Castillo Melgaco
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Castillo Melgaco . Edifificación construida por Afonso Henriques hacia el año 1170, con la función de defender la frontera del Alto Minho. La fortaleza demostró su eficacia en 1212, resistiendo el ataque del rey de León, siendo Afonso II el soberano portugués
Ubicación
El castillo de Melgaço se encuentra en la localidad del mismo nombre, distrito de Viana do Castelo, en Portugal.
Historia
El castillo de Melgaço fue edificado por Afonso Henriques hacia el año 1170, con la función de defender la frontera del Alto Minho. La fortaleza demostró su eficacia en 1212, resistiendo el ataque del rey de León, siendo Afonso II el soberano portugués. En 1383, a la muerte del rey Fernando, sin herederos masculinos, su hija Beatriz, reclamó el trono portugués, casada con el rey de Castilla, significaba la pérdida de su independencia. Melgaço tomó parte a favor de doña Beatriz frente a don Joao, siendo uno de los escenarios del conflicto sucesorio y bélico con Castilla del que Don Joao resultaría vencedor. A partir de 1640 en el marco de las guerras de restauración de la corona portuguesa, el castillo fue abaluartado y adaptado para el uso de la artillería.
Construcción
El castillo tiene una forma oval. Su majestuosa torre del homenaje, como muchos otros castillos de origen románico, está aislada en el centro del patio de armas. Su interior está dividido en tres plantas, con la entrada a la torre situada a varios metros de altura en el flanco norte. La muralla, que contaba con cinco torres de flanqueo de planta cuadrangular solo quedan tres de ellas, la cual disponía de dos puertas de acceso. La puerta medieval a la villa se encuentra en el flanco oeste, al lado de una torre desde donde inicia la cerca urbana. En el lado este de la muralla se abre una poterna que da a campo abierto. A la izquierda está una imagen del aljibe, situado en el lado norte del patio de armas, parece estar compuesto por un solo cuerpo, cubierto por una bóveda de cañón y con una toma de agua sobre la misma. Existen afloramientos rocosos del suelo de los alrededores, que indican que el recinto está cimentado sobre una masa rocosa a fin de impedir su minado. Además la bóveda, está rodeada enteramente por una potente zapata de sillería.
Todo el edificio está construido con sillería bien labrada de granito, lo que le da una magnífica resistencia al conjunto. La imponente torre del homenaje no se abre en la misma una sola aspillera, solo tiene una en su cara sur, dos en la cara este, y otras dos en la cara oeste, lo que hace pensar que su interior debía ser bastante oscuro. Las entreplantas son de tablazón de madera sustentadas por jácenas, y la azotea está cubierta por un tejado a cuatro aguas que no da espacio para moverse por la misma. El almenado, en el que se abren algunas aspilleras, es el típico de las fortificaciones románicas, a base de merlones con capuchones en forma de prisma piramidal.
Premios
El castillo es clasificado como Monumento Nacional por el Decreto de 16 de junio de 1910, publicada en el Boletín Oficial del Estado nº 136 de 23 de junio de 1910.
Actualidad
Se realizaron labores de consolidación de las estructuras y adecuación para la recepción de visitantes, convirtiendo la torre de homenaje en un núcleo museológico, y está abierto al público como espacio cultural y turístico.
