Fístulas anal

Abscesos y Fístulas anal
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Concepto:Un absceso anal es una cavidad infectada, llena de pus y que se localiza cerca del ano o del recto.

Un absceso anal. Es una colección mucosa o muco purulenta que se origina a consecuencia de trastornos funcionales, inflamatorios o traumáticos que taponan las glándulas anales. De ésta forma el moco a que debía de eliminarse por el conducto anal, se acumula, se disemina por los espacios musculares del complejo esfinteriano y se produce el absceso. Una fístula anal es casi siempre el resultado de un absceso previo y es un túnel que conecta la glándula anal originaria del absceso con la piel de las nalgas de alrededor de ano.

Introducción

Se llaman abscesos " específicos " cuando son secundarios a cáncer de localización ano rectal, enfermedad de Crohn, actinomicosis, linformas, tuberculosis, enfermedades venéreas, enfermedad de Verneuil, leucemias, osteomielitis o cuando son complicaciones de cirugías y procedimientos realizados en la región.

La mayoría de los abscesos son los llamados " inespecíficos " que se presentan sin causa aparente a consecuencia del taponamiento de las glándulas anales. Se tata entonces de complicaciones de otros padecimientos como diabetes, inmunodeficiencias, traumatismo ano rectales, o pueden también presentarse en personas aparentemente sanas.

Anatomía

Los abscesos evolucionan y progresan hacia la fístulas que es la comunicación a través de un conducto, desde el interior del ano hacia los tejidos vecinos de la zona perineal. Pueden inclusive las fístulas comunicar el ano con otros órganos como vejiga, vagina o intestinos.

Aproximadamente el 20% de las personas que se operan de enfermedades benignas de la región ano rectal, lo hacen por presentar en forma aguda un absceso o porque son portadores crónicos de una fístula.

Tanto el abscesos como la fístulas son solo de tratamientos quirúrgico. En estas enfermedades no es prudente dejar pasar el tiempo para que se "maduren" las colecciones o para que "se apaguen" o "desaparezcan" las fístulas. Solo una intervención quirúrgica oportuna y correcta, libera al enfermo de su molestia en forma definitiva.

Así se evita que la enfermedad siga infectando más tejidos y órganos originando de esta manera trayectos cada vez más largos y profundos y por ende más peligrosos.

Síntomas y signos de la enfermedad

El absceso se presenta como una colección al comienzo blanda y luego dura, localizada junto al orificio anal, que provoca una hinchazón rojiza que que causa mucho dolor, dificultad para sentarse he incluso para caminar.

Existen además sensaciones de pulsaciones o latidos a nivel rectal, decaimiento fiebre, malestar general, sudoración y muchas veces eliminación por el orificio anal de moco mal oliente.

Las Fístulas se presentan con uno o varios orificios pequeños localizados alrededor del ano, inclusive en glúteos o cerca de los genitales. Por este orificio se elimina un material mucoso que mancha la ropa interior y que no siempre es mal oliente. Conforme pasa el tiempo la secreción mucosa se hace abundante y existe molestias como picazones, sensación de ano húmedo, fiebre en las noches, decaimiento, cansancio, malestar general y dolor en la región anal.

En la fístulas muchas veces no existe la eliminación de moco o pus, pero la lesión está presente, esto no quiere decir que la fístula haya desaparecido, simplemente se ha cronificado y existirán molestias cuando se inflame o infecte. Así cada vez pueden crecer más e invadir nuevos espacios musculares.

Ante la presencia de una colección purulenta cerca del orificio anal, si hay dolor, fiebre y malestar general, se debe acudir inmediatamente donde el Proctólogo, quien es el único que en forma especializada orientará el diagnóstico y realizará el tratamiento más adecuado.

Tenga Cuidado no es prudente ni recomendable tomar o inyectarse antibióticos para aliviar las molestias. Esto puede ser causa de resistencia bacterianas que luego pueden ser graves cuando justificadamente se deban usar.

No debe aplicarse fomentos, parches o plantas medicinales que pueden infectar más la zona. En esta patología no funcionan los "remedios caseros" y sólo la cirugía corrige el problema en forma definitiva.

Personas propensas a presentar la enfermedad

Esta demostrado que los pacientes diabéticos, desnutridos, alcohólicos, inmuno deprimidos, los que han sufrido traumatismo en la región anal, o quienes no cuidan adecuadamente su higiene anal. son más propensos a presentar la enfermedad. Sin embargo, si la dolencia es diagnosticada y tratada rápidamente, la evolución y recuperación es mejor, más rápida y menos dolorosa. Cuando se presentan abscesos y fístulas en niños el diagnóstico debe realizarse oportunamente a fin de evitar daños mayores, puesto que en estas edades las infecciones se propagan muy fácilmente. Es una enfermedad que se la encuentra tanto en el sexo masculino como en el femenino.

Recuperación

Las molestias postoperatorias suelen ser escasas y la vuelta a las actividades normales es rápida; sin embargo dependerá, en gran medida, de la complejidad de la cirugía practicada. La cicatrización de estas heridas suele ser un proceso lento, cuya duración es difícil de predecir, variando entre unas semanas a varios meses.

Durante el tiempo en que la herida operatoria está cicatrizando son convenientes los baños de asiento con agua tibia (3-4 veces al día), y suele ser necesario poner unas gasas o mini-compresa para absorber el líquido que exuda la herida. Para favorecerla cicatrización de dentro hacia fuera sin formación de cavidades es fundamental que las curas se realicen de forma correcta por personal especializado.

Las deposiciones no afectan a la curación ni suelen producir dolor, aunque sí cierta molestia anal y sangrados ocasionales. Es recomendable la toma de laxantes para estimular la defecación de heces más blandas.

No es recomendable hacer nadar ni realizar ejercicios vigorosos hasta que la herida se encuentre cicatrizada. Las actividades sexuales pueden reanudarse en cuanto no se tengan molestias con las mismas.

Recomendaciones

Si Ud. es diabético, tuberculoso, inmuno deprimido, si presenta algún tipo de alteraciones en la sangre como leucemia o anemia, si toma licor con frecuencia... debe acudir periódicamente al Proctólogo para realizarse un control de la región recto anal y perineal.

En la actualidad cada vez son más frecuentes las enfermedades del ano y recto, zona que continuamente están en contacto con materia fecal y que fácilmente se pueden inflamar e infectar.

Fuente

  • Articulo Fístulas anal.Disponible en "Aparatodigestivo". Consultado el 1 de septiembre del 2011.