Iglesia de Nuestra Señora del Carmen (La Habana)

Iglesia de Nuestra Señora del Carmen
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Obra Arquitectónica  |  (Iglesia)
Iglesia del Carmen la habana calle Infanta.jpg
Sobresale la torre campanario de 6,5 metros de altura, coronada por una escultura colosal de la Virgen del Carmen de siete y medio metros de altura y nueve toneladas, que es visible desde cualquier lugar de Centro Habana.
Descripción
Tipo:Iglesia
Estilo:estilo ecléctico
Localización:calle Infanta entre Calle Neptuno y calle Concordia, en el Municipio Centro Habana
Uso inicial:Iglesia y Convento
Uso actual:Iglesia y Convento
Datos de su construcción
Inicio:1923
Término:1927

Iglesia de Nuestra Señora del Carmen, coronada por una colosal estatua de la Virgen venerada por las órdenes carmelitas se yergue la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen en la popular calle Infanta entre la calle Neptuno y la calle Concordia, en el Municipio Centro Habana, uno de los más céntricos de la Capital de Cuba.

Orígenes

La Iglesia de Nuestra Señora del Carmen, en Centro Habana, tuvo sus orígenes en 1693 bajo el nombre de Iglesia de San Felipe de Neri. Entonces el Obispo Compostela traslada para el recinto el Oratorio de San Felipe de Neri que existía en la Parroquial Mayor desde 1666.

Durante el curso del 1794, el oratorio pasa a manos de los Capuchinos, y más tarde al ser expulsados estos de Cuba, el templo pasa a cargo de los Carmelitas Descalzos y adopta el nombre de El Carmen. En 1923, los Carmelitas, ya escasos de espacio, adquieren los terrenos en la Avenida del Presidente Menocal hoy calle Infanta, entre Neptuno y Concordia, para ampliar el templo. Y mientras la Orden funcionaba en una capilla provisional, se edificó el bello templo del Carmen, cuya inauguración tuvo efecto en el año 1927.

La iglesia de estilo barroco, construída bajo la maestría arquitectónica y el gusto refinado que caracterizaba a dicha orden, cuenta con una torre que mide 60.5 metros de altura, culminada por una estatua de Nuestra Señora del Carmen que le añade 7.5 metros más de altura a la edificación.

  • pero los verdaderos tesoros residen en su interior: magníficos azulejos de estilo sevillano, un retablo dorado, tallas de madera barrocas y curvilíneos frescos. Curiosamente, el templo es bastante reciente: se construyó en 1923, para alojar a la orden carmelita.

Se trata de una verdadera joya muy conocida por los habaneros, aunque poco visitada, de estilo ecléctico, en la cual sobresale la torre campanario de 6,5 metros de altura, coronada por una escultura colosal de la Virgen del Carmen de siete y medio metros de altura y nueve toneladas, que es visible desde cualquier lugar de Centro Habana y desde muchos otros puntos de la urbe.

La Iglesia del Carmen, como la llaman los habaneros, se halla muy cerca de la Universidad de La Habana, el Museo Napoleónico, el Hotel Colina y la populosa Rampa donde se encuentran el Hotel Habana Libre y la heladería Coppelia.

Interior del templo

Sus verdaderos tesoros sin embargo se hallan en el interior del templo adornado con ricos y coloridos mosaicos de estilo sevillano, un altar dorado bellamente labrado en madera preciosa y los hermosos frescos salidos del pincel del pintor madrileño Antonio Martínez Andrés.

Estatua de la Virgen del Carmen

Se dice que para colocar la enorme y bella estatua de la Virgen del Carmen encima de la torre campanario donde hoy se le admira, fue necesario subirla por dentro de dicho elemento constructivo.

Hechos relevantes

Otro hecho relacionado con el barrio, el templo y la Orden religiosa y muy poco conocido es que, veinticuatro miembros de la "Orden de los Carmelitas Descalzos" fueron voluntarios para que el Doctor Carlos J. Finlay pudiera probar su descubrimiento del agente transmisor de la Fiebre Amarilla, en el sitio se encuentra colocada una placa que rememora el hecho porque algunos de ellos alcanzaron a vivir en el lugar y participar de la vida del barrio.

"La teoría finlaísta no era siquiera discutida. Pero él, sostenido por su profunda fe cristiana, católica, no desmaya, prosigue los experimentos en la calle Prado número 52, donde radica su consulta. Inocula soldados de la fortaleza de la Cabaña, a los Padres Jesuitas del colegio de Belén de La Habana y Monserrat, de Cienfuegos, así como a los Padres Carmelitas Descalzos: 24 se prestaron a los experimentos. El 29 de febrero de 1884 presenta en la Facultad de Estudios Clínicos: Fiebre amarilla experimental comparada con la natural, en sus formas benignas".

Fuentes