Irolán Hechavarría
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Irolán Hechavarría Bolívar (Santiago de Cuba, 11 de diciembre de 1943 - Santiago de Cuba, 11 de diciembre de 2017) fue un atleta cubano de la especialidad de 110 metros con vallas, participante en Juegos Centroamericanos y del Caribe.
Tras retirarse del deporte activo, pasó a ser entrenador deportivo de atletismo del área de velocidad. Ha entrenado a los mejores atletas cubanos de 100 metros planos y 200 metros planos.[1]
Sumario
Síntesis biográfica
Se inició en la práctica del deporte a finales de la década de 1950 en la especialidad de 110 metros con vallas. No logró resultados destacados como atleta, pero se ha destacado como entrenador deportivo de atletismo en el área de velocidad, 100 metros, 200 metros y Relevo 4 x 100 metros, logrando medallas en Juegos Olímpicos, Copas del Mundo, Juegos Panamericanos y otras competencias de nivel mundial, los atletas que entrenó obtuvieron varios récords nacionales.
Trayectoria deportiva
En 1961 logra marca de 16.1 segundos en competencia celebrada en Santiago de Cuba, así como 1.80 metros en salto de altura en evento realizado en Santa Clara. Al año siguiente integra el equipo cubano que asiste a los Juegos Centroamericanos y del Caribe celebrados en Kingston (Jamaica), cita donde obtine registro personal de 14.7 segundos en semifinal. Ese año interviene en una prueba de 400 metros con vallas, con marca de 59.7 segundos. En 1963 el mejor resultado es de 15.3 segundos. En 1964 corre la distancia en 14.9 segundos en La Habana, logrando registro de 14.8 segundos en 1965 y 1966.
Entrenador
Posterior al retiro del deporte activo en 1967, inicia la vida laboral como entrenador del área de velocidad en el equipo nacional de atletismo. Las primeras medallas en eventos internacionales las conquista en 1971 durante los Juegos Panamericanos de Cali (Colombia), cuando Silvia Chivás logra bronce, antes había ganado plata en el Campeonato Centroamericano y del Caribe de Atletismo en Kingston (Jamaica).
En 1972 continúa entrenando a Silvia Chivás y a otras corredoras como Carmen Laura Valdés, la primera logra medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Múnich (1972) en 100 metros, ambas integran el relevo 4 × 100, ganador también de presea de bronce.
Un año antes comienza a entrenar a Silvio Leonard, atletas procedente de los Juegos Escolares Nacionales, que rápidamente descolla en la élite de la velocidad en Cuba, logrando récord nacional juvenil en 1974.
En 1975, logra que Silvio Leonard corra los 100 metros en 9.9 segundos, marca que en ese momento era patrimonio de los atletas estadounidenses. Ese año este atleta se titula en los Juegos Panamericanos de México, logrando bronce además con Hermes Ramírez y plata en el relevo 4 x 100 metros.
En 1977, Silvio se convierte en el primer atleta no estadounidense en bajar de la barreras de los 10 segundos, al correr los 100 metros en 9.98 segundos, segunda mejor marca del mundo en ese momento.
Trabaja también con Osvaldo Lara (1955-2024), quien es en ese momento el segundo corredor cubano, logrando éxitos en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Medellín (Colombia), los Juegos Panamericanos de San Juan (Puerto Rico) y los Juegos Olímpicos de Moscú (1980).
En 1980 contrajo matrimonio con Silvia Chivás, de cuya unión matrimonial nacen posteriormente, Yjordan y Yjordania, quienes también siguieron el camino de los padres en la etapa juvenil.
En la década de 1980 continúa laborando con velocistas en ambos sexos, entre los que sobresalen Tomás González, Leandro Peñalver y Luisa Ferrer, con éxitos en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1982 y los Juegos Panamericanos de Caracas (1983).
Posteriormente se integran al grupo de trabajo, Andrés Simón, Ricardo Chacón, Joel Isasi, Jorge Luis Aguilera, Joel Lamela, Liliana Allen, Eusebia Riquelme, logrando éxitos sucesivos en Indianápolis (1987), Ciudad de México (1990) y La Habana (1991).
Barcelona, 1992
Con el objetivo de lograr reeditar la faena olímpica de México en 1968, se forma un grupo de corredores de 100 metros, integrado por Andrés Simón, Joel Isasi, Joel Lamela y Jorge Luis Aguilera, donde Irolán Hechavarría contó además con la asesoría de Tomás Pedroso y Silvia Chivás.
Esta cuarteta ―a pesar de no poseer grandes velocistas― logró bajo la orientación de Irolán Hechavarría una excelente sincronización en el cambio del testigo, participando en varias competencias previas, lo que le permitió enfrentar los Juegos Olímpicos de Barcelona con posibilidades de lograr medallas.
Así arribaron a la final, fase en la que le diputaron a la posta de Estados Unidos el liderazgo de la carrera, siendo superado Jorge Luis Aguilera por Carl Lewis y por el nigeriano Davidson Ezinwa para concluir con medalla de bronce y nuevo récord cubano de 38.00 segundos.
Otros atletas que estuvieron en el grupo de trabajo fueron Iván García, Freddy Mayola, José Ángel Cesar y Luis A. Pérez-Rionda, quienes repitieron la presea de bronce en la cita de Juegos olímpicos de Sídney (2000).
Prestó colaboración deportiva en México.
Publicó en Cuba varios trabajos sobre el entrenamiento deportivo, destacando El entrenamiento del velocista, publicado por la Editorial Stadium en 1976.
En 2005, a los 62 años, varios problemas de salud lo obligaron a jubilarse.
Falleció en su ciudad natal el 11 de diciembre de 2017, a los 74 años.
Era padre de tres hijos.
Fuentes
- Datos del Archivo de la Federación Cubana de Atletismo.
