Fábrica de Impermeabilizantes Asfálticos ( La Lisa)
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Fábrica de Impermeabilizantes Asfálticos (La Lisa). Fábrica productora de impermeabilizantes que surge a aprtir de la década de 1960, con el propósito de garantizar en Cuba las juntas necesarfias para los techos.
Impermeabilizantes
La producción de impermeabilizantes no había crecido en estos años, ni los de base asfáltica ni las losas de azotea, por lo que a partir de 1972, comienzan a importarse cantidades cada vez mayores de láminas monocapas, de uso generalizado en Europa sólo en el año 1985 se importaron de España 160 mil metros cuadrados. Ese año se tomó la decisión de adquirir la licencia de producción, equipos y "know how" para fabricar varios impermeabilizantes de alta calidad.
Construcción
En 1988 se inauguró en La Lisa una planta con un costo de once millones de pesos, para producir distintos tipos de impermeabilizantes de base asfáltica: asfalto oxidado, lamisfal, pinturas y masillas, aditivos para hormigón celular. El asfalto oxidado se logra mediante un proceso de oxidación por movimiento continuo en un reactor, en el que se inyecta aire comprimido a contracorriente de la masa asfáltica enriquecida con aceite y un agente catalizador, lo que permite transformar las propiedades, elevando la temperatura de fusión hasta un máximo de 105°C, y conservar una elevada plasticidad.
Producto
El Lamisfal consiste en una lámina de 10 metros de longitud por 1.10 metros de ancho y 2.8 milímetros de espesor, constituida por una armadura continua de polietileno, recubierta por ambas caras con asfalto oxidado de alta plasticidad y con un acabado superficial dado por una película de polietileno o de aluminio.
Este producto se emplea en todo tipo de cubiertas y puede tener terminación de aluminio en pendientes mayores del 8%. Las pinturas asfálticas se obtienen a partir de la mezcla de un asfalto oxidado plástico con disolvente orgánico y un agente adhesivo. Se utiliza para recubrimientos impermeables de depósitos, muros, cimientos, etc.
Las masillas plásticas se logran a partir de un betún asfáltico modificado con caucho, aceite y relleno mineral. Se emplean para sellar silos, tanques, depósitos, juntas, canales, alcantarillas, etc. El aditivo para hormigón emplea como componente principal la sangre animal, y tiene la propiedad, al mezclarse con el cemento y la arena, de actuar como agente espumante para hormigones celulares, utilizados para el aislamiento térmico y para lograr pendientes en cubiertas y entrepisos. En 1993 se terminó una ampliación de esta planta para producir emulsiones asfálticas.
Fuente
- Libro 500 Años de Construcciones en Cuba, Servicios Gráficos y Editoriales, Centro de Información de la Construcción.
