberán seguir concentrando la orina, siendo su densidad igual o superior a 1.035. Como las nefronas se mantienen intactas, sin producirse daño o alteración en su funcionalidad, cuando se restaura la perfusión la función renal vuelve a ser como era. Azotemia renal felina En la azotemia renal, como su nombre indica, se ha producido un daño a nivel del riñón. Una reducción de la función renal entre el 66-75 % da lugar a un aumento de la urea en la sangre, después de la creatinina, con una densidad de la orina insuficiente (1.008-1.012). Sin embargo, una densidad entre 1.013 y 1.034 indica que parte de la capacidad de concentración de la orina está intacta, pero es insuficiente para compensar las pérdidas. Además, los gatos con enfermedad renal crónica conservan durante más tiempo la capacidad de concentrar la orina que los perros, pudiendo esperarse una densidad mayor a 1.020, pero seguirá siendo inadecuada para evitar la azotemia. Azotemia postrenal En la azotemia postrenal, la función renal y la tasa de filtración glomerular es totalmente normal y eficiente, sin embargo los productos de excreción no abandonan el organismo a través de la orina por un bloqueo del flujo de la orina posteriormente a los riñones.

Causa de la azotemia en gatos

El aumento de la creatinina y la urea puede darse en diversas situaciones, por lo que dependerá también del tipo de azotemia que se trate. Causas de la azotemia prerrenal felina La azotemia prerrenal ocurre cuando no hay daño renal ni existe una obstrucción del flujo renal y se desarrolla como consecuencia de una reducción de la perfusión del riñón por una alteración en el flujo sanguíneo, como pueden ser:

Causas de la azotemia renal en gatos La azotemia renal se produce cuando hay daño en los propios riñones. Por tanto, la azotemia en estos casos se produce por:

  • Enfermedad renal aguda: de aparición repentina e intensa con reducción de la tasa de filtración glomerular. En ocasiones puede ser reversible. Las causas más frecuentes en gatos son nefrotoxinas (fármacos, etilenglicol, metales pesados, lirios y agentes yodados de contraste), hipercalcemia, hipofosfatemia, trastornos que causan mala perfusión renal (hipovolemia, trombosis, infarto, policitemia o hiperviscosidad) o enfermedades del parénquima renal (pielonefritis, glomerulonefritis, obstrucción del tracto urinario).
  • Enfermedad renal crónica: reducción progresiva de la tasa de filtración glomerular y de la función del riñón, lo que da tiempo a que se activen los mecanismos compensatorios. Es frecuente no encontrar una causa originaria en los gatos, y puede derivar de alguna causa de enfermedad renal aguda como las infecciones del tracto urinario, los antiinflamatorios no esteroideos o la hipovolemia. También puede causarla la hipertensión.

Causas de la azotemia postrenal en gatos La azotemia postrenal ocurre cuando se bloquea el flujo de la orina por causas extrarrenales. De este modo, las causas pueden ser:

  • Obstrucción de la uretra.
  • Obstrucción, rotura o ligadura en los uréteres.
  • Fuga desde la vejiga o rotura de la misma.

Otras causas de la azotemia en gatos Por otro lado, la urea alta en gatos sin aumento de la creatinina puede producirse tras ingerir un alimento rico en proteína cuando existe una hemorragia intestinal. También se puede producir urea alta y creatinina normal en gatos cuando se aumenta el catabolismo de las proteínas secundario a una pirexia o el uso de corticoides. Sin embargo, la creatinina alta en gatos puede ser debida simplemente a que el gato presenta mucha masa muscular, ya que cuanta más masa muscular tenga, mayor será la concentración normal de creatinina.

Síntomas de la azotemia en gatos

Dependiendo del tipo de azotemia en gatos, los síntomas podrán ser: Síntomas de la azotemia prerrenal felina Los síntomas en este caso son los relacionados a la baja perfusión por alteración del flujo sanguíneo normal. En estos casos, el felino podrá manifestar:

  • Anemia.
  • Palidez de las mucosas.
  • Pulso débil.
  • Aumento del pliegue cutáneo.
  • Sequedad de las mucosas.
  • Hematocrito bajo.
  • Disminución de la presión arterial.
  • Alteraciones en el ritmo cardíaco y respiratorio.

Síntomas de la azotemia renal en gatos La azotemia renal por enfermedad renal aguda puede producir síntomas como:

  • Oliguria (volumen reducido de orina).
  • Anuria (no orinar).
  • Dorso arqueado por dolor renal.
  • Taquipnea.
  • Arritmias.
  • Aumento de la temperatura.
  • Depresión.
  • Vómito y/o diarrea.
  • Riñones normales o aumentados de tamaño.

La azotemia renal por enfermedad renal crónica puede producir síntomas como:

  • Úlceras orales.
  • Halitosis.
  • Deshidratación.
  • Anemia de enfermedad crónica.
  • Signos gastrointestinales.
  • Poliuria-polidipsia.
  • Riñones reducidos de tamaño.
  • Falta de apetito con pérdida de peso.
  • Vómitos.
  • Ceguera aguda.

Síntomas de la azotemia postrenal El bloqueo del flujo de la orina por obstrucción de uretra por cálculos o tapones mucosos en el FLUTD (enfermedad del tracto urinario inferior felina), daño en los uréteres o rotura de vejiga puede producir síntomas como:

  • Disuria (dolor al orinar).
  • Estranguria (micción dolorosa, gota a gota).
  • Polaquiuria (orinar pequeñas cantidades muchas veces al día).
  • Hematuria (orinar sangre).
  • Lamido del área urogenital.
  • Micciones fuera del arenero.
  • Hiperkalemia (aumento de potasio).

Diagnóstico de la azotemia en gatos

Para detectar la azotemia se debe extraer sangre para determinar la concentración de urea en suero o plasma. Después habrá que ver si esa azotemia es prerrenal, renal o postrenal. Diagnóstico de la azotemia prerrenal La deshidratación en los gatos se puede determinar realizando las siguientes pruebas: • Pliegue cutáneo. • Comprobar si hay sequedad de las mucosas. • Comprobar el hundimiento del globo ocular. • Analítica sanguínea para comprobar si hay un aumento en el hematocrito y las proteínas totales. Se debería realizar una exploración física exhaustiva para detectar la hipovolemia. Diagnóstico de la azotemia renal En la enfermedad renal se reduce la tasa de filtración glomerular y la concentración de creatinina se ha considerado como indicador indirecto de la tasa de filtración glomerular. Sin embargo, el SDMA refleja con una mayor precisión esta tasa y diagnostica una enfermedad renal más precozmente que la creatinina, ya que el SDMA aumenta cuando se ha producido al menos un 25 % de la función renal y la creatinina no aumenta hasta que esta pérdida es de al menos un 75 %. Además, hay que considerar que la creatinina depende de la masa muscular de un gato, pudiendo dar falsos resultados en un gato muy musculoso o muy delgado como los hipertiroideos, cosa que no ocurre con este parámetro. Para diagnosticar el estadio de la enfermedad renal se deben hacer una serie de mediciones y parámetros como el SDMA, la creatinina, el UPC (ratio proteína/creatinina en orina) y la presión arterial sistólica. Se debe realizar una buena anamnesis para saber si ha estado en contacto con un fármaco o sustancia nefrotóxica, si hay una infección del aparato urinario, hipertensión o baja perfusión renal y determinar las concentraciones de fósforo y calcio para encontrar la causa de la enfermedad renal. También se deberá realizar una ecografía del riñón para valorar su tamaño y su forma y ver el resto de estructuras del aparato urinario. Diagnóstico de la azotemia postrenal Para diagnosticar una obstrucción uretral, ureteral o rotura de vejiga, se deben realizar las siguientes pruebas:

  • Bioquímica sanguínea para detectar azotemia, hiperpotasemia, hiperfosfatemia y acidosis metabólica.
  • Técnicas de diagnóstico por imagen para detectar líquido en el abdomen (uroabdomen) e incluso en ocasiones se podría ver una obstrucción. Análisis del líquido tras su extracción para saber si es orina.
  • Análisis de orina para detectar cristales, tapones mucosos o sangre.

Tratamiento de la azotemia en gatos

Ante una azotemia prerrenal lo que hay que hacer inmediatamente es reponer los fluidos y la perfusión al felino, a través de la fluidoterapia y, en ocasiones, transfusión de sangre. En los casos de azotemia renal hay que tratar la causa en la enfermedad renal aguda, así como corregir la deshidratación y alteración electrolítica. Es importante tratar las enfermedades concomitantes en caso de que las hubiera (diabetes, hipertiroidismo, cardiopatía, tumor). El tratamiento específico de la enfermedad renal consiste en: • Tratar la deshidratación con fluidoterapia. • Tratar la hipertensión con amlodipino. • Tratar la proteinuria con inhibidores de la ECA, como el benazepril. • Si hiperfosfatemia, comenzar con un pienso renal y tras un mes si el fósforo sigue alto dar un quelante de fósforo. • Estimulantes de apetito como mirtazapina. • Antieméticos como el maropitant o metoclopramida. • Si hay úlcera gástrica, omeprazol o ranitidina. • Si no toleran alimento, sonda de alimentación. • Tratamiento dietético: reducción de proteína, fósforo, sodio y aumento de potasio, grasa y vitaminas B. • Si hay anemia con hematocrito inferior al 20 %, eritropoyetina. • Antibióticos, si hay infección del tracto urinario. En la azotemia postrenal se debe desobstruir al felino, reparar daños, eliminar los cálculos urinarios con dieta (estruvita) o cirugía (oxalato cálcico), y en casos de rotura de vejiga, operarles para restaurar el daño.

Fuentes