Insuficiencia hepática aguda

Insuficiencia hepática aguda
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Clasificación:Crónica Transmisible
Región de origen:Hígado

Insuficiencia hepática aguda. Aparición de encefalopatía como consecuencia de un daño hepático severo en las primeras 8 semanas que siguen a la presentación de los síntomas clínicos, en un enfermo con un hígado previamente sano y con un carácter potencialmente reversible.

Clasificación

Elementos Hiperaguda Aguda Subaguda
Encefalopatía Si 0-7 Si
Ictericia (días) Si 8-28 Si
Edema cerebral Si 29-72 Infrecuente
Bilirrubina Alta Alta Alta
Pronóstico Mejor Malo Muy malo

Causa

Infección viral (hepatitis caninas infecciosas), infección bacteriana (enfermedad de Weil o leptospirosis), ingestión accidental de medicamentos, estado de hipoxia por causa de anestesia, intoxicación, pancreatitis aguda, anemia hemolítica, filariosis, daño del abdomen (por accidentes de tráfico) o hipertermia, y el hígado no puede funcionar.

Síntomas

De repente desaparece la alegría y el apetito. Se presentan vómitos, diarreas y un aumento de necesidad de agua y de producción de orina. Se observa ictericia: el cuerpo se pone amarillo (el perro blanco cambia el color de la piel, y en el perro de otro color cambia a amarillo el color de las membranas mucosas de la boca) es uno de los signos característicos. Si el daño es severo, se puede presentar la encefalopatía hepática, término médico para describir un problema neuropsiquiátrico causado en el cerebro y el sistema nervioso por toxicidad causada por sustancias del tejido hepático que se desprenden del hígado y viajando a través del torrente sanguíneo llegan hasta el cerebro. Los síntomas son: después de comer de repente se pone enfermo, depresión, empuja la pared con la cabeza, la ataxia, el movimiento de vueltas sobre sí mismo, convulsiones y el coma. En el caso de que el daño del hígado es muy intenso, también presenta heces negras, vómitos con sangre, sangran las membranas mucosas y también bajo la piel. Muchos de los síntomas se parecen a los de la pancreatitis o la anemia hemolítica.

Exámenes

  • Hemograma completo pruebas metabólicas básicas AST/ALT
  • Fosfatasa alcalina
  • Bilirrubina
  • Pruebas para hepatitis aguda (hepatitis A y B, virus)
  • Anticuerpos antinucleares
  • Anticuerpos del músculo liso Amilasa y lipasa
  • Ceruloplasmina
  • Tiempo de protrombina, tiempo de tromboplastina parcial, RIN)
  • Anticuerpos Anti-hepáticos/microsomales renales
  • Amoniaco Anticuerpos contra el VIH (SIDA)
  • Acetaminofeno en suero Cobre en suero y orina
  • Toxicológico de orina
  • Lactato deshidrogenasa β-hCG (mujeres)

Tratamiento

Puesto que es una enfermedad súbita, se hace el diagnóstico y el tratamiento a la par. Por ejemplo, si el perro va a la montaña y no está vacunado contra la enfermedad de Weil, se puede dudar entre esta enfermedad y se le proporciona antibiótico. Si se piensa que está causada por alguna medicación, lo detiene. Durante los primeros 2-3 días normalmente no debe comer y se le aplica fluidoterapia para proporcionar agua y electrólito. El tratamiento para reducir el amoníaco que provoca la encefalopatía hepática es también importante. Al mismo tiempo se debe proporcionar vitaminas y azúcar a través de la fluidoterapia. Cuando el animal puede comer, se le empieza a dar alimentos con proteínas limitadas. En caso de sangrado intenso, puede ser necesaria la transfusión de sangre y se debe suministrar vitamina K. Aunque depende de las causas y del grado del daño del hígado, la convalecencia es bastante positiva una vez se ha superado el periodo agudo porque el hígado tiene una alta capacidad de recuperación. Sin embargo, en ocasiones se puede producir una cirrosis por lo que conviene vigilar bien la evolución del animal.

Complicaciones

Intracraneales

La más contumaz es el edema cerebral y sus consecuencias: la hipertensión endocraneana y la herniación meníngea. Más del 80 % de los enfermos, sobre todo con encefalopatía grado III ó IV, desarrollan esta complicación, que es además, responsable de la elevada mortalidad. Su origen se debe tanto a alteraciones de la permeabilidad de la barrera hematoencefálica, como a trastornos metabólicos y enzimáticos, fundamentalmente al nivel de los astrocitos.

Cardiovasculares

La hipotensión arterial y las arritmias suelen aparecer en estadios avanzados y surgen por la presencia de un estado circulatorio hiperdinámico y una disminución de la resistencia periférica, que agrava la hipoxia.

Metabólicas

Los trastornos en la gluconeogénesis y la disminución del contenido de glucógeno en el hígado conducen a la hipoglicemia, que sufren alrededor del 40 % de estos enfermos. También se producen alteraciones en la composición lipídica del plasma, particularmente una deficiencia de ácidos grasos.

Respiratorias

El síndrome de distress respiratorio y el edema pulmonar son complicaciones graves que, unidos a la bronconeumonía, incrementan notablemente la mortalidad.

Hematológicas

Las manifestaciones hemorragíparas provenientes sobre todo a partir de las membranas mucosas del tracto digestivo, reflejan un severo trastorno en la síntesis de aquellos factores que se sintetizan en el hígado y de la disfunción cualitativa y cuantitativa de las plaquetas.

Renales

Se produce insuficiencia renal aguda debida tanto a factores sistémicos (endotoxemia, uso de drogas nefrotó-xicas) o a trastornos hemodinámicos intrarrenales. Se considera un elemento de muy mal pronóstico.

Infecciosas

Ocurre infección bacteriana fundamentalmente en los tractos respiratorio y genitourinario. Su presentación clínica no suele ser febril y su presencia la sugieren el empeoramiento de la encefalopatía o la aparición de insuficiencia renal. La elevada susceptibilidad a las infecciones depende de un déficit marcado en el sistema complemento y la reducción de las psoninas, de disfunción de los leucocitos, concentraciones bajas de fibronectina y una función deficiente de las células T supresoras. Todo ello evidencia un severo estado de inmunodeficiencia.

Trastornos electrolíticos y del equilibrio ácido-base

La hiperventilación produce alcalosis respiratoria y el edema cerebral propio de fases avanzadas, acidosis. La hiponatremia, es casi siempre dilucional y aparece fundamentalmente en casos con insuficiencia hepática subfulminante. La hipofosfatemia acompaña sobre todo, a la sobredosis de paracetamol.

Referencias