Congreso Nacional de Mujeres

Congreso Nacional de Mujeres
Información sobre la plantilla
Congreso nacional mujeres.JPG
Asociación, compuesta por intelectuales de las letras, periodistas, pedagogas, abogadas y pintoras.
Fecha:3 de julio de 1918
Lugar:Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de La Habana.
Descripción:
Uno de los acontecimientos más destacados del movimiento de reforma social iniciado en la década de los años 20.
Resultado:
Sentó las primeras bases para la lucha organizada del sector femenino.
País(es) involucrado(s)
Cuba
Líderes:
Pilar Jorge de Tella, Enma López Seña, Hortensia Lamar del Monte, Rosario Guillaume y Dulce María Borrero, María Luisa Dolz, Lola Borrero y Dulce María Saínz de la Peña.

Congreso Nacional de Mujeres. (1923, 1925-1939). Uno de los acontecimientos más destacados del movimiento de reforma social iniciado en la década de los años 20. Sentó las primeras bases para la lucha organizada del sector femenino por sus justas reivindicaciones.

Creación de la organización más importante del feminismo nacional

El 21 de marzo de 1918, un grupo de asociaciones sufragistas se unió para formar la organización más importante del feminismo nacional: el Club Femenino de Cuba, el cual se dio a conocer oficialmente el 3 de julio de 1918 en sesión pública -efectuada en la Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de La Habana- que tuvo como oradora a Dulce María Borrero de Luján.

Estructura de la organización

Esa asociación, compuesta por intelectuales de las letras, periodistas, pedagogas, abogadas y pintoras, animó un debate feminista superior, similar al que se realizaba en otros lugares del mundo. El liderazgo del grupo estuvo a cargo de Pilar Jorge de Tella, Enma López Seña, Hortensia Lamar del Monte, Rosario Guillaume y Dulce María Borrero, asistidas por reconocidas personalidades femeninas como María Luisa Dolz, Lola Borrero y Dulce María Saínz de la Peña. El Club fundó escuelas nocturnas para obreras, y otras para la enseñanza del comercio; también creó la primera institución formadora de niñeras que tuvo el país. Una de las obras sociales más importantes del Club Femenino fue la creación de la cárcel de mujeres de Guanabacoa, donde se reeducaba a las reclusas, a quienes se ofrecían cursos de instrucción primaria y de costura, además de garantizarles cama, ropa y alimentos.

Federación Nacional de Asociaciones Femeninas de Cuba

En 1921, por iniciativa del Club, se constituyó la Federación Nacional de Asociaciones Femeninas de Cuba, compuesta inicialmente por cinco asociaciones: Club Femenino de Cuba, Congreso Nacional de Madres, Asociación de Católicas Cubanas, Asociación Nacional de Enfermeras de Cuba y Comité de la Creche Habana Nueva. El 11 de octubre de 1922 la Federación Nacional convocó la celebración de un congreso.

Primer Congreso Nacional de Mujeres

Del 1ro al 7 de abril de 1923, en el teatro Nacional (hoy, Gran Teatro de La Habana) se llevó a cabo el Primer Congreso Nacional de Mujeres, al que asistieron treinta y una organizaciones. Aunque no participaron en él delegadas obreras, contó con la asistencia de mujeres de distintas creencias o corrientes ideológicas. En la mesa de la junta directiva figuraban Pilar Morlón de Menéndez, como presidenta; Manuela Breéis, como secretaria general; Hortensia Lamar del Monte, como tesorera, y otras personalidades representativas del movimiento feminista. Tuvo un carácter amplio, no clasista, y dio lugar, en un temario de 36 acápites, a enconados debates, los cuales mostraron cuánto pesaban los prejuicios y convencionalismos sociales en las mentalidades de muchas mujeres cubanas.

En las resoluciones de la magna reunión, las participantes reclamaron que se hiciera campaña por el derecho al sufragio femenino; que se luchara por la igualdad de derechos y deberes sociales, políticos y económicos en relación con el sexo masculino; que las drogas y la prostitución fueran combatidas; que se consiguieran leyes protectoras de la infancia y modificaciones en la enseñanza en general, incluidas las escuelas especiales, y que se atendiera la instrucción de la eugenesia y de la puericultura. Además, que se iniciaran acciones para el embellecimiento de la ciudad, el amor a las plantas y a los animales, y otras disposiciones.

El Congreso Nacional de Mujeres fue el primer encuentro de su tipo en Hispanoamérica, y sus conclusiones reflejaron una tendencia a la reforma social. En él expusieron sus criterios, sin limitaciones, las delegadas católicas, protestantes, israelitas y teósofas. Sarah Pascual y Loló de la Torriente participaron como representantes del Instituto de Segunda Enseñanza de La Habana.

Segundo Congreso Nacional de Mujeres

El Segundo Congreso Nacional de Mujeres se celebró del 12 al 18 de abril de 1925 -en los mismos escenarios en que se había realizado el anterior-, con la presencia de una delegada por la Federación Anticlerical de Cuba, Ana Cañizares, y otra del Gremio de Cigarreras, Estela Marrero. Al acto de inauguración del nuevo Congreso asistió el presidente electo, Gerardo Machado Morales, quien habría de asumir el cargo al mes siguiente. La demanda fundamental de este Congreso fue el derecho al sufragio. En la cita se admitió la presencia de la mujer negra trabajadora, representada por Inocencia Valdés, veterana luchadora del Gremio de Despalilladoras, y se incluyeron temas como la condena al aumento de la pornografía en anuncios, libros, periódicos y espectáculos. Esa reunión femenina tuvo características semejantes a la de 1923, y asistieron a ella setenta organizaciones.

Por lo polémico de los temas, se presentaron rivalidades en los debates entre la líder feminista Pilar Morlón y la sufragista María Collado, quienes llegarían agredirse con burlas y ataques personales. Las asambleas públicas resultaron tan turbulentas, que provocaron grandes trifulcas, desvanecimientos y escándalos.

Tercer Congreso Nacional de Mujeres

Entre los días 21 y 26 de abril de 1939 -quince años después del segundo-, se realizó en el teatro Nacional el Tercer Congreso Nacional de Mujeres. En este, a diferencia de los anteriores, no se permitieron ataques políticos, religiosos o ideológicos entre las delegadas, quienes tenían como lema «Por la mujer, por el niño, por la paz y por el progreso de Cuba». Las conclusiones de la tercera reunión femenina exigieron, entre otros aspectos, una reforma a la constitución de la república.

Labor del Congreso

La labor del Congreso resultó amplia, profunda y sostenida. Las ponencias presentadas se discutieron intensamente, de acuerdo con las facultades que para ese objetivo ofrecía el reglamento. Al finalizar el evento, las comisiones expusieron las conclusiones adoptadas en sus respectivas sesiones plenarias. Los puntos fundamentales fueron el derecho civil, la realización de un Código de la Familia, la lucha contra la delincuencia femenina -que debía encaminarse hacia la solución práctica del problema económico de la mujer joven-, la ejecución de acciones para que los reclusorios perdieran el aspecto de sitios de castigo y pudieran convertirse en centros de readaptación de la mujer al medio en que tenía que vivir; el establecimiento de granjas, talleres, industrias y campos de cultivo en las cárceles de mujeres; la lucha contra el proxenetismo y, finalmente, el rechazo a la pena de muerte.

Los dieciséis acuerdos que adoptó este Congreso mostraron el apreciable desarrollo alcanzado por la masa femenina en el proceso de unidad y de incorporación a la lucha por sus reivindicaciones. Por la gestión directa de las miembros de su Comité Organizador y por sus vínculos con figuras de las artes y otras manifestaciones culturales, las congresistas hicieron uso de escenarios conocidos de la capital, como teatros donde se realizaban espectáculos públicos para llevar el mensaje contenido en el lema del congreso: «Por la paz y el progreso de Cuba».

Los debates del Tercer Congreso Nacional Femenino se extendieron a todo el año 1939, con el argumento de la igualdad de ambos sexos, lo cual permitió que el tema se priorizara en las secciones de la Asamblea Constituyente, que elaboraría y aprobaría la Constitución de 1940.

Enlaces externos

Fuentes