Combate de Guayacancito

Combate de Guayacancito
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Fecha:1 de marzo de 1897
Lugar:Guayacancito, Municipio Majagua
País(es) involucrado(s)
Bandera de Cuba Cuba
Líderes:
Máximo Gómez y Bernabé Boza


Combate de Guayacancito. Contienda dirigida por el Coronel Bernabé Boza, con solo un puñado de hombres. Sobre esta acción Máximo Gómez concluía en su Diario de Campaña: "Como el propósito fue, hacer alto nada más que un momento, la posición no se resguardó con sus guardias a larga distancia ni mucho menos, con exploraciones; y fue así que fuimos víctimas de la sorpresa más fuerte que he sufrido en esta guerra."

Sorpresa en Guayacancito

Siendo el 1 de marzo de 1897, reciben las fuerzas cubanas la mayor sorpresa combativa de toda la campaña libertadora, en lugares de la región de Guayacanes, actual municipio de Majagua.

Después de haber evitado a dos fuertes columnas procedentes de Sancti Spíritus y Ciego de Ávila, las fuerzas cubanas se retiraron a Guayacancito, único lugar que tiene agua para saciar la sed de sus caballos, y cometen la imprudencia de no colocar guardias alrededor del campamento ni exploración de avanzada, lo que permitió que sorpresivamente una columna enemiga penetrara en el campamento mambí cuando todo el personal se encontraba descuidado o dedicados a otras labores.

Comienza el combate con la dispersión y discreción propia de la sorpresa. Los cubanos se levantan a la desesperada y logran salvar las cosas más útiles y contener al enemigo de forma que se pueda organizar la retirada.

El coronel Bernabé Boza, como principal autor de esta contienda, logra frenar el ímpetu de los españoles con un puñado de hombres, pero aún así en la acción ocurrieron 4 muertes por la fuerza cubana.

Dada a la importancia de estos hechos, el gobierno del municipio Majagua, colocó una tarja para que forme parte de nuestra memoria histórica.

Resultados del combate

A la hora y media de haber terminado el combate, los mambises hicieron alto en Sao Jiquí (hoy Orlando González) y sepultaron a dos de sus muertos, más tarde acamparon en Derramaderos. Contaba Boza que el 2 de marzo pasaron a Laguna de Miguel (al sur de Limones Palmero), en cuyo sitio se les incorporó el Jefe de la Brigada de Sancti Spíritus con su escolta. Luego llegó el Comandante Emiliano González con la impedimenta, dispersada en la jornada anterior.

El Capitán Juan Pacheco reconoció el campo de Guayacancito al otro día. Los españoles dejaron siete caballos muertos, dos grandes sepulturas y evidencias de haber curado a heridos. Con dolor e indignación se inhumaron en el lugar los cuerpos del Alférez Catalá y el Sargento Montalvo, quienes cayeron en la acción. Los enemigos se ensañaron y los mutilaron a machetazos, "hazaña" muy común entre los españoles.

Fuentes

  • Máximo Gómez Báez. Mi diario de campaña. 1868-1899. Instituto del Libro, La Habana, 1968, pp. 30, 31.
  • Bernabé Boza. Mi diario de la Guerra. Tomo I. Editorial de Ciencias Sociales, La Habana, 1974, p 46.
  • Combate de Guayacancito. Recuperado de: Periódico Invasor. Consultado el 26 de febrero de 2020.